En cuerpo y alma

Película bastante compleja y difícil de analizar. De ahí mi puntuación final que la dejo en interesante a secas, ya que muchas veces no sabes realmente lo que te estás perdiendo de la historia. Es una entremezcla entre lo real lo imaginario y los símbolos. El lugar, los animales en libertad como los ciervos los animales en el matadero, después dos personajes intrigantes con pinceladas de cuales pueden ser sus problemas pero que quedan un poco al arbitrio de cada uno. En definitiva como he dicho al principio interesante apuesta e innovadora historia de amor.

En cuerpo y alma es una preciosa producción húngara nominada a la categoría de "mejor película de habla no inglesa" en los Oscar (2018), y totalmente merecedora del premio. También ganó el Oso de Oro, no es poca cosa.

Esta película nos cuenta un romance muy peculiar que surge entre dos inadaptados de la sociedad, con distintas deficiencias, él con un brazo que no es funcional, ella con un trastorno psicológico y falta de habilidades sociales. Es un guión que se desarrolla algo lento, pero que no llega a hacerse pesado en ningún momento, y va de menos a más. No tiene mucho diálogo, la narración no lo necesita y utiliza muy bien los silencios. Por ello, también es aconsejable no verla en un momento con sueño o con cansancio pues puede dar lugar a caer redondos. Es mejor disfrutar la obra en un momento óptimo para ello.

En principio tiene un tono bastante serio, y hasta extraño, pero no toda la película es así, hay momentos divertidos y tiernos, de los que esbozan una sonrisa. Estamos ante un extraño cóctel de sensaciones, que deja un muy buen sabor de boca.

Destacar también la estupenda fotografía, y las interpretaciones.En especial Alexandra Borbély, cuyo papel me parece increíble, interpretar a un personaje con algún trastorno siempre es algo complicado. Merecido su premio como mejor actriz en los Premios del Cine Europeo.

En definitiva, una historia con magia, extraña pero agradable. Totalmente recomendada.

Terminando de ver “Testről és Lélekről” (On Body and Soul – 2017) de Ildikó Enyedi con Morcsányi Géza, Alexandra Borbély, Ervin Nagy, Pál Mácsai, Júlia Nyakó, Tamás Jordán, entre otros. Drama húngaro de tintes fantásticos, ganador del Golden Bear/Mejor Película del Festival de Cine de Berlín, y nominado al Premio OSCAR como Mejor Película de Habla No Inglesa, que gira alrededor de una mujer muy particular, cuando entra a trabajar en un matadero; allí, la conexión que hace con uno de los trabajadores, hará descubrir sentimientos nunca ante experimentados. La película es casi un cuento de amor o mejor dicho de enamoramiento de almas gemelas, que se encuentran gracias a momentos fantásticos, y que los conecta como si de una vida pasada se tratase. La película tiene una muy bella fotografía de los animales, sobre todo los ciervos, inclusive las vacas, momento perturbador son los ojos de las vacas, así como la mirada fija de una de ellas, que llama a la reflexión sobre El Holocausto Animal, aunque esa idea se deja de lado en el relato; al tiempo que hace un estudio de la sociedad y el mundo animal, en cuanto a sentimientos tan primarios, o si se quiere “primitivos” respecto a las conductas sexuales. Técnicamente la película sorprende por su fotografía limpia y muy nítida, pero solo es utilizada en momentos puntuales, pues toda la trama se da en interiores. Del reparto, la pareja protagonista tienen una química extraña, y hasta se hace imposible que ambos conecten, pero el filme trata precisamente de eso: Almas Gemelas. No obstante, el problema de autismo de Maria se me hace muy exagerado… Todo aquí se siente muy frío, y cuesta conectar con el espectador, no obstante, queda como un hermoso cuento de amor.
RECOMENDADA
NO tendrá nota en Lecturas Cinematográficas.
http://lecturascinematograficas.blogspot.com/

Existen variados tipos de cine, acción, terror, intriga, comedia, drama... etc. Pero yo en esta crítica a lo que me refiero es a otro concepto:

1- El cine que tiene algo que contar... y lo cuenta.
2- El cine simple, o simplista, mil veces visto.
3- El intelectual, de una complejidad solo al alcance y comprensión de unos pocos.
4- Y por último, el absurdo, que trata de enviarnos a mundos fuera de nuestro alcance, como si estuvieran en él.

Pues bien, esta película, según mi criterio forma parte del cuarto grupo. Habrá quien desee ver otra cosa en ella, o elevar el absurdo hacia algo intelectual. Como aquellos cuadros donde solo vemos líneas y trazos aleatorios, pero derivados hacia "Una introspección integradora, que aduce criterios relevantes, de un alcance sostenido a través de esa luz focalizada hacia el conjunto exterior cromático"
Si quiero también puedo ser un gran... Oligofrénico.

María y Endre trabajan en un matadero de toros. Ella acaba de llegar para hacer de supervisora. Es metódica y nada sociable. Él es el jefe de personal con una madurez vital llena de experiencia y fracasos. Él tiene un brazo totalmente paralizado y ella tiene una variante de lo que parece síndrome de Asperger. Ambos viven solos, están literalmente conectados por sus sueños y lo descubren casualmente con la visita de una psicóloga en la empresa. A partir de esta situación realmente sorprendente su vida tomará un rumbo que les invitará a aprovechar esta fascinante coincidencia.

"Una historia de amor como cualquier" podrá pensar de primeras. "Dos almas perdidas que conectan de una forma más o menos estrafalaria y listos". Efectivamente se podría haber convertido en un producto insulso y tópico si no fuera por la maestría y la forma con la que se nos presenta todo esto.

De entrada todo sucede en un entorno donde prevalece la razón mecanicista e higienista. Un matadero donde todo está perfectamente diseñado para asistir a la muerte animal y su descuartizamiento. Cuerpos sangrientos que emplean a un conjunto de personas que nos van mostrando lo más profundo de su alma. Acompañando la trama principal en la que se mezclan de forma genial la sosa vida diaria del dos protagonistas con sus sueños conectados y luminosos se nos presentan también las caras oscuras y escondidas del hipócrita, el corrupto (en todas partes hay un corrupto!) o el pijo. Nadie es lo que aparenta. O dicho de otra forma: todo el mundo esconde otra realidad detrás de un estereotipo.

Nuestros dos protagonistas deben luchar "para que sus sueños se hagan realidad" y literalmente dejen de soñar. Ante una realidad aséptica y carente de mágica fascinación emergen dos personajes que conectan a pesar estén situados en el límite de la tragedia y la soledad enfermiza.

La sobriedad de las imágenes y los diálogos contrastan con la aparición con esfuerzo y sufrimiento de un amor que no se puede ignorar de ninguna manera. Un contraste que puede parecer incluso gélido pero que consigue capturar momentos y experiencias realmente fascinantes en cuanto se llega a dar sentido a todo. Realismo mágico de un cine cargado de un romanticismo fantasioso que conecta con el universo emotivo del espectador. Bueno, en mi caso ha sido así y lo disfruté intensamente. Me podéis llamar inocente si os parece. (7/10)
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