El chip prodigioso

Ciertamente hay películas que envejecen muy bien y otras no tanto. Con esta recuerdo de chaval pasármelo muy bien, hoy simplemente me ha entretenido.

Y eso que aún sin ser un gran seguidor de la ciencia ficción, si que me gusta todo aquello que tiene que ver con la reducción de tamaño y creo que no se ha explotado tanto como debiera. Cuando hablamos de chip, lo hacemos de información, pero especialmente de tamaño y aquí había mucho camino por andar en cuanto a ese tema. Y ya no os cuento si para colmo nos lo ponen a huevo dentro del cuerpo humano. Sin embargo, nos hemos encontrado una comedia entretenida, con gotas de acción y algo de romanticismo. Gran parte del protagonismo recae sobre Martin Short y a mi en particular no es que me haga partirme la caja con sus ocurrencias, si a esto añadimos que al único que le puede añadir algo de acción, lo limitamos a verlo dentro de una cápsula y al bellezón del momento, pasa de puntillas por la historia, nos da como resultado lo comentado anteriormente. Un producto para pasar un rato entretenido.

Hay escenas muy divertidas, en especial los diálogos, como el del señor en el cuarto de baño, "juegue con él amigo...pero no le hable" de lo mejor de la película.

Se trata de una de esas joyas imperecederas de los 80 que a todos nos traen muchos recuerdos cuando la volvemos a ver. Un film que nos adentraba en un mundo totalmente desconocido, pero a la vez muy cotidiano.
Se nos presenta un experimento en el que un hombre con una máquina es reducido a un tamaño microscópico para introducirse dentro de un conejo y ver como es un organismo vivo en su interior. En el momento en el que va a ser introducido, unos terroristas entran en el laboratorio para conseguir los chips que hacen que el experimento sea fructífero. En ese momento la máquina reducida es incorporada a otra persona en vez de al conejo. Y a partir de entonces empieza un viaje hacia los desconocido dentro de ese cuerpo humano, y otro viaje lleno de peligros en el exterior ya que todos intentan recuperar ese chip que se ha reducido a tamaño microscópico.
La película sigue funcionando bastante bien aunque hayan pasado ciertos años. Es verdad que cuenta con algunos momentos que se han quedado un poco obsoletos debido a que no consiguen ser tan efectivos como en años anteriores.
No obstante, como decía la película funciona bien y entretiene desde el principio hasta el fin. La mezcla de ciencia ficción y thriller consigue fusionarse bien, y eso produce que siga entreteniendo su trama y su historia en este viaje desconocido.
Los efectos especiales son buenos para la época. Uno puede ser testigo de ese interior del cuerpo humano a un tamaño gigantesco ya que todo se ve con los ojos de esa persona minúscula que se ha reducido. Así que uno es capaz de ser un viajero más en esa máquina que recorre el interior del cuerpo humano en busca de una salida.
Los actores realizan un buen trabajo todos. Dennis Quaid, Martin Short y Meg Ryan son los protagonistas que se encargan de llevar a buen puerto este film. Todos ellos convencen en sus personajes y hacen que la trama resulte más entretenida.
Joe Dante sin saberlo ni imaginárselo dirigió en la década de los 80 una de esas películas que se han convertido en una especie de clásico moderno que siempre es entretenido y agradable ver. Es cierto que en algunas ocasiones uno descubre con horror que la imagen que uno guardaba en la memoria no se corresponde con la realidad; pero este no es el caso.
En fin, “El chip prodigioso” es una película que sigue funcionando y entretiene. Cuenta con algunos momentos y escenas que no consiguen enganchar ni entusiasmar tanto como uno desea. Pero en general convence y sigue haciendo disfrutar; además de traer muchos recuerdos de esos años en que uno veía con asombro ese viaje al interior del cuerpo humano.

La carátula del VHS era increíble y siempre me fascinaba: los tres protagonistas en ella y Dennis Quaid en el centro sujetando la nave de la película en la palma de la mano.
De este modo, la maravilla de comedia de ciencia-ficción, intriga y fantasía de Joe Dante llamada "El Chip Prodigioso" fue sin duda una de esas películas que se quedaron implantadas en mi memoria cuando era crío.

Ésta nos lleva a conocer al torpe, simpático, un tanto neurótico y casi siempre frenético Jack Putter, un humilde empleado de supermercado que no atraviesa precisamente una buena racha, y que verá cómo su vida pega un vuelco de 180º cuando descubre que dentro de su cuerpo se halla el teniente Tuck Pendleton, un caradura y pendenciero oficial de la marina que ha decidido apuntarse a un secreto y revolucionario experimento de "miniaturización", que consiste en reducir de tamaño cualquier cosa imaginable.
Tuck, a bordo de una nave y tras comprobar que el experimento ha sido un éxito rotundo, cree estar en el interior de uno de los conejos del laboratorio, y no podría estar más equivocado; por culpa de un asalto al lugar perpetrado por una organización enemiga, pasa de estar en el interior de la jeringuilla del doctor Wexler, que logra huir, a introducirse por accidente en el cuerpo de Jack. Así que éste deberá hacer lo posible por sacar a Tuck de su cuerpo antes de que muera asfixiado, abandonado su aburrido empleo de cajero para vivir una excitante aventura entre gangsters, científicos, asesinos, chicas guapas y gente en miniatura que no para de entrar y salir de su organismo.

Lo he dicho mil veces: las mejores películas de fantasía y ciencia-ficción se realizaron en los '80, y quien diga lo contrario es que no tiene ni puñetera idea; ahora podemos encontrar esas megaproducciones cargadas de efectos digitales destinadas a no ser más que " "blockbusters" del verano", entretenidas, pero carentes de ingenio, pasión y alma. Por desgracia no tuve la suerte de disfrutar aquellas películas en un cine de la época, pero gracias al milagro del VHS, de los videoclubs y de un padre nostálgico he podido comprobar que las de los '80 tenían algo especial: eran disparatadas, descaradas, entrañables, algo ingenuas y entretenidísimas...eso ya no se ve hoy en día, por favor.
"El Chip Prodigioso" es uno de esos originales títulos que a los que sean fans de aquella gloriosa década y de sus comedias encantará...aunque no parta de una idea realmente original. Los cinéfilos que la vieron ya sabrán que la inspiración para ella vino del clásico de la ciencia-ficción "Viaje Alucinante", realizado por Richard Fleischer veinte años atrás. Cuando el productor Peter Guber estaba pensando en la historia pidió al joven Chip Proser que la escribiera y a Joe Dante, que venía de fracasar en taquilla con "Exploradores", que la dirigiese, pero éste le dio una negativa ya que vio demasiadas coincidencias entre el guión de Proser y la de Fleischer.

Cuando la idea fue llevada a la Warner Bros. el proyecto se le encargó a John Carpenter, quien convenció a Jeffrey Boam, guionista de "La Zona Muerta", para reescribirlo. Finalmente, Carpenter empezó con la producción de "Golpe en la Pequeña China" y Dante, sorprendido por el cambio que le había dado Boam a la historia, le ofreció a Spielberg producirlo, cosa a la que accedió junto a sus compinches Marshall y Kennedy. El sr. Dante, experto mezclando aventura, comedia y ciencia-ficción, fue el perfecto para dirigir la película.
Con su particular y absurdo humor, a veces muy negro, nos sumerge en una aventura de ciencia, acción y fantasía, con un toque juvenil muy de Spielberg y cargado de todos los tics ochenteros posibles, destacando esos villanos que parecen sacados de "Corrupción en Miami", llevándonos junto al personaje de Jack Putter, quien funciona de espectador de la misma para que nos sintamos identificados con él, por una intrigante trama que parece sacada de una peli de espías de la Guerra Fría, heredado esto de la "versión" del '66.

Un joven Dennis Quaid aporta su infinito carisma colaborando por primera vez con la que sería su futura esposa, Meg Ryan (lo del embarazo de su personaje Lydia podría considerarse todo un presagio), con la que también aparecería aquel mismo año en el "remake" de "Con las Horas Contadas". Pero, por muy protagonista que sea Quaid, el héroe absoluto de la película es Martin Short, quien nos regala una brillante (e hilarante) actuación, llevándose las dos mejores frases del film ("¡Que alguien me ayude!, ¡estoy poseído!" y "Me arreglé el pelo...a lo Clint Eastwood. ¿Has visto "El Fuera de la Ley"? ¡Qué película!"). Genial asimismo Vernon Wells, haciendo de malo, como siempre, y que no falte la presencia de Dick Miller, colaborador habitual del director.
Pese a sus dos horazas el ritmo es trepidante, los momentos cómicos se suceden uno tras otro, la banda sonora de Jerry Goldsmith es buenísima y los efectos especiales son sorprendentes (a veces un tanto grotescos).

No aburre, todo lo contrario. Uno no quiere dejar de seguir a Jack y Tuck en su emocionante peripecia, tanto exterior como interior.

Lo que leéis. No es mala, pero, a mí no me atrajo mucho este film de Joe Dante, director de "Miedos", "Pequeños guerreros", "Gremlins I" , "Gremlins II: La nueva generación", entre otras.

Entretenida es, desde luego, pero no le acabo de pillar la gracia o el puntillo. Por ello, le pongo una calificación de 5. Las interpretaciones tampoco están mal, pero son poco expresivas y no acaban de transmitir lo que yo busco de una película entretenida de ciencia ficción.

Lo siento, a quí está mi opinión.

Historia del cine ni más ni menos. No es Casablanca, ni alguna del relamido Allen. Cine para el pueblo, para las masas, películas que dan lo que prometen (que ya es decir).
No es una película en la que haya que pensar, en las que haya que buscar moralinas absurdas ni reivindicaciones peregrinas.
Un guion que mezcla aventuras, comedia y sobre todo entretenimiento. Cine para las tardes de los sábados, para ver en familia, para olvidarse de todo.
Joe Dante nos ofreció productos para todos, de los que ya no se hacen.