Haz click aquí para copiar la URL

Yo, robot

Ciencia ficción. Thriller Chicago, año 2035. Vivimos en completa armonía con robots inteligentes. Cocinan para nosotros, conducen nuestros aviones, cuidan de nuestros hijos y confiamos plenamente en ellos debido a que se rigen por las Tres Leyes de la Robótica que nos protegen de cualquier daño. Inesperadamente un robot se ve implicado en el crimen de un brillante científico y el detective Del Spooner (Will Smith) queda a cargo de la investigación. (FILMAFFINITY) [+]
<< 1 20 21 22 23 30 >>
Críticas 146
Críticas ordenadas por utilidad
24 de abril de 2017
Sé el primero en valorar esta crítica
En estos días de avances tecnológicos que jamás hubiésemos imaginado, las máquinas continúan siendo un misterio por las incontables fábulas conspiratorias y ciertamente inquietantes acerca de sus "fantasmas interiores" que hemos ido recibiendo a lo largo del tiempo, más o menos fantásticas...

Y aun hoy día, cuando la seguridad robótica parece algo indiscutible, sigue suscitanto un cierto escalofrío y llevarnos a la pregunta de si una máquina sería capaz de sentir emociones. Estas cuestiones se llevan pensando desde hace muchos años y décadas, pero siempre que las nombramos nos vienen a la cabeza los absorbentes y trascendentales relatos de oscura ciencia-ficción robótica del sr. Isaac Asimov; surge de sus costillas la obra cinematográfica que tenemos delante, sí, pero en absoluto respetan su espíritu, su esencia. Sobre todo porque lo que hizo Jeff Vintar fue escribir algo bastante lejos de todo lo que tuviese que ver con el visionario "I, Robot".
Un recopilatorio de cuentos sobre la filosofía y moralidad del robot, su cerebro, su posible alma, la cibernética, la postura de la sociedad con respecto a ello, la aparición de las Tres Leyes de la robótica y el personaje de la doctora Susan Calvin, que sería objeto de adaptación durante más de tres décadas...pero el cual acabó torpedeado en un guión que tomaba referencias y hacía homenajes aquí y allá mientras por otro lado, de la mano del dudoso Akiva Goldsman, se iban introduciendo otros personajes y argumentos propios. Proyecto de larguísimo aliento que sufriría algo similar a lo de "¿Sueñan los Androides con Ovejas Eléctricas?" para finalmente transformarse, de una manera excesivamente pervertida, en "Blade Runner"...

Entonces acaba metido en todo este embrollo Will Smith, que ejerce de productor ejecutivo, y uno no puede sentir lástima por Alex Proyas, porque de contar con el material adecuado y un estudio menos empeñado en hacer una película de acción al uso, podría haber firmado una obra tan excelente como su anterior "Dark City", de la que ésta difiere en millas de distancia. Sólo las escenas principales donde Smith hace de sí mismo (y eso no es un halago...) ya son suficientes para atisbar que esto está hecho para mayor gloria de la súperestrella.
Una sociedad inmersa en una era tecnológica donde humanos y máquinas conviven apaciblemente; Spooner es como un Harry Callahan del futuro, una bestia anacrónica, chula y malhumorada que detesta alzar la vista y ver a un robot repartiendo el correo. De tener un tratamiento más serio, el personaje podría haberse acercado a Rick Deckard; las tramas de "Little Lost Robot", "The Caves of Steel" y otros relatos de Asimov se revisitan y quedan encajados en la típica intriga de asesinato y conspiración donde una máquina (en este caso Sonny, el más carismático de todos los protagonistas) puede tener sentimientos, sueños y además puede asesinar a un ser humano, con una malvada inteligencia artificial de por medio.

Susan Calvin toma el aspecto de la guapa Bridget Moynahan, que la encarna con una frialdad detestable (dan ganas de arrancarle los dientes cada vez que abre la boca, pero ella tampoco tiene culpa del insulso guión que le dieron...). Lo siguiente es centrarse en la búsqueda de Spoon del culpable de matar a Lanning, científico de US Robotics (antes US Robots & Mechanical Men), en lugar de interpenetrar en la psique de Sonny (algo que habría llevado el film a las esferas oscuras de "Ghost in the Shell"). Así que Proyas se limita a seguir a Smith dando tumbos con una cámara demasiado inquieta y un ritmo "a lo Bay".
Aunque "Yo, Robot" se ve afectado sobre todo por el "síndrome "Matrix" " (ficción con cúmulos de ideas filosóficas y psicológicas cuyo nivel de trascendencia y dificultad para chavales de instituto son respaldadas por secuencias de acción desenfrenada y miles de efectos visuales/digitales; hasta tendremos que aguantar aquí los malditos momentos "slow motion" con posturas "guays"). En todo esto, las Tres Leyes quedan como un postulado simple hecho para quebrantarse (de nuevo la perorata de "Terminator II") que lleva a la revolución robótica y al enfrentamiento contra los humanos.

Lo tenebroso de dicho discurso es la obviedad con que éstos últimos han aceptado el dominio de sus propias creaciones, una idea terrorífica que convulsiona el estómago...pero a Proyas, para su desgracia, le sucede lo mismo que a Emmerich con "El Día de Mañana": la manía de aferrarse al enfoque comercial, a contentar al ignorante populacho atragantado de palomitas, quitando hierro y sustancia a la historia, que sin embargo cuenta con millones de frases "graciosas" lanzadas en los momentos más inoportunos, muy "al estilo U.S.A.". Previsible ese clímax donde se nota el dinero invertido por Fox para asegurarnos un espectáculo de acción sin límites y deliciosamente incongruente.
Smith por lo menos no tiene el estereotipo de agente traumatizado por la pérdida de la esposa (pese a contar con un pasado trágico que también le ha marcado físicamente), incluso en ciertos momentos es de agredecer su naturalidad y desparpajo para humanizar a su personaje, pero el exceso de su propio carácter lo ahoga hasta el tedio. Por otra parte sí podemos contar con buenas participaciones como las del veterano James Cromwell, los solventes Bruce Greenwood y Chi McBride y la genial Adrian Ricard. Lo mejor, Sonny, que sigue siendo un misterio insondable en el que jamás profundizaremos.

Proyas, tras una experiencia realmente mala al vérselas con los productores día sí y día también durante el rodaje, ve a su pastiche de acción reventar la taquilla, pues es perfecto para estrenarse en Julio y amasar millones.
Pero podría haber sido otra cosa, algo mucho mejor. Así queda "Yo, Robot", como uno de esos productos comerciales de comienzos del 2.000 (que creo que ya tiene hasta su etiqueta) a medio camino de todo y de nada; entretener sí entretiene...por lo menos.
Chris Jiménez
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
17 de mayo de 2018
Sé el primero en valorar esta crítica
Una película interesante, no llega a peliculón, pero es entretenida. La primera vez sin embargo si me pareció espectacular, pero los años no le han sentado bien, se nota que casi todo está hecho a ordenador y eso no es bueno, demuestra que la century fox no le dió demasiado presupuesto al director. La trama está bien hilada, pero para mi pierdes un poco el interés, quizás un poco más corta hubiera sido lo ideal.
Zorkaer
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
21 de mayo de 2018
Sé el primero en valorar esta crítica
Interesante película, amena y entretenida. Además nos aporta una serie de reflexiones sobre las que debatir. Por lo que cumple con creces lo que se espera de un título "comercial" como este.
Nos trae la reflexión sobre las tres reglas de la robótica de Asimov, sobre hasta donde es capaz de llegar la inteligencia artificial. Si la inteligencia artificial es capaz de ser consciente de sí misma y si es capaz de sobrepasar a las personas que la crean/controlan.
Se le pueden ver las relaciones de otros "enfrentamientos" hombre-máquina, desde 2001, hasta Terminator y Matrix. Pero cada una tiene un enfoque distinto, aquí es robótica.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Millennium_Falcon
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
17 de febrero de 2020
Sé el primero en valorar esta crítica
(2004) Cine de 3.17 estrellas

-Yo robot- tenía la posibilidad de superar o al menos igualar a cintas como "2001: Una odisea del espacio" (Stanley Kubrick, 1968), "Blade runner" (Ridley Scott, 1982), "A.I. Inteligencia artificial" (Steven Spielberg, 2001), Millennium (Michael Anderson, 1989), o tantas otras de temática-ficción, si tan sólo se hubiera adaptado secuencialmente a la novela de Isaac Asimov, genio indiscutible de la ciencia ficción. Este autor tiene una inigualable libertad para sustraerse a patrones establecidos de narración, gran profundidad crítica y sus parábolas sociales y humanistas van impregnadas de una refinada ironía para filosofar sobre la condición humana y sus anhelos evolutivos.

Desafortunadamente Asimov ha permanecido casi inédito en cine, sus novelas, aún con los continuos avances en el campo de los efectos visuales, son muy difíciles de llevar a la pantalla, al menos con la esencia profunda que se intuye en sus líneas, -El hombre bicentenario- y -Yo robot-, son dos intentos errados, en el caso de -Yo robot- se desaprovecha una genial historia para dar cabida al lucimiento de Will Smith con su pose de policía musculoso, socarrón y prepotente que estuvo muy bien en "Dos policías rebeldes II, pero no tenía nada que hacer en -Yo Robot-, pero cuando se es la estrella principal y además el productor ejecutivo, se pueden tomar decisiones inapelables sobre el producto final que se exhibirá a los cinéfilos. Además Asimov ya estaba muerto y ya no podía negociar e involucrarse. (La historia sigue abierta para hacer una adaptación más digna)

Con todo ello si tienen oportunidad de verla, pasarán casi dos horas en las cuales no tendrán oportunidad de pensar en otra cosa que no sea la película, Alex Proyas el director, y Will Smith la superestrella, se encargaron de desvirtuar la historia de Asimov para empaparla de imágenes llenas de acción y efectos especiales a partir de la segunda hora, para que los espectadores se diviertan mucho y no les dé por pensar más de lo debido y se les puedan desmontar algunas neuronas, pues sucede que durante la primera hora la película parecía de verdad inspirada en la novela, la aguda inteligencia de Asimov parecía por instantes hacerse escuchar para ser meditada y analizada.

Vuelvo a enfatizar... por momentos parece lograrlo.

(2005-2019)
Por: Godofredo Oscós-Flores
arkatun
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
15 de julio de 2020
Sé el primero en valorar esta crítica
Yo Robot es otro ejemplar de un puñado de filmes señeros de tipo futurista y distópico, destinados más que nada al entretenimiento y que combinan con buena fortuna efectos especiales, argumentos clásicos del género y acción, mucha acción. Las ideas en que se basan tienen en común la relación de una humanidad suficientemente evolucionada en lo técnico con lo que pareciera ser su némesis, las máquinas.

Dentro de ese puñado destacado encontramos por supuesto la saga de Terminator -las dos primeras más que nada, ya que las "secuelas" puramente comerciales y que no aportan novedad no cuentan- y la saga Matrix. Todas ellas parecen advertirnos, mientras nos distraen, fascinan y divierten, del peligro en que estamos inmersos al volcar con ciego entusiasmo ingentes esfuerzos en el progreso de una tecnología que fatalmente cobrará identidad propia y en algún momento se emancipará de nosotros, los humanos. No sólo se emancipará, sino que procurará revertir la relación hegemónica convirtiéndonos en esclavos. Tal la oscura profecía de esta serie de películas de ciencia ficción que señalan siempre al fantasma en la máquina.

Yo Robot está basada en varios relatos del género, descollando el argumento de las Tres Leyes de la Robótica del insigne autor Isaac Asimov. En ellas se basan no sólo la programación de los robots que ya forman parte del vivir cotidiano en la Chicago de 2035, sino el sistema de Inteligencia Artificial VIKI que progresivamente tiende a controlar todos los aspectos gubernamentales de la gran urbe. La historia se desencadena con el aparente y misterioso suicidio del Dr. Alfred J. Lanning, el padre de la corporación de robots USR. A partir de aquí el film adquiere un tinte políciaco y de suspense, enriqueciendo y sumando complejidad al entramado sci fi característico, lo cual verdaderamente le otorga un plus digno de remarcar, una singularidad de Yo Robot que, a mi ver, la ubica incluso por encima de los otros títulos mencionados.

Todos estos films han tenido un muy buen suceso merced a la conjunción de varios factores en los que invariablemente resultaron afortunados. Así, el interés, la novedad y la corrección de los temas de naturaleza futurística en los que se basan; la amenidad de los relatos, el carácter lúdico de los mismos, el enrolamiento sin complejos ni pretensiones en el campo del cine de entertainment; y por último pero no menor, los personajes de estas historias, que siempre nos embargan esa identificación imprescindible en nuestro intercambio con el cine, haciéndonos quererlos u odiarlos pero nunca dejándonos indiferentes.

En el caso de Yo Robot los personajes centrales constitutyen una heterogénea trilogía. Arranca presentando a un atlético Will Smith encarnando a Den Spooner, policía que se ha recuperado de un mortal accidente automovilístico gracias a técnicas cibernéticas pero que sin embargo aborrece el mundo altamente tecnificado en el que le ha tocado vivir, particularmente a los robots, contra los que abriga un persistente recelo. 'Spoon' quedará encargado de investigar la muerte de Alfred Lanning, y también es el protagonista del infaltable capítulo de acción, el momento de las luchas, los tiros y las acrobacias físicas, que en este caso le restan un poco al film. Bridget Moynahan interpreta a Susan Calvin, cientista que forma parte esencial del emporio robótico USR y deberá contribuir con la investigación de Spooner. Y para completar la terna tenemos a Sonny, ni más ni menos que un robot, pero de comportamiento en un principio incomprensible, y quien será el 'Yo' de los robots de esta historia. Tres personajes fascinantes que nos mantienen en vilo hasta el magnífico y apoteótico final.

Mencionar para terminar la vena humorística en el guión -me ha arrancado más de una carcajada aquí y allá- y una excelente banda sonora. Así que, dejando aparte los pelillos que el film pueda tener y los tiene, el logrado conjunto de la obra compensa todo ello con creces convirtiéndolo en una pieza notable del género, bien posicionada entre su pares y para la que corresponde, creo, una puntuación también notable.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Danivtar
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 20 21 22 23 30 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow