Grandes esperanzas

Nada mal para una adaptación. Sin embargo, en sí, la película tiende a carecer de fuerza en cuanto a la verdadera profundidad de los personajes, a veces parece que simplemente flotan a la deriva a la espera de un diálogo que peca un tanto de inverosímil, pero repito, es una adaptación. Viéndola tan sólo como una película, habría que hacerle una rebaja, aunque de momentos inolvidables, se tiende a salvar, incluso a grabar en la mente.

“Ella te romperá el corazón. Es un hecho. E incluso aunque te prevenga, aunque te garantice que ella sólo te lastimará, horriblemente, tú la perseguirás... ¿no es maravilloso el amor?”

Un resumen bastante preciso de lo trata la película. Hay un amor desgarrador, devastador, obsesivo y amargo. Y aunque solo trae desgracias, ver por un segundo que puedes ser correspondido hace que merezca la pena vivir y morir por ello.
No entraré en si traiciona o no el espíritu de la novela de Dickens, es una película y compararla al libro es una falacia.
Tanto los actores, Anne Bancroft enorme. Como la música de Patrick Doyle y temas tan bien escogidos como Life In Mono, las frases totalmente abrumadoras que contiene la historia como la gran agilidad de guion, son maravillosas y hacen de esta historia un canto épico al dolor más antiguo del mundo y que más ríos de tinta y de sangre han derramado.

Cuando se adapta al presente una obra que esta muy influida por su época se cae en el reisgo de que la historia se vuelva absurda, o de terminar cambiando la esencia de la misma.
En este caso, hicieron las dos cosas, ya que por un lado mantiene ciertas cosas, que terminen volviendo la historia absurdaen el presente.
Y por el otro la vuelven demasiado actual en otras como para que se mantenga la esencia de la obra.
Lo que la salva de no ser un bodrio son las buenas actuaciones de todos sus actores que saben bordar los diferentes personajes.

Su director, el mexicano Alfonso Cuarón, tiene una filmografía algo curiosa. A caballo entre su país y Hollywood, lo mismo hace cuentos como "La princesita" a filmes bastante adultos como "Y tu mamá también", que pone su oficio al servicio de la industria en "Harry Potter y el prisionero de Azkaban", que películas de ciencia ficción con pretensiones (la para mí fallida "Hijos de los hombres"). Uno de esos directores a los que cuesta reconocer un sello autoral, pero que no por ello dejan de ser interesantes.

"Grandes esperanzas" mantiene su fidelidad al libro en la parte más romántica y es ahí donde más se centra, dejando un poco de lado a los personajes de Anne Bancroft, como la señorona que sigue sufriendo la fuga del hombre que se iba a casar con ella y Robert DeNiro como el prófugo al que Finn presta su ayuda. Es en esa parte romántica donde más miedo tenía que se fuera la mano con el almíbar y que se confundiera una vez más el espíritu dickensiano con la sensiblería (que no es así, como muchos creen), pero afortunadamente no es así.

Uno se cree esa historia de amor interminente entre los personajes de Hawke y Paltrow, él fascinado por ella desde que la conoció, convertida en el motor de su vida. Ella algo desdeñosa y juguetona, con miedo a enamorarse aunque presuma de su insensibilidad, con una gran ternura bajo la capa de gelidez, a veces cercana y a veces muy lejana, con segundos de diferencia. Esa es la Estella bella, enigmática y contradictoria que tanto me gustó en el libro de Dickens y que Paltrow refleja muy bien.

Y si tengo que quedarme con un momento de la película, me quedo con el reencuentro en una fuente de Nueva York entre Finn y Estella, cuando ella llega de repente y reproduce ya de adultos el primer beso que se habían dado siendo niños. Si el primer beso tenía esa pureza del sentimiento infantil, en esta ocasión hay una mayor carga lasciva, con la lengua de ella rozando los labios de él a través del chorro. Algo que prevé lo que está por venir, las emociones renacidas tras años de ausencia.

Aunque la sucesión de hechos fue una serie increíble e imposible casualidad, es difícil no dejarse deslumbrar por la perfecta fotografía y por el poderoso guión de la película. Alfonso Cuarón hace posible que el espectador evada la realidad y se deje sumergir en este relato ameno y sublime lleno de ilusión y decepción.

El performance en general estuvo muy bueno: Ethan Hawke cumplió como protagonista; Gwyneth Paltrow seductora y misteriosa, perfecta; Robert de Niro, un genio sin discusión; Anne Bancroft excéntrica y fascinante; y por último, Chris Cooper, el perfecto socio.