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Jim Thorpe, el declive de un campeón

Drama Jim Thorpe, un indio nacido en una reserva de Oklahoma, mostró desde niño sus excepcionales facultades físicas en carreras de veinte kilómetros entre su casa y la escuela. En su época de estudiante en la escuela Carlisle, una institución dedicada a la enseñanza de niños indios, Jim fue descubierto por un entrenador de atletismo.(FILMAFFINITY)
Críticas 4
Críticas ordenadas por utilidad
11 de febrero de 2011
13 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
Fue en tiempos muy difíciles para las minorías raciales de los Estados Unidos de Norteamérica que, un indio algonquin de Sac and fox, en Illinois, comenzó a ser reconocido por sus inigualables facilidades para el deporte. Para su tribu se llamaba, Wathohuk. Como una premonición, este nombre significa, “Sendero brillante”, pero, en la reservación donde ahora viven sus padres y hermanos de raza, se le ha bautizado, Jim Thorpe ya que, desde que se produjera su rendimiento, a los indios se les considera ciudadanos estadounidenses.

Wathohuk, nunca apreció los libros, aunque fue a la escuela para aprender lo necesario, pero, correr como una gacela le causaba un placer indescriptible... y llegó, entonces, el día en que fue descubierto por el entrenador de la escuela Carlisle, Glenn S. Warner -mejor conocido como Pop-, y así comenzaría una carrera que lo llevaría a sobresalir en el atletismo, el fútbol americano, el béisbol, y en otros deportes omitidos en el filme como la natación, el boxeo y el golf.

Jim Thorpe, sólo tuvo un gran sueño: ser Entrenador. Fue su meta cuando de esta manera esperaba conquistar el corazón de Margaret, una de sus tres esposas. Las otras dos fueron también omitidas porque, si no, su inagotable manera de vivir habría dado como resultado un filme ¡maratónico!

Para, Michael Curtiz, fue un enorme placer que esta película le fuera asignada, pues, no sólo recordaba las hazañas de Thorpe en los Juegos Olímpicos de Suecia (1912), sino que, fue él mismo quien lo escogió como extra para, “Captain Blood”, durante el tiempo que, Thorpe, coqueteó con los estudios hollywoodenses (interesante episodio de su vida que también tuvo que omitirse en el filme).

<<JIM THORPE - ALL AMERICAN>>, es un filme integracionista que se merece un alto encomio porque, describe, con una eficacia casi documental, el gran esfuerzo por la superación que desarrolló un hombre que vivió en desventaja con la sociedad en la que fue incluido contra su voluntad. Sus méritos fueron reconocidos porque eran incontrovertibles y asombrosos, pero, aún se cuestiona que le hayan quitado las medallas que ganó en los Juegos Olímpicos y que, contra todas las batallas que se dieron para recuperarlas, sólo se las retornaron a su familia ¡29 años después de que él falleciera en el más completo olvido y sin haber superado jamás la humillación que tal deshonor le significara! Esto, y la muerte de su hijo Jim, sirvieron de detonante para su aguda depresión y alcoholismo. En realidad, Thorpe tuvo seis hijos... como pueden ver, ¡todo lo hizo en una abundancia que no cabía en película alguna!

Una vez más, el señor Jack Warner (cabeza de la Warner Bros.), impuso un cierre con bombas y tarima que, ni Curtiz, ni nosotros compartimos, pero lo aceptamos porque, contra todo, nada ni nadie podrá borrar la gloria que un simple indio conquistó para el deporte americano.

Queda decir que, Burt Lancaster, Charles Bickford y Phyllis Thaxter, nos dieron caracterizaciones de gran altura.

Título para Latinoamérica: HOMBRE DE BRONCE
Luis Guillermo Cardona
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1 de mayo de 2016
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Convencional film, más o menos biográfico, sobre el considerado durante muchísimos años como el más grande atleta americano de todos los tiempos.
La narración es clara y concisa y el ritmo es el adecuado para que en todo momento resulte entretenida, bastante amena.
Se describen los triunfos en el deporte y la vida del atleta indio Jim Thorpe, así como sus fracasos y tragedias.
Los intérpretes lo hacen bien, resultando creíbles, aunque en mi opinión Burt Lancaster, en todo momento entusiasta en su papel, es algo mayor para el papel.
Lo mejor es la banda sonora a cargo del gran Max Steiner, y la fotografía en blanco y negro de Ernest Haller. Por su parte, el gran Charles Bickford demuestra lo buen actor que siempre fue.
Le falta a la cinta más imaginación y quizás, aunque resultona, puede dejar al espectador con ganas de saber más y mejor sobre el protagonista, pero resulta positiva la película al ser claramente antirracista y abogar por la unión de todos los seres humanos, sin distinciones según el color de su piel.
En definitiva, que está bien el film, por otra parte, no demasiado visto.

http://filmsencajatonta.blogspot.com.es
Constancio
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20 de marzo de 2017
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
47/07(14/03/17) Lineal y poco valiente homenaje al considerado el mejor deportista y versátil de la Historia USA, el atleta de origen indio Jim Thorpe. Dirigida por Michael Curtiz es un biopic blandito sobre un nativo americano que ganó medallas en los Juegos Olímpicos de 1912 y se distinguió en varios deportes, tanto en la universidad como en equipos profesionales. Para el realizador hacer el film, pues no sólo recordaba las hazañas de Thorpe en los Juegos Olímpicos de Suecia en 1912, sino que fue él mismo quien le escogió como extra para “El Capitán Blood”, durante el tiempo que Thorpe coqueteó con los estudios hollywoodenses (episodio de su vida que se omite en la cinta, como tantos otros importantes). Sus méritos reconocidos fueron asombrosos, pero aún se cuestiona que le hayan quitado las medallas que ganó en los Juegos Olímpicos y que sólo se las hayan retornado a su familia 29 años después de que él falleciera en el más completo olvido y sin haber superado jamás la humillación que tal deshonor le significara. Sobre la base de una biografía de Russell Birdwell y del propio Thorpe, guión acreditado a Doug Morrow (“Más allá de la duda”). El verdadero Jim Thorpe había vendido los derechos de su historia a la MGM en 1931 por $ 1.500, también fue contratado como asesor en la película, dijo "Me da sensación extraña, sentado allí viendo Burt haciendo las cosas que hice ... No creo que alguna vez fui guapo". Por aquí empieza uno de los grandes problemas de la película, un relato que intenta ser un tributo a la raza nativa USA, integracionista, hablándonos del orgullo de los indios en unos tiempos difíciles, de su dignidad y colocan a Burt Lancaster de protagonista, chirría más que el tren del río Kwai descarrilando, nadie se imagina a Bra Pitt haciendo de Malcolm X, nadie se imagina al púgil Ali encarnado por Stallone, sería visto como una falta de respeto e incluso un insulto, como así lo veo yo, ver a Lancaster hablar del racismo a los indios en primera persona cuando menos sonroja, es como ver en “El Nacimiento de una Nación” (1915) a actores blancos tiznados de negro hacer de afroamericanos, no es que Al Pacino no pueda hacer de cubano, es que aquí es crucial la raza. También resulta estridente ver a Burt haciendo de adolescente con 38 años. Como achacable es que hace una síntesis bastante constreñida del personaje, cercenando información importante que daría una mayor dimensión humana al personaje, estas licencias en pos de acercarse a la hagiografía y alejándose de la persona real.

Durante un banquete, el legendario entrenador de fútbol "Pop" Warner se levanta y da un discurso alabando a Jim Thorpe. Esto conduce a un flashback donde un Joven Jim Thorpe (Billy Gray) corre todo el camino a casa antes de su primer día en una escuela reserva india, pero su padre (Nestor Paiva) lo convence de volver, diciéndole que él quiere que su hijo sea alguien. Años después, un ahora-adulto Jim (Burt Lancaster) llega al campus de la escuela de Carlisle para continuar su educación. Allí comenzará su aventura en el mundo del deporte auspiciado por su mentor, el entrenador Glenn Scobey "Pop" Warner (Charles Bickford). Tendrán importancia en la narración sus compañeros de cuarto, Ed Guyac (Dick Wesson) y el enorme Little Boy (Jack Big Head), y margaret Miller (Phyllis Thaxter), joven estudiante de Carlisle por la que Jim se siente atraído.

La historia es narrada en off por el entrenador que descubrió el potencial de Jim, "Pop" Warner, relatando el ascenso a la gloria de Thorpe, el sueño Americano, y su posterior caída, el reverso del susodicho sueño. El ritmo resulta fluido, adentrándonos de modo ligero en las complicaciones de Jim por ser de raza india, se toca tangencialmente, sin querer hacer “pupa” a la biempensante sociedad del momento, no era cosa de retratarla como racista, se abordó de modo trivial. Sigue una ruta lineal, sin sobresaltos, sin giros, sin grandes momentos de tensión, sin diálogos para recordar, todo muy previsible en su bonhomía, escamoteándonos al ser complejo e imperfecto en favor de ensalzar su figura deportiva, siendo bastante atrompicado el film en el modo de contar su descenso a los infiernos, toman como muleta la muerte del primero de sus hijos, como una perdida capital por la que ya no levantó cabeza, cuando en realidad tuvo siete hijos más, cosa que se obvia en la cinta que solo hablan de un único vástago, estuvo además casado tres veces, y aquí solo se ve una, de hecho con esta, Margaret, es con la que murió este mencionado retoño, pero con ella tuvo tres más que se sesgan sin razón alguna. Si haces un biopic habría que ser más cercano a la realidad y no ficcionar, pues entonces te queda algo maniqueo en pos de “santificar” al protagonista, queriendo señalar el fallecimiento de este niño como símbolo de su caída, de su alcoholismo, cuando no era así, cuando su problema con la bebida era crónico, todo para llevarnos a un final buenista y políticamente correcto.

Se cercena parte elemental para entender la marginación social a que eran sometidos los nativos estadounidenses, muchos de los cuales no eran ciudadanos americanos cuando Thorpe creció. Muchos nativos americanos eran tutelados por el estado, incluso en edad adulta, hasta 1924, cuando la Ley Snyder estableció su reconocimiento como ciudadanos americanos.


Se cercena información fundamental:

James Francis Thorpe, Sac y Fox (Sauk) Wa-Tho-Huk , traducido como "Sendero Luminoso" (22 de mayo o el 28, 1887 - 28 de marzo, 1953) pero, en la reserva donde Vivian sus padres y hermanos de raza, le rebautizaron como Jim Thorpe para ser reconocido como ciudadano estadounidenses (cosa que no se dice en el film). Nació en lo que hoy es Praga (Oklahoma), hijo de una pareja de agricultores, kikapú, y Pottawatomi de ascendencia tribal. El atleta de talento natural y su hermano gemelo Charlie (murió de niño, posiblemente de la desnutrición, y que no se menciona en la película).
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
TOM REGAN
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20 de enero de 2010
0 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Drama en blanco y negro típico de los años 50. Esta vez se centra en el mundo del deporte y narra la historia de un indio nacido en una reserva y que posee unas grandes cualidades físicas. El guión nos muestra su historia pero dando grandes saltos a lo largo de ella, lo cual deja en el anonimato muchos pasajes de su vida. Bien interpretada por Burt Lancaster que también estaba dotado de facultades físicas excelentes, lo que le hizo empezar su carrera haciendo acrobacias en un circo. La película se deja ver correctamente, pero con demasiadas lagunas y sin mayor atractivo, pues es unas de las películas más flojas de este estupendo actor así como del director Michael Curtiz.


José Antonio ZG
Jose Antonio ZG
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