Salvando las distancias

Nueva comedia romántica, esta vez con el sello Apatow. Esto quiere decir que normalmente el protagonista va a ser masculino, cercano a los 30 y con el dilema de mantener su vida de soltero (o sea, borracheras y cuelgues con los colegas) o asumir las responsabilidades que se le suponen a una persona de su edad (o sea, tener una relación estable, un trabajo bien remunerado, casarse, tener hijos, etc).

La verdad es que la realizadora Nanette Burstein, acompañada por el guionista Geoff La Tulippe apenas se salen del camino establecido. El protagonista, Garret (Justin Long) prácticamente cumple todos los requisitos, aunque en esta ocasión no hay ningún dilema ya que en realidad, Garret desea tener una relación estable. Por ello, cuando conoce casualmente a Erin (Drew Barrymore) decide apostar por la relación pese a que ella debe marcharse al otro lado del país para desarrollar su carrera de periodista.

De esta forma, en realidad, el motor del film vienen a ser los problemas y sobretodo contínuos desencuentros que supone mantener una relación de esas características. y eso aderezado con los típicos chistes fáciles a cargo de los amigos de Garrett, lógicamente un par de tipos que todavía no han conseguido (ni han querido) superar la fase las fiestas universitarias. No es muy complicado imaginarse ni la temática ni la calidad de los chistes y gags que puedan salir de tales tipos.

La base de un film de estas característas es, sin duda, la química de la pareja protagonista. En este sentido Long y Barrymore sacan buena nota aunque tampoco destacan excesivamente, ni por mucho ni por poco. Parece claro que la Barrymore ha optado por seguir un camino fácil, participar en la producción de sus propias películas y aprovecharse que todavía puede interpretar papeles de personajes que se suponen que son más jóvenes que su verdadera edad. Esta actitud es lícita. Todo el mundo tiene derecho a comer, pero ya que cada vez cuesta más una entrada de cine, se podrían plantear el hecho de ofrecernos algo que al menos también suba en consonancia con el aumento del IPC.

En este sentido, optar por ver un film de las características de "Salvando las distancias" es agarrarse a un valor seguro. Te dan exactamente lo que se espera de una producción que lleva el sello Apatow. Ni más ni menos.

Tengo que admitir que tengo cierta debilidad por las comedias románticas, "Salvando las Distancias" es una buena película, agradable al principio pero se me hizo tediosa al final, pero es una buena película. El guión no es bueno, pero tampoco es un mal guión. La historia es agradable, divertida, me ha sacado más de una sonrisa, en especial el buen Dan, pero quizás repetida. 5,6/10

Realmente no sabía que es lo que me iba a encontrar. Esperaba una comedia romántica típica, pero es cierto que el humor es muy irreverente y los personajes secundarios lo hacen genial. La pareja protagonista tiene mucha química entre ellos y eso se nota a lo largo del film y lo beneficia de forma evidente.

No descubre nada, ni es novedosa, pero es muy, muy divertida.

Hay unos conceptos difusos del mundo del famoseo y el artisteo de Hollywood que son los de ‘novia de América’, ‘Reina de la comedia (americana, que es como decir del mundo)’ y similares que surgen siempre cada vez que una chica mona se pone de moda con un par de películas. La lista es interminable y, últimamente, excesivamente volátil pues varía de una película a otra y, casi, de un tuit a otro pero se me vienen a la cabeza tres nombres incuestionables que lograron mantenerse un considerable periodo de tiempo: Julia Roberts, Cameron Díaz y Jennifer Aniston. Aunque la primera no es muy santa de mi devoción, no negaré que todas ellas reúnen las cualidades que se esperan de la poseedoras de esa corona ficticia… pero hay, para mí, una actriz infravalorada que debería pertenecer a ese grupo.


Hablo, obviamente, de Drew Barrymore. No voy a entrar en la parte física, que para eso hay gustos de todos tipos, pero además de tener una carrera duradera, prolífica (y poco reconocida) estuvo durante casi veinte años (desde comienzos de los noventa hasta 2010) protagonizando un éxito tras otro, generalmente comedias románticas o dramas románticos, muchos de los cuales se sostenían total o parcialmente gracias a un encanto natural, de esos talentos que se tienen o no se tienen, que ha encandilado a casi todo el mundo desde “E.T.”. Los que han tenido la suerte de disfrutarla, saben de lo que hablo. Los que no, probablemente chavalería seguidora de Elite y Euphoria, me llamarán boomer y cosas peores, así que no voy a insistir y sólo diré que cualquier película de Barrymore anterior a 2010 es diez veces mejor que las mierdas de ahora y que ella tenía más atractivo en la uña del dedo pequeño del pie que Zendaya, Corberó y compañía.


“Salvando las distancias” no es de sus películas más memorables, pero tiene un pase gracias a ella. Bueno, realmente, gracias también a Justin Long y a la facilidad de ambos para crear química con quien les toque al otro lado del guion. La película se plantea como una comedia que se desarrolla alrededor del tema del amor a distancia y nace un tanto obsoleta en una época en la que skype y los smartphones ya eran algo cotidiano y las redes sociales empezaban a abandonar la fase embrionaria. Para ser sinceros, ni los diálogos ni los sketches llevan la marca del genio pero, por suerte, ahí tiene a Barrymore para poner una de esas caritas zalameras que engatusan al espectador para hacerle reir, llorar, disfrutar y sufrir con sus aventuras, éxitos o desengaños. Se deja ver.

Así definiría con pocas palabras a ''Salvando las distancias''. Reconozcamos que antes de verla o simplemente después de ver el trailer no se puede esperar gran cosa, pero lo que nadie se espera es que llegue hasta el punto de ser aburrida, muy lenta y por supuesto que no contenga escenas de risa auténtica. Está claro que la diferencia entre comedia y comedia romántica es evidente; la comedia hace gracia y la comedia romántica no.
La historia que nos ocupa no es descabellada puesto que le podría pasar a alguien en la realidad, pero en mi opinión le faltan muchos detalles para rozar siquiera el aprobado. Personalmente le habría añadido muchos más momentos graciosos o que, al menos, te hagan sonreír. Desde que empieza hasta que acaba vemos que tiene un par de escenas (contadas) que te hacen sonreír, pero nada más. Y creo que alguna ya aparecía en el trailer...
Del apartado interpretativo es francamente lamentable y decepcionante. Ignoro si esta clase de cine agrada a alguien, pero lo que es a mí me ha dejado muy decepcionado y con ganas de que llegaran los títulos de crédito porque ''Salvando las distancias'' es aburrida a más no poder. Ningún actor ni actriz salva ''esto'' de la quema. Drew Barrymore, como siempre, no sabe actuar y Justin Long en esta cinta no pega ni con cola.
En resumen ''Salvando las distancias'' está únicamente recomendada a quinceañeras o a mujeres adultas, porque lo que es al resto de espectadores defraudará enormemente. Es una auténtica pérdida de tiempo. Y todo sin mencionar el 6 que posee de nota media... ¿Nadie se da cuenta de que es excesivo? Como para fiarse de las notas medias. Una basura de película.

Lo mejor: Un par de momentos contados que te hacen sonreír.
Lo peor: Todo lo demás. Demasiado larga para la tontería que nos cuenta, no hace gracia, es muy lenta y aburrida, interpretaciones horribles... Un asco.

* Mala con ganas *