Murieron por encima de sus posibilidades

No és això, Isaki, no és això. Yo también comparto el deseo de resucitar la guillotina y ponerla a trabajar a destajo en la plaza Catalunya, o en la Puerta del Sol, pero estamos hablando de cine, y lo que has hecho no tiene nombre. Bueno, sí, en realidad tiene muchos nombres, pero prefiero que no me censuren. Hoy, a la mínima se te ofende el personal, y es que no puedes ni abrir la boca. Has filmado algo vergonzoso, algo execrable, algo de berrinche adolescente, y encima lo has hecho mal. Fatal. Con el concurso de conocidos psicóticos del mundo del espectáculo (Pla, Riba, Sisa), y de afamados actores que debieron acceder a su fugaz aparición por un chavo y sus simpatías hacia la causa (Sacristán, Fernández, Tosar, Coronado, Arias, etc.), te has lanzado a un sinsentido, como un elefante entrando en la proverbial cacharrería, y te lo has llevado todo por delante. Escrita en estado, ejem, lisérgico, dirigida con el trasero, interpretada, es un decir, con la ayuda de sabrosas sustancias tóxicas, contando con el beneplácito de un público se supone que entregado, y que al final te dio la espalda en cuanto empezó a correr la voz, te recomiendo que vuelvas a tomar la medicación y dedicarte a tus estupendos documentales, que ya tengo ganas de ver otro tan bueno como Cravan vs. Cravan o La noche que no acaba. En serio, chingarse en la casta está muy bien, pero hay que hacerlo con arte, con elegancia, con ironía. El humor grueso ya lo practicaba Ozores, bendito sea, y ya sabemos con qué resultados. Anda, sé bueno y enmienda tus pecados. Es que, de verdad, no me he reído ni una sola vez.

Genial locura. Divertida y con mensajes subliminales para tomar conciencia.
Genial interpretación de Albert Pla, muy superior a la altura de su interpretación en Airbag.
Este film, tiene los momentos muy buenos en las escenas alocadas de su guión. Baja un poco el nivel cuando se quiere hacer seria, pero en lo general, las carcajadas han invadido la sala de cine.
Uno de los mejores films que he visto este año.

Para desgracia de todos los que amamos el cine español, existe aquí un género muy especial que, aunque intuyo que también se desarrollará en otras cinematografías, es muy nuestro. Se llama "Hago esta película porque me sale de los mismísimos". Lo vienen desarrollando directores ya veteranos (Almodóvar, Saura...) pero ha prendido con singular fortaleza en las nuevas generaciones. Estos singulares creadores deciden un día que su reparto va a interpretar lo que ellos quieren (por supuesto), con el guión que les da la gana (faltaría más) y que, lo más importante, el público les va a dar absolutamente igual. Y no. El público importa. Y si los espectadores que pagan su entrada se encuentran con esto ('Murieron por encima de sus posibilidades') pues se cabrean, se disgustan y dicen nunca mas. Pues eso.
Y una de los factores que más ofenden es que este truño es obra del autor de la excelente 'Los condenados' y de algún documental estimable. Pero aquí no hay nada. Bueno sí. Hay presupuesto y también hay un reparto lleno de enormes actores (lo de el inmenso Jose María Pou 'homenajeando' a Brando en 'Apocalypsis Now' es para llorar) haciendo el más humillante de los ridículos.
En fin, de lo peor que he visto en mi vida, y uno ya se ha tragado pestiños como portaaviones.

Aún rozando la evidencia en las conclusiones, muy hilarante, con humor tosco y absurdo que se desenvuelve en una atmósfera aciaga, casi apocalíptica.

Sin gran profundidad en las conclusiones y un tanto vacua de contenido. Un tanto recurrente en su argumentación, cuesta seguirla a veces, pero realiza una sátira inteligente contra el nepotismo político y económico.

Un tanto burda pero muy divertida si consigue atraparte.

Personalmente no me ha decepcionado porque los varapalos que lleva han sido tan unánimes que ya los conocía. Así de esta manera casi me ha sorprendido. Pensaba que sería peor. De hecho creo que hay que destacar varios aspectos positivos, especialmente el juego narrativo utilizando varias líneas temporales me ha resultado sorprendentemente ágil. Así como algunos momentos discursivos a los que he encontrado la chispa.

Para mi, y para la inmensa mayoría del público ¿cúal es el problemas? Pues que los toque gore sobran; que es demasiado evidente el tono caricaturesco aleccionador; es redundante; y que sentimos que ha desperdiciado un reparto sorprendente.