Rocky V

Tras una serie de secuelas igual de interesantes, llegó el momento de presentarnos la entrega más floja de la saga y con diferencia.
Sorprendió a propios y a extraños, pues la entrega más floja vino irónicamente de quién había filmado precisamente la mejor de la saga, el director John G. Avildsen, quién pretendió devolver a Rocky al nivel de sus orígenes en un intento inicialmente apreciable, pero que rápidamente se torna aburrido e irremediablemente flojo.

El punto más bajo de la saga, que era tristemente la última entrega de la saga, pero que luego Stallone se encargaría de arreglar 16 años después, con suerte con un nivel muy cercano al clásico original.

El oscarizado director de la primera entrega, John G. Avildsen, se hizo cargo de la dirección de la quinta. Rocky V junto con la sexta para mi gusto son las peores de la saga. La mejor es la primera, seguida de cerca por la segunda. Con la tercera empieza la decadencia pero todavía tiene un pase, la cuarta es mala con encanto y finalmente las dos últimas son lamentables.

En Rocky V Stallone vuelve de Moscú tras su exitoso combate contra Ivan Drago y descubre que su cuñado Paulie ha invertido mal su fortuna y se han arruinado (pa´matarlo a hostias al puto Paulie). Además su hijo empieza a darle problemas por su falta de atención. De regreso al barrio descubre a un nuevo talento llamado Tommy Gunn al que se ofrece a entrenar. Sin embargo, la irrupción en escena de un promotor de boxeo tentando a la joven promesa acaba por convencerle para que abandone a Rocky. De esta manera Tommy se deja llevar por el lado oscuro de la fuerza y sucumbe a las tentaciones de la fama y la falta de deportividad.

Dicen que hay una oveja negra en todas las familias. Pues bien la oveja negra de la saga Rocky para mí es Rocky V.
La película es un viaje a los inicios de Rocky en Filadelfia. Éste vuelve de su viaje a Rusia, de enfrentarse a Iván Drago pero se encuentra con que una mala gestión de su cuñado Poli ha dejado a la familia en bancarrota.
La película, aparte de ser floja, es totalmente distinta a las demás. No hay entrenamiento, no hay esa música que te erizaba los pelos, incluso por no haber, Rocky ni siquiera sube a un cuadrilátero. En su lugar podríamos decir que encontramos un drama familiar que se tendrá que adaptar a la nueva situación de pobreza. El problema está en que el guión es bastante flojo que hace incluso, que Stallone reniegue de esta película.
Las actuaciones son normales salvo la del hijo de Rocky (Sage Stallone, hijo de Sly en la vida real) que verdaderamente sobra.
Lo mejor: Aunque pese decirlo, es Rocky
Lo peor: La historia que nos cuenta y la actuación de Sage Stallone
El fallo: La película comienza con el regreso desde Rusia de Rocky. Su hijo parece que ha crecido 4 o 5 años durante las semanas que estuvo su padre fuera

Esta quinta entrega supuso un subidón en la calidad de la saga que se había venido a menos con las dos secuelas anteriores -sobre todo la de Lundgren-.

Sin descuidar el estilo narrativo que caracteriza a la saga -intro con película anterior, conflicto, y pelea final-, Stallone recupera la profundidad dramática y el buen humor que se habían perdido en los guiones anteriores. Esta cinta posee unos diálogos llenos de matices y metáforas, además de una picardía que ya se echaba en falta:
1. Periodista (a Shire): -¿aprendió ruso?
Young: -Sí, ahora es experta en vodka.
2. O ese chiste woodyallenesco que se manda Young sobre peleas y matrimonios, y Rocky no lo capta, sencillamente genial.

Otra cosa que se nota ha ayudado a dar la vuelta de tuerca para "recuperar" la saga es el aporte de Avildsen, quien no dirigía en la saga desde la primera entrega. Y digo que se nota porque si bien Stallone no es un "mal" director, Avildsen tiene más experiencia y más capacidad para envolver de pasión sus obras. En este film se nota su sello en esos momentos emotivos y llenos de adrenalina que crea sin la necesidad de una BSO inolvidable, escenas en las que sientes correr la sangre por tus venas.

Hablando de la BSO, hay que reconocer que pese a que la misma vuelve a caer en manos de Conti, esta vez es bastante insulsa; de hecho lo más destacable, musicalmente hablando, llega al final con la canción que entona Elton John y que fue injustamente nominada a los Razzies: "The measure of a man".

Pero todo lindo hasta que el novato se empieza a creer Mr. Músculo. Ahí la profundidad dramática empieza a caer grotescamente hacia un final donde Stallone demuestra que sabe escribir grandes metáforas sobre la vida pero no tiene idea de como aplicarlas. Es una pena ese mensaje desfasado de "peleando se entiende la gente", la película venía ofreciendo grandes lecciones sobre la relación padre e hijo, sobre el volver a empezar desde abajo y de repente nos damos cuenta que todos los conflictos se resuelven a las trompadas. El chico en la escuela consigue respeto a golpes, Rocky y el Tommy se miden a golpes, una pena realmente.

Las actuaciones son buenas, Stallone demuestra que bien dirigido sabe actuar, de hecho la escena del temblequeo de manos no tiene nada que envidiarle a Tom Hanks. Un hallelujah por Talia Shire y su inquebrantable fidelidad a la saga, Young sigue siendo lo más gamberro de la ocasión, y bien por la introducción de Sage Stallone (R.I.P.) que es muy acertada.

Lo mejor: el humor del guión.
Lo peor: un final desacertado desde lo argumental.

Quizás en los 90 con una saga ya quemada o al menos así se notaba un pelín en la tercera y ya bastante más en la cuarta donde hasta los giros y riesgos de sorpresa del guión ya no sorprendían pues venía bien cambiar de esquema, fórmula o táctica. En mi caso hace años que no veía la saga y con Creed a la vuelta de la esquina tocaba revisarla y las cosas han cambiado mucho ya que opinaba de la secuela de Avildsen como que era una digna secuela pero el criterio ya no es el mismo y ahora me fijo mas en los detalles aunque todavía me queda muchísimo por aprender. Pero vamos al lío. La película tiene buenas intenciones y no lo dudo como ya dije una saga ya quemada necesitaba en cierto modo cambiar de aires y no repetirse y en ese sentido lo agradezco, es un acto de valentía pero si las ideas no salen del todo bien y un personaje como Rocky lo vendes al postor más barato, Avildsen vuelve 15 años después y coge a boxeadores en vez de a actores (con cierto parecido a Lucas del dúo de cantantes Andy y Lucas) pues ya hay algo que falla y es el elenco actoral. Las líneas de guión son más pobres salvo un par de momentos brillantes donde se agradece el regreso de Burgess Meredith a la saga ya que le da cierto toque emotivo pero nada más. Porque luego vienen las risas, las sobreactuaciones y sobretodo los tópicos, muy genéricos en el ámbito relación padre-hijo, venía el señor Sly de brillar con Yo, el halcón donde la relación paternofilial funcionaba y aquí falla quedando típica, predecible e insustancial. Sage Stallone no valía como actor (que en paz descanse) y tampoco lo termina de explotar Burt Young que ya venía cojeando en Rocky IV con ese patético robot. Stallone hace lo que puede pero no es más que una mera imitación del personaje de Mickey en su momento muy empobrecido. Una verdadera lástima porque cambia de registro pero no funciona y eso es causa de que la saga Rocky debió terminar en la tercera aunque gracias a Dios que Stallone volvió 16 años después para servir de redención con Rocky Balboa. Regular.