Besos al aire (Miniserie de TV)

Esta nueva miniserie de tan solo dos episodios centrada en la etapa más crítica de la pandemia del Covid me ha gustado mucho, y es que con su forma sencilla pero a la vez eficaz de mostrar varias historias que se van conectando entre sí consigue tocarte la fibra sensible, no un vez vez, sino varias veces.
Con un buen reparto de personajes, cada uno con sus propias historias, problemas y situaciones familiares la serie nos muestra la vivencia del día a día de esas personas en pleno mes de marzo de 2020.
Muy destacable el personaje de Paco León, gran protagonista de esta miniserie y aunque a veces resulte demasiado almibarado, al final de eso se trata. El mismo personaje de Paco León es un fan absoluto de las comedias románticas y eso me lo tomo como una propia metáfora de esta serie. No es la serie que queremos ver, es la serie que necesitamos ver. Ya que para ver desgracias ya está el mundo real.
En definitiva, una serie que se ve en un par de horas y a pesar de contar historias tristes, hacerte llorar en varios momentos, también te hace sentir bien y te hace reír, dejándote con un buen sabor de boca y con la sensación de que no has visto una obra de arte, pero que a merecido mucho la pena verla.

Su cualidad mas sobresaliente, es que solo son dos capítulos con una duración de película muy larga, lo cual se agradece al evitar el sobre proceso de escenas innecesarias.

La historia aprueba entre quienes votamos en la página, por lo cercano de la temática COVID; escusa perfecta para planteamientos actuales, utilizando claves de siempre que se sabe funcionan, en el género comedia al cual pertenece. Algo que su director Ignacio Mercero conoce, tal vez por las enseñanzas y consejos de su padre, el recordado director ANTONIO MERCERO, uno de los mas queridos, a la vez que admirados directores de televisión: LA CABINA, VERANO AZUL, FARMACIA DE GUARDIA...

Todos los actores tienen oficio y recorrido, la serie lo agradece, pero poco mas existe en ella... apoyándose en un guion oportunista, se desliza tranquila por territorios cercanos. Dentro de unos años la veremos como lo que realmente es: Una serie muy sencilla, para recordar la etapa de los "besos al aire, y las palmas en los balcones"

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No me cabe duda de que esta serie se ha hecho con la mejor de las intenciones. La de homenajear a todas esas personas que en los peores tiempos de la pandemia y durante el durísimo confinamiento estuvieron al pie del cañón, arriesgando sus vidas en unas condiciones muy difíciles. En fin, todo lo que se diga de ellos es poco, y todos deberíamos estar agradecidos por esa entrega y esa dedicación.

Dicho esto, si yo fuera una de esas personas (sanitarios, servicios esenciales, etc.) me sentaría como una patada en ese sitio que esto sea lo que se le ha ocurrido a alguien para mostrarme ese agradecimiento. Un producto lleno de tópicos, predecible cien por cien, almibarado hasta la nausea y con unos diálogos que harían enrojecer a un oso polar.

De hecho yo no he llegado a ver el segundo y último capítulo. No porque se puede pasar que un guion sea simple y predecible, pero eso se tiene que hacer perdonar de alguna manera. Por ejemplo, las pelis navideñas son la cosa más tonta que hay en el mundo, pero se ven con agrado por el fondo de lucecitas y decorado, y por la nieve, los arbolitos de Navidad, etc. Pero si encima de que una peli es un coñazo, el fondo que ves son respiradores, gente moribunda, intubada, agonizante, hecha una mierda... pues mira, no.

Por no hablar de que esto no se ha pasado, amigos, que es que mañana cualquiera de nosotros, yo misma, podemos estar en esas circunstancias. Igual Mercero (supongo que hijo del famoso Mercero) se podía haber esperado un poquito para hacer este homenaje. Sinceramente no me apetece nada ponerme el cuerpo malo viendo lo que puede ser que nos espere si nos pilla el puto virus este. Y encima con una sobredosis de glucosa completamente intragable. Para que os hagáis idea, ir al espoiler.

En fin, sé que la pandemia y el confinamiento han sido muy duros para los actores. Su negocio fue de los más perjudicados, junto con la hostelería. Y entiendo que tengan que aceptar cualquier cosa, y que esto lo hayan hecho con su mejor intención. Pero ver a Paco y a María León, o a Leonor Watling en estos papeles cargados de hiperglucemia barata da mucho pudor.

Que no está la cosa como para ponerse muy finos y exigir unos guiones medianamente aceptables, vale. Pero que me va a costar mucho olvidar que los he visto haciendo esto, también.

Me sorprende los pocos comentarios que recibe esta serie. Es cierto que estamos cansados de esta pandemia como para que nos reproduzcan nuevamente el confinamiento y la saturación de los hospitales. Quizás es por eso que el ánimo para verla es reducido.

Salvando el dolor que puede suponer recordar los peores momentos de la pandemia, estamos ante una de las mejores series española y me quedaría corto si esta serie no tiene explotación mundial porque es un tema mundial: El amor, el dolor, el sentimiento y el humor, mucho humor que endulza el tema y sin ser sensiblera te deja un regusto en el cuerpo para seguir viendo mas.

Felicidades a los actores, todos de primer orden haciendo un trabajo excelente.
En la línea de películas americanas como "Historias de San Valentin" donde se entrecruzan historias que luego convergen, Ignacio Mercero reproduce con acierto esos primeros meses de confinamiento con un punto en común: El amor.
Lástima que sean por el momento muy pocos los que han tenido la oportunidad de ver esta miniserie.

Si tienen la oportunidad de verla, no la dejen escapar.

Una serie que te llega a atrapar desde el primer segundo de metraje. Dos únicos episodios son los que componen esta miniserie que refleja, de una manera de lo más realista, los efectos de la pandemia que nos empezó a azotar en la primera mitad del año 2020. Una obra visual que debería ser de obligado visionado. Una maravilla coral, ya que no hay un solo protagonista en esta historia, se van mezclando varios y cada uno de ellos tiene su propia trama. Y es que nos encontramos con varias historias cruzadas en las que se va mezclando el drama real con el humor y el romance. Creía que tendría más episodios y tras ver el segundo, me he quedado con ganas de más. La historia, el tema en cuestión se presta a ello. De todas maneras, yo creo que si la intención de sus creadores era esta, la de terminarlo con solo dos episodios, es completamente respetable, dejarlo cuando se está en lo más alto. Realmente merece mucho la pena. Indispensable su visionado. Mi nota final es de 9/10.