Animal Kingdom

La historia trata de un chico que se queda huérfano y debe ir a vivir con su abuela. Por la casa pasan habitualmente sus hijos, drogadictos y delincuentes, que progresivamente van involucrando al chico en sus actividades. La familia es vigilada por la policía, y la tensión va creciendo hasta que todos acaban enfrentándose entre sí.

Una descripción interesante de como la delincuencia puede llegar a corromper las relaciones humanas y el sentido de la familia. Una historia cruda y triste que te mantiene atento a la pantalla en todo momento. Sin embargo, el guión es un poco flojo, y algunas situaciones o reacciones de los personajes tienen poco sentido. Las interpretaciones tampoco son de calidad, pues la mayoría de los personajes son bastante inexpresivos.

Sencilla, simple, minimalista y desagradable historia de mafiosos australianos de barrio, gente en apariencia normal pero capaz de albergar tanta maldad, rencor y oscuridad como los peores gángsters del cine… y con mucha menos clase y glamour, con camisetas de tirantes y chanclas de andar por casa. Muy alejada de la Cosa Nostra que nos muestran habitualmente las películas, en las antípodas de “El Padrino III” y más cercana a unos Soprano de barrio, lo que dota a esta “Animal Kingdom” de una proximidad y cotidianeidad que asusta y mete el miedo en el cuerpo pensado la cantidad de mala sangre que puede albergar una familia que podrían ser perfectamente nuestros vecinos. Incluso, si las circunstancias hubiesen sido otras y la vida hubiese venido peor dada, podríamos ser alguno de nosotros quienes nos viésemos en ese mundo.

“Animal Kingdom” es dura y para nada agradable. No deja buen cuerpo, pero es concisa, fácil de ver y absolutamente impredecible, por eso es tan fácil reconocer en ella comportamientos reales y situaciones conocidas, metiéndonos en la historia como si mirásemos por la mirilla y pudiéramos observar a hurtadillas las vidas de algunos de nuestros vecinos. Sorpresa agradable desde el otro lado del mundo.

La historia que se plantea en esta película es buena, muy buena...a pesar de ser un "dramote". Sus problemas (porque tiene varios) y de ahí que la puntuación que le doy sea un 4, son:
- Los actores no son creibles en ninguno de los personajes, excepto en dos el de Joel Edgerton (uno de los tíos de Josua) y el de Jackie Weaver (su abuela).
- La cámara lenta no es buena idea, de hecho es muy mala idea...se usa cuando no se debe, y mucho!. Eso hace que la película se haga más tostón si cabe.
- Por partes la película es previsible, y por otras piensas ¿cómo es posible que se les pasase esto por la cabeza?.
En general la sensación después de verla es de decepción porque te esperas más de lo que recibes y sientes que has perdido unos 100 minutos de tu vida...

Yo siento tener que decirlo pero el argumento de esta película de original no tiene nada. Lo que hace David Michôd básicamente es llevar a la gran pantalla la inolvidable canción del grupo Tequila "Mister Jones". Por si alguien no la conoce ahí va:

Mister Jones abrió la puerta,
vio a su madre recién muerta
y la sangre del chaleco se limpió.

Guardó a su madre en el ropero,
le pusó más leña al fuego
y el invierno muy crudo se avecinó.

Llamó a su esposa y le dijo:
Mamá esta muerta en el ropero;
"Por supuesto, si yo la asesiné.

Ella puso mal la mesa,
le hundí un hacha en la cabeza
y la sangre el tapizado me manchó".

Y Mister Jones trabajaba
y su esposa asesinaba
y los chicos correteaban por ahí.

Se comían los pajaritos,
los perros y los gatitos
y otros bichos que vagaban por ahí.

Y llegó la policía
con dos carros y un tranvía
para toda la familia encarcelar.

Yo no sé por qué el sargento
me lleva al destacamento
si somos una familia muy normal.

No, si ya me daba a mí mala espina esta película cuando supe que Tarantino la consideró la tercera mejor película de 2010. Con esas recomendaciones qué quieres?

Una de las cosas que más me distancian de Animal es su abúlica, pétrea mirada sobre lo que acontece: como una diapositiva del infierno en versión clásica. Hay tensión en esa familia, pero no observo dinamismo, de hecho esa primera imagen con el prota sentado junto a un cadáver...con cara de nada desde cualquier ángulo, o bien como sobrevivir al horror con un poco de sangre fría.

Similar a la familia gangster de El padrino, pero sin poder, está muy claro que en ese ecosistema salvaje dicha familia no se encuentra en el podio más poderoso. Su fragilidad es lo que mejor se respira entre secuencia y secuencia pero, será que el cine negro me resbala, no logré jamás ponerme en la piel de ninguno de ellos.

Genérica, intensa pero anodina, Animal posee fuerza desde la inseguridad que transmite, pero el concepto final de lo que pretende transmitir, creo, se le va de las manos.