El pacto

Sin haber visto el corto que el propio Nicholas McCarthy aquí alarga hasta los 90 minutos, me temo que, tal como acostumbra a suceder, aquél será mejor o, si acaso, presentará un acabado más redondo, menos cabos sueltos, manteniendo intacta la capacidad de inquietarnos que su hermana mayor va perdiendo conforme se desliza hacia su decepcionante desenlace.
De igual modo, el amateurismo que se le presume a un corto goza de un encanto que se torna molesta torpeza trasladado a un largometraje, por más indie o de serie B que sea. En “El pacto”, ésta viene evidenciada por unos diálogos de discapacitados en boca de un reparto al que adornan unas dotes interpretativas sencillamente desoladoras. La irritante inoperancia de su protagonista Caity Lotz, hace que conspicua carne de videoclub como Casper Van Dien parezca Marlon Brando en “Un tranvía llamado deseo” (“A Streetcar Name Desire”, 1951).
Con todo, el primer cuarto de película encierra más calidad que buena parte del cine de terror de toda la última década. McCarthy recorre ese pasillo quimérico con escalofriantes travellings que nos retrotraen a “El resplandor” (“The Shining”, 1981) y a su arquitectura de pesadilla, diseccionada por Rodney Ascher en “Habitación 237” (“Room 237”, 2012), lo único que, por cierto, se salvaba de aquel despropósito.
Como afirmé al comienzo de la reseña, “El pacto” contiene pasajes gozosamente desasosegadores, una saludabilísima zozobra que se va diluyendo con el progresivo desvelamiento de la iniquidad, primero apenas sugerida —ahí es donde la película raya a mayor altura—, de naturaleza paranormal a continuación —con los tics y lugares comunes característicos, y la correspondiente merma de interés—, hasta alcanzar una tosca resolución “slasher” de muy dudoso encaje en el tono general de la historia.

No es una película de terror que aporte cosas nuevas, todo ya se ha visto antes hasta la saciedad. Mal intento de mezclar varios tópicos del género, ouija, regreso a una casa familiar, desapariciones, videntes, resulta un batiburrilo de ideas. Lo positivo es que todo tiene cierta relación, inicio con explicación del porqué del viaje de las hermanas a la casa de la madre, intento de intriga o suspense en la parte media, y final con ritmo, pero todo ejecutado sin chispa en una película de las que se intuye con un presupuesto muy bajo, por lo que alcanza el aprobado como resultado final.

LO MEJOR

- La historia en un principio resulta intrigante.
- Fotografía y planos en zonas de penumbra bien logrados.
- El tercer acto logra levantar el interés al alejarse del cliché.
- Me parece que la historia tiene un buen cierre.

LO PEOR

- Algunas actuaciones malas con diálogos poco pulidos.
- Personajes poco interesantes y con poca química entre ellos.
- Los mejores personajes no están muy bien aprovechados o salen poco.
- El desarrollo de la trama va decayendo a mitad de la película.
- Fotografía bastante amateur en espacios abiertos.

CALIFICACIÓN - 53 GRITOS de 100

- Historia | 6/10
- Guion | 5/10
- Reparto | 4/10
- Storyboard | 6/10
- Escenarios | 5/10
- Arte | 5/10
- Fotografía | 5/10
- Banda sonora | 6/10
- Posproducción | 5/10
- Género y tono propuestos | 6/10

Dejándome llevar por una nota media bastante aceptable anoche me animé a ver esta película con la intención de pasar miedo. Leí su argumento y parecía interesante y con chispa pero al final todo se quedó en nada.
Es una historia de fantasmas, es verdad, pero es de esa clase de cintas en las que el tiempo pasa y pasa y no ocurre nada. Momentos en los que cabría perfectamente un buen susto o algún objeto levitando o moviéndose solo pero no, esto no pasa. Se dedican a poner el escenario sin apenas luz y con una música que te invita a pensar que ahí va a pasar alguna cosa pero al final todo se queda ahí.
A medida que van pasando los minutos parece que empiezan a pasar algunas cosas pero son tan insignificantes y sosas que no mejoran nada el asunto. Que si una sombra rápida por aquí, que si un ruido seco por allá pero no llegan a mostrar nada realmente digno ni tampoco asustadizo.
La historia tenía miga para ofrecer mucho más de lo que ha ofrecido. Las historias de casas encantadas y fantasmas, si se hacen bien, pueden dar un producto bastante bueno ya que creo que los fantasmas son un recurso muy explotado en el cine pero que casi siempre cumple bien. Por desgracia aquí no. Como he dicho tal vez mejora un poco a medida que pasan los minutos pero el último acto se vuelve flojo y no está a la altura.
En su favor diré que también tiene un par de momentos buenos y utiliza el poco presupuesto que tiene de forma correcta mostrándonos como ''algo'' coge al personaje y lo levanta por los aires y cosas por el estilo. No es que sea algo que solucione la papeleta pero al menos lo poco que tenían de presupuesto lo han invertido bien.
Del reparto no puedo decir gran cosa porque aparte de ser desconocidos por completo tampoco es que deslumbre nadie y en una cinta de estas características son aspectos que pasan sin pena ni gloria.
En resumen ''El pacto'' es una película completamente del montón y también mala. Ignoro a qué se debe esa nota media la verdad. Para mí no se merece ni el 2. Si estáis buscando pasar miedo auténtico aquí no lo vais a encontrar y decir que la cinta aburre bastante y te acabas cansando de esperar a que pase algo. Por otra parte el título no pega demasiado con la trama aunque eso es lo de menos cuando estamos ante una cinta tan floja y mala en todos los aspectos.

Lo mejor: Un par de momentos contados y que por otra parte tampoco son para tanto.
Lo peor: Todo lo demás. La historia daba para más, tiene demasiados minutos de relleno donde no pasa absolutamente nada y te acabas cansando mucho de esperar a que lleguen las partes buenas que nunca llegan.

* Muy mala *

Demasiado rancia, con todo el respeto. He puesto pasable porque algo de emoción sí que continene. Ahora bien, este tipo de películas creo que deberían prohibirse hasta la edad de 21 años. Es americana y todo el mundo sabe lo que es América Del Norte, aunque no deja de ser una simple opinión, pero desata tentaciones, no sé, a mí no, pero educativa no es, al menos para los críos.
Hay cierto toque de conmoción, pero es demasiado melosa.