Quiero ser como Beckham

-Un filme entretenidillo y simpático pero facilmente olvidable por falta de momentos realmente emocionantes que lo hagan permanecer en nuestra retina tras el 'the end'. Aún así merece la pena ver alguna vez esta comedia cuyo único propósito es favorecer las relaciones multi-raciales.

Ejem ¿en serio a alguien le puede gustar esta "pelicula"?. Y estoy por repetir esa frase varias veces. Me la pusieron varias veces en el instituto y no me gusto nada. Pero fui creciendo y al ver que a todo el mundo le gustaba y la alababa pense que seria culpa mia por verla en mis años mozos. Asi que de esto que la ponen por la tele y me la veo ya con mis buenos 22 añazos. Solo digo que aguante media hora viendola y demasiado para lo que se merece; es impresionante lo mala y aburrida que puede llegar a ser esta pelicula.
Nunca tendre la misma buena opinion de los ingleses: pensar que ellos han hecho las increibles Trainspotting, Lock y Stock o Snatch:Cerdos y Diamantes y a la vez esta chorrada mezcla de drama y comedia pero que no llega ni a una cosa ni a la otra me deprime.
¿Quiero que me expliquen que tiene de comedia esta pelicula? Porque yo en ningun momento me rei, no recuerdo ninguna escena graciosa o ningun dialogo ingenioso .
¿Quiero que me expliquen que tiene de drama esta pelicula? Pero si es que es imposible empatizar con los personajes. El tema de la discriminacion lo sacan de manera superficial y no profundizan en el.
Al final es la clasica historia de la chica extranjera que se va con el chico guapo.

No soy muy exigente con las peliculas pero por favor ...

Admiro realmente el valor de la protagonista, de origen indio pero de nacionalidad británica, al rebelarse a la ideología tradicional y conservadora de la típica mujer india para querer adaptarla a la británica, con David Beckham por ejemplo. Ella descubre su pasión por el fútbol británico y persigue su sueño de querer ser futbolista sin importarle en absoluto las tradiciones, ideologías y creencias de su familia y se enfrenta a la oposición de sus padres. Su familia al principio lo ve como algo descabellado y absurdo pero al final lo acabarán aceptando.

Conocí a la chica delgada con esta cinta, y ya nunca me la pude quitar de la cabeza. Y con el tiempo demostró no ser sólo una cara guapa, sino tener auténtico talento.

Pero no sólo destaca ella en la película, sino el mensaje que transmite. Una oda a la libertad de pensamiento y acción, le pese a quien le pese y aunque cueste romper con tabúes ancestrales. Porque la dignidad no se tiene, se gana peleando por ella día tras día.

Cierto es que cae en infinitos tópicos, que busca los giros fáciles de guión, y que técnicamente no es ninguna maravilla. Pero es que el cine no es sólo técnica, también es mensajes y emoción, y creo que aquí hay de los dos a raudales.

Bueno, miento: como jugadoras son inmensamente peores. Pero en todo caso, me pregunto, Gary Lineker, John Barnes y Allan Hansen, especialmente los dos primeros, de los mejores de su generación, lo cual es casi decir que de la historia, ¿cómo os habéis prestado para esta película que no llega ni a comedia? Lo digo porque en ningún momento me he sonreído siquiera. Os disculpo porque no lo sabríais y porque vuestros goles, regates y centros no se me olvidan. Pero yendo al tema, a mí me ha recordado a "Air Bud 3" (2000), esa de los perros que juegan al balompié, que de todos modos, no he visto salvo fragmentos. Pero más o menos tiene la misma hechura. Eso sí, hay un intento de plasmar las diferencias culturales que es lo más apreciable. Por ejemplo, hay que ver lo racistas que son estos indios.

El éxito de esta película está en que presenta un prototipo femenino igualitario y políticamente correcto. Ni más ni menos que quieren ser futbolistas profesionales. Esto puede ser discutible o no pero lo que no ofrece duda es que una mujer puede hacer muchas cosas mejor que un hombre pero no precisamente darle a un balón. Sin embargo, nuestra futura Beckham se pone con los chicos en el parque y les gana a todos. Sí, claro. Así de creíble es el resto del metraje con una relación "romántica" a la que le falta de todo y un club amateur que viaja a Hamburgo para echar un partido y jugar la copa o la final de no sé qué. Aunque mejora un poco desde el bochornoso principio, no puede despegarse la etiqueta de película feminista, adolescente y cutre. Yo para futbolista, me quedo con Elisabeth Shue en "Karate Kid I" (1984).