Colegas a la fuerza

"Colegas a la fuerza" es una obra relativamente menor dentro de esa fiebre de películas "Buddy Film" que arrasó los cines en los ochenta y los años noventa, en especial, desde que las popularizó Walter Hill con "Límite 48: horas" (1982) y sobre todo "Arma Letal" (1987). El mismo director de la presente, John Badham, tiene al menos otros dos títulos del mismo género, "Procedimiento ilegal" (1987) y "Dos pájaros a tiro" (1990), a la que por cierto aquí se la homenajea, exhibiendo su póster. Sea como fuere, reúne en la gran pantalla a los populares y acertados Michael J. Fox y a James Woods como actores principales aunque del resto del reparto destacaría a una Christina Ricci con diez añitos en un pequeño papel y a Stephen Lang dando vida a un peligroso, alucinado y, no obstante, con un punto cómico psicópata.

En resumen, se trata una comedia de acción que tiene su especial gracia en la forma de parodiar el género policial, y de paso, el mundo del cine y el del estrellato. Su comienzo sea quizás lo más flojo, algo vulgar, pasado de rosca y estereotipado pero por fortuna la película pronto se serena y nos permite pasar un buen rato con un argumento que se anticipa al de "Castle" (2009-2016) pero que permite que sus estrellas se luzcan gracias a su indudable carisma. Incluso "Colegas a la fuerza" nos deja una recta final muy animada que no tiene nada que envidiar a cualquier cinta de acción. En definitiva, aunque no es profunda ni original, te echas unas risas, a menudo con un humor políticamente incorrecto ya desaparecido de nuestras pantallas, y te entretiene. Eso sí, me gustaría ver también la tan publicitada "Smoking Gunn II".

Que ocurre si mezclamos a un actor famoso, caprichoso y lo mezclamos con un policía cascarrabias que odia a todo el mundo, pero que es el n 1. Pues quitando el malo, que sobre actúa de sobremanera y la primera escena de persecución, logramos una película altamente disfrutable y divertida. La recomiendo para pasar un buen rato. Un placer.

Michael J. Fox es Nick Lang, un famoso actor de películas de acción y aventuras, que para prepararse para su nuevo papel quiere trabajar mano a mano con un policía de verdad, James Woods, quien acepta a regañadientes obligado por su superior.

Convencional comedia policíaca, tipo buddy movie, con personajes antagónicos a la caza de un asesino psicópata. Entre Woods y Fox hay química pero las situaciones cómicas no me lo parecen tanto y tampoco las escenas de acción tienen mucho atractivo. Lo mejor el tema que el rapero metido actor LL Cool J canta al comienzo en la discoteca y que también suena al final durante los títulos de crédito.

Con una buena química entre los actores principales transcurre esta comedia, liviana, que sin demasiados alardes logra entretener y hacer pasar un rato divertido. La trama gira alrededor de un particular policía, al que le asignan obligadamente un compañero que es actor de cine y que está ahí para sacar ideas para un papel para su próxima película. Así dos personalidades totalmente distintas tratarán de convivir, cosa bastante imposible al menos en su comienzo, mientras tratan de dar caza a un asesino que pareciera que siempre está un paso adelante de ellos. Dentro de las actuaciones encontramos a ese versátil y buen actor como es James Woods muy correcto no solo en sus escenas de acción sino en un genero en el que no incurrió demasiado como es la comedia y al muy simpático, niño eterno, Michael Fox. Si bien es simple, a veces, también vale la pena verla por ese mismo motivo.