Torn Hearts

Eso sí, muy bien interpretado por el trío femenino protagonista, destacando a la veterana Katey Sagal.

No esperéis nada de terror, sino que se trata de un thriller bastante lento, digamos que media hora para entrar en el meollo del tema y una hora para que se anime levemente.

Un dúo femenino, va a visitar a su ídolo musical, ya retirada, que formaba otro dúo con su hermana, que se suicidó. Una lástima que ya sepamos que se trata de un thriller que intentan hasta promocionar como un producto de terror, de manera que de entrada (como dije, después de al menos 45 minutos), sabemos que algo no funciona con la señora. Y la sinopsis no deja lugar a dudas, más que explícita.

El problema es que aún estando bien rodada, y siendo todo aceptable, transcurre sin ritmo, y al menos yo, me pasé toda la película esperando a ver por donde salían los tiros, y al terminar me quedé con la sensación de haber visto un telefilm bastante cuidado en todos sus aspectos, pero al fin y al cabo, un telefilm de sobremesa con algunos momentos supuestamente inquietantes y buena estética, cuya idea básica es hacerte pensar en lo que los aspirantes a estrellas podrían llegar a hacer por la fama y el reconocimiento, incluyendo algunas pildoritas sobre la dificultad de las féminas en este mundillo (que lamentablemente, es tanto en el terreno musical como en todos los demás).


Wolf.

Está bien, pero no tan bien.
Tiene todo lo que se puede esperar de una película como esta, pero no saben explotar al máximo su potencial, algo irónico porque es de lo que más habla la historia.
Eso de modernizar un cueto de hadas, está bien, es de lo mejor, pero no saben llevarlo del todo, es como que en cada escena uno espera algo más que finalmente no sucede, un constante quiero y no puedo o no me animo.
Lo peor: que no le den con todo al humor negro, el terror o a nada, frente a la duda siempre elige el lugar común, lo que la vuelve muy predecible.
Lo mejor: Katey Sagal, igual podrían haberla aprovechado mucho más, la tenían ahí como la bruja del cuento y no saben sacarle todo el potencial.
Abby Quinn y Alexxis Lemire están bien, más que correctas.
Los personajes son coherentes, pero para una historia como esta es un arma de doble filo, ya que tampoco hay sorpresas, se adivina lo que va a hacer cada uno en casi todo momento.

Lo primero que tendría que resaltar es que no se trata de una cinta de terror, si vamos a catalogar una película de terror cada vez que veamos un par de muertes, prácticamente el 80% de las producciones serían de dicho género.
Yo diría más bien que es un thriller dramático musical, y digo musical porque no en vano dispone de 5 o 6 pasajes donde oímos canciones tanto narrativamente como cantadas por nuestros protagonistas.
El punto fuerte sin duda se lo lleva el trio de chicas, que actúan a un nivel superior a la media, sumado a un hilo argumental que aunque pueda hacerse algo parsimonioso, crea cierta tensión por ver lo que sucederá a medida que avanza la trama.
Aún así, al llegar a su resolución vemos que la credibilidad salta por los aires, el desarrollo de los personajes se torna excesivamente forzado y similar a cualquier tratado random ya visto, ver spoiler.
Como drama psicológico o thriller es aceptable y no aburre, pero si buscáis terror, sangre o sucedáneos, aquí no lo encontraréis.

Película a mitad camino entre un thriller psicológico y terror, que está dirigida por la responsable de la decente 12 Hour Shift (2020), y que está protagonizada por Katey Sagal (Sacrificio de Leyenda, 2016), y Siloh Fernandez (Posesión Infernal, 2013).

Esta película trata de un dúo de música country que sale a la búsqueda de la mansión privada de su ídolo y termina en una serie perversa de horrores que le fuerza a afrontar los límites a los que está dispuesto a llegar por sus sueños.(FilmAffinity)

La película tiene un extraño tono muy ambiguo que el espectador no sabe, depende de ciertos puntos del metraje, si coger como film de terror, especialmente por una atmósfera donde se sabe que nada va bien, o como un thriller con aspiraciones moralistas sobre hasta dónde está la gente dispuesta a llegar para alcanzar el éxito. Las actuaciones resultan solventes, aunque en ningún momento uno se termina de creer a una Katey Sagal que se pasa de excéntrica desde su primera aparición. La trama avanza de una forma pausada que dejará fuera a muchos de los espectadores que se acerquen a ver la cinta, ya que más allá de la tensión palpable entre el trio protagonista, la acción se reduce a un desenlace tardío y fugaz.

Torn Hearts es una película que, al igual que la otra cinta conocida de la directora, juega con una ambigüedad que en ciertos casos no favorece el resultado final de la cinta, pero que aún así consigue ofrecer los suficientes momentos interesantes como para que merezca la pena su visionado.

Nota personal 5/10

Destaca su lentitud, lo poco aprovechado de sus intentos por sobresalir, a pesar de unas interpretaciones bien realizadas.

El terror que se anuncia, nunca surge, y la historia que nos cuenta no merece el trayecto que debemos atravesar para la escasa diversión.

Buena fotografía y puesta en escena. No aprueba, he sido muy generoso con el 4 que le he dado.

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