Guardianes de la galaxia Vol. 2

En un intento de reinventarse, todos los protagonistas han sufrido un cambio en sus personalidades desde la primera hasta la segunda cinta, a raíz de todo lo que han vivido conjuntamente. Por eso, la película muestra un nuevo nivel de unión entre ellos que se va viendo patente a lo largo de los minutos. Por otro lado, esta expresión de familia, y el nuevo carácter individual de todos originan un largometraje un poco más maduro que el de la otra vez. No obstante, Gunn no se ha olvidado de por qué ‘Guardianes de la Galaxia’ tuvo tanto éxito: el humor.

Los dos cambios más drásticos que vemos en el film son los de Peter Quill y Rocket Raccon (Bradley Cooper). Ambos han estado siempre, inconscientemente, a la búsqueda de una figura paterna y por fin, después de tanto tiempo, la encuentran. Cuando se dan cuenta de su gran hallazgo ambos mejoran como personas y como amigos. Por otro lado, otro cambio drástico, que se va vislumbrando sutilmente a lo largo del film es Nebula (Karen Gillian), hija de Thanos y hermanastra de Gamora (Zoe Saldana).

A pesar de querer profundizar en muchos aspectos más serios que en la anterior cinta, ‘Guardianes de la Galaxia Vol. 2’ no se olvida de su humor tan histriónico que provoca que el espectador tenga siempre una sonrisa en los labios, esperando al acecho de una nueva broma u comentario que te haga reír. El principal artífice de todo el humor del film es el pequeño Baby Groot (Vin Diesel), aunque no nos podemos olvidar de Rocket. No obstante, y contra todo pronóstico, Ego el Planeta Viviente también alberga algunos puntos de humor, aunque su personaje este caracterizado principalmente por ser un poco siniestro.

Para leer más: http://proyectofreak.com/pw/critica-guardianes-de-la-galaxia-vol-2-coloridamente-entretenida/

Divertida, irónica y repleta de buenos efectos especiales aventuras de ciencia ficción estadounidense que impacta con sus imágenes digitales pero que se pone excesivamente melancólica en varios de sus tramos y eso que le quita valor porque abusa de la emotividad como un recurso repetitivo y simplista.
El director y guionista James Gunn (Guardianes de la Galaxia, 2014) consigue que la segunda parte de la saga siga siendo entretenida y bien divertida, pero al perderse la sorpresa de los personajes y sus ocurrencias se ve obligado a buscar golpes de efectos a través de una emotividad forzada y poco ingeniosa.
La propuesta de James Gunn muestra una notoria falta de sorpresa e ingenio creativo en esta segunda parte de la saga de Marvel y Disney, pero compensa esas debilidades con las humoradas de sus personajes y el amplísimo terreno bien aprovechado que le brindan los efectos visuales y la efectiva música que adorna la acción y la ciencia ficción. Es muy probable que haya una nueva secuela y si no se ponen a pensar algo ingenioso ingresa en un declive muy notorio.

Calificación Fanaseriecine: 6 sobre 10

No recomendable para mayores de 40 años aproximadamente y con hijos, que se preocupen por su educacion por culpa de topicos machistas .
Las canciones mejor la primera entrega.
Con todo respeto a los que valoran tan bien esta pelicula.

Los primeros minutos de una película son muchas veces definitivos para enganchar al espectador. Con esta idea en mente, Gunn crea un comienzo arrollador, en el que el pequeño Groot baila a ritmo ochentero mientras sus amigos luchan frente a una bestia descomunal. El director crea con este inicio un puente entre la primera entrega y esta segunda, dejando claro que lo que funciona no debe tocarse mucho.

Esta presentación es solo una pequeña muestra de todo el divertido repertorio que “Guardianes de la galaxia” esconde bajo su manga. Con unos diálogos ocurrentes, repletos de contestaciones imaginativas, la película transcurre entre acción y humor para desarrollar una trama que no deja cabos sueltos, y que resulta muy entretenida de principio a fin. El eterno enfrentamiento entre personajes da lugar a muchas situaciones que la película explota con facilidad, manteniendo ese pique dentro del grupo como si fuese una familia real en la que ellos pueden llamarse de todo pero son una piña de puertas para afuera.

Este Volumen II nos trae no sólo al grupo principal, sino también a algunos personajes que serán claves para la historia y que crean ese universo tan particular y creativo que hace de esta saga una de las más refrescantes de todas, dejando a un lado ese desarrollo lineal que tienen otros muchos superhéroes que parecen dar vueltas a la misma idea. La originalidad de la propuesta es su gran activo, con personajes que parecen pasarlo bien incluso ante el enorme e inevitable croma verde.

Pero el gran logro de la película es conseguir una marca propia, conseguir que el espectador sepa lo que esperar y encontrar precisamente eso. No es fácil para una película de esta envergadura, y es capaz de mantener ese tono gamberro y transgresor que se ha convertido en su seña de identidad, en toda una declaración de intenciones. Con una banda sonora arrolladora que acompaña a la perfección a todas las secuencias, “Guardianes de la galaxia 2” no solo es un entretenimiento perfecto, sino también la demostración de cómo una saga puede adquirir personalidad propia como para destacar sobre el resto.

Estos Guardianes forman parte de esos “versos libres” que se permite el Universo Marvel fuera de los ya “dinosaurios clásicos” que aún siguen enseñoreándose por el planeta de superhéroes. Y se agradece como alternativa desengrasante lúdica y licenciosa.

James Gunn repite la exitosa fórmula del mejunje inicial (futuro ochentero) para bien y para mal. Ya no cuenta con el factor sorpresa, pero puede desbarrar a fondo sabiendo que el respetable acepta el tono y los personajes son carismáticos (me encanta Rocket), por si acaso pone en juego toda la maquinaria pesada artística de Disney con un diseño de producción que luce músculo sin olvidar la belleza.

Tras unos primeros 45 minutos en los que uno duda si no esta viendo una nueva versión de “Aterriza como puedas” galáctico con sobreabundancia de chistes, la cosa se encarrila y va estabilizándose con nuevos personajes y espectaculares diseños de naves, mundos y demás parafernalias al efecto.

A pesar del generoso metraje hay que repartir entre muchos y algunos personajes quedan algo deslavazados en una historia puramente comiquera donde el sentimiento “familiar” busca la emotividad entre tanta traca. Esto último forma parte del peaje obligado del género. Dice Gunn que a esta familia le queda un Vol. 3 para dejar paso a nuevas generaciones. Mientras tanto a disfrutar del tebeo.

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