La colina del adiós

Vi esta película más de 3 veces y siempre me surgieron las mismas lágrimas.
Al principio no encontramos nudos y situaciones dramáticas fuertes, solo vemos como el amor avanza en una mujer que creía que no existía y entre un hombre de fuerte corazón y sinceridad. La música de Alfred Newman es excelente a tan punto que la busqué y la toco en la guitarra evocando momentos hermosos del amor.
Para aquellos que gusten del comienzo hermoso del amor pero también de lo trágico se las recomiendo fuertemente

Cuando ví la película lo primero que surgió en mi mente fue la constatación de la enorme distancia cultural y socio-económica que había en aquellos tiempos entre los americanos y el mundo anglosajón en general con España. La relación entre el personaje que encarna el gran actor William Holden y la bellísima Jones, parece más propia de dos treintañeros de finales de los 90 o principios de los 2000 en España. Me parece una preciosa historia de amor, que sin duda me gustaría vivir, para cuando muera poder decir que mi vida ha merecido la pena.

Querido viajero incansable que vas en busca de una buena película perdida en el tiempo, si has llegado hasta estas humildes líneas guiado por nombres clásicos, quiero decirte que no pierdas el tiempo, no te detengas aquí y sigue tu búsqueda. Esto es un petardo considerable.

Jennifer Jones hace de una mujer un poco estiradilla que tiene una obsesión enfermiza con el hecho que es eurochina, o mediochina, no sé cómo dice exactamente, además que más bien parece que quiere presumir, el caso es que al principio se niega a arrejuntarse con el señor Holden y cuando al fin se decide aparecen los problemas.

Insisto, sigue tu camino e ignora esos problemas. La musiquita de fondo es agotadora y además a Holden le va ir a caballo, demuestra que las escenas cursilonas no le van y, gracias a mis reconocidas dotes de observación, puedo afirmar sin temor a equivocarme que no le gusta nada trabajar con la señora Jones, por lo que encima no hacen buena pareja.

"La colina del adiós" se ha convertido en un clásico del cine, y yo siempre he tenido unas ganas enormes de verla. Desde que vi por primera vez "Grease" y oí los acordes de la película en el musical, siempre quise ver ese film que tenía una banda sonora fantástica.
Después de verla descubrí que la banda sonora es lo mejor que tiene, pero hay que reconocer que utilizan la melodía constantemente y en prácticamente en todas las escenas. Así que al final llega incluso a cansar, ya que creo que no todas las escenas requieren la misma música.
La historia sinceramente no me emocionó. Pensaba que me iba a encontrar ante un gran drama en el que lloraría sin parar, y salvo por algunas escenas que son emotivas y estéticamente bonitas, el resto de la historia resulta bastante plasta y poco entusiasta.
Tal vez en su época fuera una gran historia de amor, pero hoy en día no me la creo y pienso que el drama no es tan dramático.
En cierto modo todo está narrado con cierta brusquedad. Una brusquedad que también es palpable en las interpretaciones de Jennifer Jones y William Holden, ya que ambos no me llegaron a convencer.
En fin, una película que me ha decepcionado ya que me dispuse a verla con un precocepto que luego no se correspondía con la realidad. Un film que narra una historia de amor dramático en un momento bélico que no llega a emocionar. Una película con una banda sonora única y mítica, que en cierto modo abusan de ella pero que aun así no cansan sus acordes.

Melodrama de factura correcta que, sin embargo, se hace monótona y repetitiva y no consigue emocionar al espectador, a pesar de tener un buen guion y algunos diálogos muy románticos y poéticos.
Su banda sonora dio la vuelta al mundo. La excelente melodía de Alfred Newman, que todos reconoceréis ya que se utilizó como homenaje en el inicio de la mundialmente famosa "Grease", es la baza que juega en esta película, a pesar de que la utilizan constantemente a lo largo de toda la cinta, llegando a romper la magia que podría haber alcanzado si la hubieran dosificado mejor.
Con el argumento pasa lo mismo. William Holden interpreta a un corresponsal de guerra, que se enamora de una euroasiática ( Jennifer Jones), en Hong Kong, entonces colonia británica, mientras miles de refugiados chinos huyen de su país, escapando del comunismo.
En este contexto, el amor entre una medio china y un extranjero, estará muy mal visto tanto por la familia de ella, como por los británicos afincados en Hong Kong.
Pero ellos iniciarán un romance, a pesar de la oposición de su entorno.
Esto es todo. En mi opinión, esta pareja no funciona nada bien. No tienen química y esa historia de amor resulta sosa y sin emoción. Toda la película consiste en un " te quiero pero no debemos vernos más, hasta un que feliz soy, esto no puede durar", quitando algunas escenas que son memorables pero no están aprovechadas, para un conjunto que, aunque se deja ver, resulta muy irregular.