Biutiful

Intentaré ser breve, pues la película no merece más.

Iñárritu nos sorprendió a todos con la más que notable "Amores perros", que para todo aquel que no la haya visto, yo le recomendaría verla y ahorrase esta. Me lo agradecereis.
Luego hizo la exitosa ( aunque en mi opinión espantosa) "Babel". Pensé que un error lo puede tener cualquiera, así que no le di mayor importancia. "Biutiful" es su segundo error, y dos errores comienzan a plantear serias dudas al espectador. Dudas que se hacen más que evidentes cuando además te das cuenta que nos quiere vender la moto, y si quien te la vende es Bardem, le compras 4 o 5. Y como te insista un poco, le compras el taller de motos. Porque si algo bueno tiene la película eso es sin duda alguna Bardem.

Él lo hace de miedo, y quien se crea, emocione, ¿llore? (esto último sería muy fuerte la verdad) con esta película, todo es gracias a Bardem.

Iñárritu, has destrozado el cine social, pues tu película tiene de todo menos honestidad y libertad para que sea el propio espectador el que saque sus propias conclusiones. Es una hipócrita tragedia cancerígena, con falsa moral que busca reivindicar lo irreivindicable para llegar cuanto antes al lacrimal del espectador. La palabra ética y moral no esperen encontrarla a lo largo de la película.

Siempre se puede ver como ejemplo de todo lo que no debería ser el cine social en particular, o el cine en general.

¿Que te parece volver a Mexico, ver "Amores Perros" y volver a empezar? Es una idea, desde luego mejor que seguir así...

Será casualidad que de las dos pelis de vidas más asquerosas y cochambrosas y mierdas que he visto últimamente una se llame "Precious" y la otra "Biutiful"? Será una conspiración?

Os acordáis de la vida perra de la pobre Precious? Fea de cagarse, gorda de morirse, maltratada por su madre, violada por su padre, con hijo deficiente, analfabeta, expulsada de la escuela....? Os acordáis, no? Y a que pensábais que no había nada peor? Pues lo hay. Uxbal no es feo ni gordo pero a cambio se está muriendo de cáncer, mea sangre parece que con bastante dolor, tiene dos hijos a los que va a dejar solos porque la madre es una tarada que además los maltrata, y vive rodeado de fealdad y sordidez: su barrio es feo, sus amigos son feos, su mujer es fea, su hermano (Eduard Fernández) es feo... Oye, curiosamente sólo él, que está invadido por el cáncer, con tropecientas metástasis, se mantiene como una rosa de fornido, aguerrido y cachas. Sí, con una barbita de cuatro días, con aspecto guarrillo, con cara de fumao..., a lo Bardem, vamos, pero con una prestancia y una apostura que cualquiera diría que está el tío a dos pasos de la tumba.

Y será también casualidad que las dos películas más repugnantes de Bardem que he visto en mi vida transcurren ambas en dos Barcelonas que no tienen nada que ver la una con la otra? En serio esta Barcelona es el mismo sitio que el de la deleznable "Vicky Cristina Barcelona"? Este hombre estará esquizopático perdido o por lo menos bipolifrénico total con las dos Barcelonas éstas donde le han metido esas dos lumbreras descubreurbes que son Allen e Iñárritu. De todas formas tampoco es que te enteres mucho viendo la película porque los personajes se pasan todo el tiempo hablando en susurros y es dificil pillar onda de lo que dicen. Por las caras pillas algo pero poco, así que continuamente te tienes que imaginar los diálogos, que te los imaginas de llorar, sólo con ver las pintas miserables que tienen todos. No, en serio, si vísteis Precious y tuvísteis bastante, podéis pasar de ésta. Es pura cacadelavaca.

Fuertes emociones mal programadas pero digeribles, mejorables pero asumibles, predecibles pero no aburridas, secuencias que se hacen pesadas pero que no te importa, que no te importa pero te conmueve, en general no una obra maestra sí una buena película.

Mas allá de la crítica fácil que está inundando la película es innegable que Biutiful es un auténtico espectáculo visual. Sumergida en una de las caras de la Barcelona poliédricas y contemporánea Biutiful se despliega como une película de ritmo lento, asfixiante, insistente que a través de sus 145minutos nos brinda un auténtica cascada de sensibilidad y angustia a partes iguales. Es un torrente de imágenes atroces e interpretaciones memorables, donde cada plano, cada gesto, cada foco, cada frase y cada nota subrayan terror y rezuma sentido estético. Nada es en vano, todo en favor de la película como agente transmisor de emociones (amargas) y de sensaciones (claustrofóbicas) para contarnos algo tan normal, pero tan ejemplar, como el esfuerzo tozudo de un ciudadano anónimo que se resiste a caer al vacío. Tan aterradora como genial.

Sí, yo también he caido en la trampa. Lo reconozco, aunque ya nadie pueda devolverme el dinero que me dejé en esas dos entradas. La sensación que tuve cuando se encendieron las luces de la sala fue: ¿Pero qué me estás contando?. A Bardem no se le puede decir nada porque el pobre bastante tiene con interpretar a un medium-huérfano-mafioso-padre-pobre y encima resultar creíble; pero no se pueden hacer dos horas y media de cinta a base de sufrimiento y bizarrismo de alcantarilla. Señor director, no nos venda la moto de que esto es una peli realista porque un mafioso, para empezar, no vive en un cuchitril con polillas. Vive en Marbella y sus hijos van al cole en limusina. ¡No me fastidies! La escena en la discoteca con las gogós cara-tetas ya me pareció el colmo y fue ahí cuando miré a ambos lados, me acomodé en la butaca, resoplé y me rendí. Mañana mismo que tengo el día libre (sí, porque tengo un trabajo basura aunque mi casa no tenga polillas ni desconchones en las paredes) reúno a cuatro amiguetes, nos embadurnamos en mierda, nos metemos en un bloque abandonado y hacemos una peli del estilo. ¡Hala! y soy la revelación del año, ¿qué os parece?