Haz click aquí para copiar la URL

Mi Idaho privado

Drama Mike Waters (River Phoenix) y Scott Favor (Keanu Reeves) son dos jóvenes chaperos que se ganan la vida prostituyéndose en las calles de Portland. Mike tiene una extraña enfermedad llamada narcolepsia, que le provoca un sueño repentino y profundo en cualquier parte. (FILMAFFINITY)
<< 1 4 5 6 10 11 >>
Críticas 52
Críticas ordenadas por utilidad
1 de junio de 2011
5 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Pertenezco a una de las últimas generaciones que sólo podía descubrir el cine independiente en minoritarias sesiones de madrugada y salas pequeñas. Así vi My Own Private Idaho con mis amigos más afines y, durante un tiempo, nos recreamos con la correcta pronunciación en inglés del título: maiounpreivataidahou. Lo repetíamos a todas horas, de un modo un tanto surrealista, impregnados de seriedad.

Con estos precedentes, intuía como algo simpático el rencuentro con esta obra a través de la descarga cibernáutica, tantos años después, ya sólo, y en la intimidad de mi casa. Y no. De simpático, nada. Revivo en primer lugar la rabia que sentí cuando fue noticia la muerte de River Phoenix. La adicción al alcohol y otras drogas se llevó a nuestro James Dean. Mira que era buen actor el tío. ¡Mierda!

Y aquí está, bordando el papel de homosexual narcoléptico y paria. Tan bien lo hace, que a ratos dudo que interprete. Y su registro se amplía al de amigo, al de enamorado, al de loca dramática, al de despechado, al de hijo. En fin, todo un recital fundamentado en el abandono, la tristeza y la marginalidad. Cowboy de Medianoche es una muy buena película que seguramente ustedes conocerán. Mi opinión es que aquí Phoenix empequeñece a John Voight en un papel con algunas similitudes. No sería un mal ejercicio ver ambas seguidas por orden de antigüedad. Con los secundarios, creo que pierde Keanu Reeves devorado por el gran Dustin Hoffman. Sí, sí, por aquí también aparece un joven Keanu Reeves consumiendo vaselina, no me pregunten cómo. Y no lo hace mal. ¡Como actor, eh!

En fin, curiosa e injustamente olvidada road movie, poética a ratos y desigual a otros. Recomendable, en cualquier caso, si te apetece ver algo diferente y tocar temas sociales que te sean algo ajenos.
Joan Ramirez
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
3 de abril de 2017
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Una película de otra época, una manera de contar una historia propia del cine experimental, pero del que experimenta con drogas psicotropicas.
La película nos cuenta la relación entre dos amigos viviendo sobreviviendo en las calles de Portland, todo ello relatado como un sueño onirico de Phoenix, en el que se encuentra con unos personajes raros, ochenteros, poetas, homosexuales, papa rico, narcolepsico, hijo rico y rebelde.
Resulta interesante ver a Phoenix y a Reeves hacer un cine tan alejado del Holliwood comercial y cercano al experimental o al cine de autor.
Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia, es un intento e hacer arte con la cámara.
El recurso, tan de moda hoy en día, del mannequin challenge me parece artificial y una versión libre de mostrar el sexo, que da un poco de miedo.
Puedo entender que sea una película de culto, de lo que fue el principio de los noventa, pero como yo no soy muy listo, esta película no es para mi.
pikuet
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
2 de septiembre de 2010
4 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Nos encontramos ante una película que sorprende. La historia un drama, que a fin de parecer simple contiene multitud de pequeños detalles que nos hacen sufrir cada desvanecimiento del protagonista. Pero si hay algo que destacar es el montaje, sublime, calculado milimetricamente, cada pequeña escena aporta un matiz a nuestra percepción conjunta de la misma. Destaco, sin lugar a dudas, los créditos tanto iniciales como finales, personalmente, los mejores que he visto hasta la fecha.
Pero desde luego esta película, la cual se engloba en el cine independiente, no sería la misma sin la gran actuación de su protagonista, el ya, desgraciadamente, desaparecido River Phoenix, que hace una interpretación maravillosa de principio a fin (y los premios, que aunque puedan resultar arbitrarios, así lo demuestran).
Una película, tal vez no muy conocida, por no decir apenas, pero que se merece un cuidadoso visionado.
Recomendada.
Pato
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
15 de agosto de 2013
4 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
No estoy seguro de si el título con el que publico este escrito quedaría mejor que el de la propia película, aunque también es válido junto con otros, utilizando siempre los destinos a los que viajan Mike Waters y Scott Favor.

Me resulta bastante sorprendente ver la cantidad de fans y el nivel de culto que ha ido acumulando esta película a lo largo de los años, ya sea por River Phoenix, cuya futura carrera, por desgracia, nunca conoceremos, o por Keanu Reeves, quien ha conseguido mantener una sólida carrera y a día de hoy tiene toda una legión de fans.

Llevaba mucho tiempo escuchando y leyendo las buenas críticas que hacían referencia a este film, ya sea como película de culto dentro de la temática gay, cine independiente norteamericano de los noventa, estar protagonizada por Phoenix-Reeves... así mismo, tenía unas ganas enormes por comprobar si es cierto todo lo que decían sobre esta película, verificar de primera mano si realmente contiene ese algo "peculiar", desde luego algo debe tener para que James Franco confirme que está obsesionado con la misma hasta el punto de que, con el permiso y colaboración de Gus Van Sant, haya realizado una película llamada "My Own Private River", una especia de nuevo montaje con más imágenes de River Phoenix. Habrá que esperar a que salga a la luz su contenido.

Gus Van Sant consigue contar una historia muy interesante, con unos personajes muy elaborados (especialmente River Phoenix) y sobre todo, el papel que desempeña la fotografía (que raro que el propio Gus no ejerciera tal función). Pudiera ser que la manera de dirigir ciertas escenas y principalmente el montaje tengan mucho que ver en el éxito de la cinta, añadiéndole un toque un tanto "experimental" a ciertas secuencias.

My Own Private Idaho podría dividirse en dos partes, o mejor dicho, dos historias: Mike Waters (River) y Scott Favor (Keanu), aunque se entrecrucen a lo largo del film. La parte de Scott Favor puede resultar convincente durante la primera parte de la película, pero a partir de la segunda mitad, su personaje pierde peso y queda limitado en sus funciones. Keanu Reeves ofrece uno de sus mejores interpretaciones, a pesar de sus habilidades limitadas (definitivamente limitadas y agotadas en los últimos años). Por otro lado, hay que hablar de River Phoenix; aquí el rubio se consagró de manera indiscutible con su interpretación de narcolépsico atormentado como un auténtico actor en mayúsculas, uno de los más jóvenes, carismáticos y talentosos que haya existido en la historia del cine. Phoenix se mete de tal manera en su personaje hasta convertirse en él, creando su característico tono de voz y sus gestos. Su papel en esta película es posiblemente el mejor de su corta carrera (en mi opinión, superior a la Running On Empty), y ni siquiera recibió una nominación a los sacralizados Oscars como mejor actor.

Lamentablemente nunca sabremos hasta donde habría llegado si viviera a día de hoy, un actor de la misma generación de Leonardo DiCaprio, Brad Pitt, Tom Cruise o Johnny Depp, entre otros, todos ellos con una gran carrera y reconocimiento a sus espaldas. ¿Sería igual de popular entre las nuevas generaciones? ¿Hubiera entrado en esa liga de "los mejores"? Solo podemos imaginárnoslo. Pero dentro de tanto drama, nos queda su hermano Joaquin, quien se ha consolidado como uno de los mejores actores en la actualidad y que llevará el apellido Phoenix a lo más alto con sus actuaciones y trabajo humanitario.
Koyaanisqatsi
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
18 de junio de 2017
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Gus Van Sant dirigió en 1991 una película que se ha convertido en un film de culto que con el paso de los años se ha hecho un hueco entre las cintas imprescindibles de ver en la vida.
Tengo que decir que yo hasta ahora nunca la había visto, y al final decidí verla en versión original. Tengo que reconocer que no me ha parecido para nada tan brillante como me imaginaba. No digo que no tenga cosas y momentos que llamen la atención, pero en general me esperaba más de lo que luego me he encontrado; ya que me ha resultado un poco pesada.
Tal vez sea que el director Gus Van Sant no es uno de mis favoritos. He visto algunas películas suyas, y salvo "El indomable Will Hunting" que me gusta mucho, el resto me han parecido un poco flojas. A lo mejor no he tenido suerte con él, ya que es un director muy valorado; pero su cine siempre me parece que cuenta con diversas escenas rodadas de forma extraña que resultan originales, pero que en realidad no aportan nada. Uno ve esas escenas y piensa "que curioso el rodar así", pero si lo analizas; uno es consciente que no entiende el motivo de porque ha dado ese enfoque.
Él es un director que en muchas de sus películas mete el tema de la homosexualidad. En este caso, nos retrata la vida de dos jóvenes chaperos que intenta subsistir como pueden. Uno de ellos sufre narcolepsia y está obsesionado por encontrar a su madre que no ve desde que era un bebé. Ambos emprenderán un viaje en busca de esta mujer, y también en busca de ellos mismos.
Como decía, la temática resulta muy interesante y es la primera vez que se expone en el mundo del cine el día a día de unos chaperos. Un tema bastante tabú para la sociedad del momento, y que en esta ocasión se expone de una forma que no es explícita pero tampoco sutil.
El guion resulta interesante en algunos momentos. Es más, empieza muy bien y uno se adentra fácilmente en la trama que expone una realidad de una manera concreta. Pero también el guion está lleno de escenas extrañas que no tienen mucho sentido; y eso hace que se desconecte fácilmente de la trama y al final no resulte tan redonda como uno esperaba.
Los dos actores que dan vida a los protagonistas son River Phoenix y Keanu Reeves. Ambos hacen un trabajo excepcional en este film y River Phoenix ganó la Copa Volpi al mejor actor en el Festival de Venecia. Su actuación es muy brillante y tiene muy merecido el premio. El personaje de Keanu Reeves no es tan jugoso, pero su trabajo también es fantástico.
Curiosamente un par de años después River Phoenix moriría de sobredosis, y es que llevaba una vida como uno de estos personajes marginales que retrataba Gus Van Sant. Dejando de lado la prostitución, la ficción y la vida real seguían un camino paralelo en el día a día del protagonista.
En fin, "Mi Idaho privado" es un film de culto que es muy respetado y valorado por público y crítica. Yo la verdad es que me esperaba mucho más, pero tengo que reconocer que es interesante de ver por saber como se expone este tema tan poco visible en cine; y sobre todo por las grandes actuaciones de sus protagonistas.
icaro_81
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 4 5 6 10 11 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow