Paseando a Miss Daisy

Al ver que la ganadora del Oscar a la mejor película de 1989 fue un trabajo tan limitado como éste me he puesto a reflexionar sobre el abismo que separa el criterio del entendido profesional al del ciudadano medio. Pongamos datos sobre la mesa. En ese año los títulos seleccionados en la categoría a mejor película fueron: "Paseando a Miss Daisy", "Nacido el cuatro de Julio", "El club de los poetas muertos", "Campo de sueños" y "Mi pie Izquierdo". Ahora bien, ¿qué prefirió el gran público? Veamos en que puesto quedó cada una de estas en la taquilla norteamericana: el 8º, 17º, 10º, 19º y 68º. En definitiva, no estuvieron entre las favoritas. Si hubiéramos hecho las nominaciones a mejor película en función de la recaudación en los Estados Unidos nos hubiera salido, por este orden: "Batman", "Indiana Jones y la Última Cruzada", "Arma Letal 2", "Mira quien habla" y "Cariño he encogido a los niños". Puede haber cambios, si nos fijamos en la recaudación mundial. El orden sería: "Indiana Jones...", "Batman", "Regreso al futuro 2", "Mira quien habla" y "El club de los poetas muertos".

Dicho esto, no pretendo afirmar que el criterio del público sea superior al del académico o al revés, sino constatar la enorme diferencia entre unos y otros. Aunque os confieso que en esta ocasión, y no es la única, me adhiero más al gusto de los legos. Para mí, la mejor película de 1989 sería precisamente "Indiana Jones y la Última cruzada" (2º en taquilla en Estados Unidos), seguidas de "Tiempos de Gloria" (45º) y "Delitos y Faltas" (61º). Los otros dos puestos debería disputárselos "El club de los poetas muertos" (10º), "La Sirenita" (13º), "Arma Letal 2" (3º) y "Corazones de Hierro" (68º). Claro está, sin tener en cuanta las que no he visto, algunas de las cuales podrían entrar en esta lista. Por ejemplo, "Nacido el 4 de julio". Sea como fuere, el espectador normal y corriente prefiere un tipo de cine diferente a "Paseando a Miss Daisy", película correcta, sensible y evocadora pero con el terrible defecto de que no tiene argumento. Directamente no pasa, es anodina y por si fuera poco, en el fondo, es muy superficial. Sólo la amistad creciente de estos ancianos. Muy insuficiente para tal galardón.

No había tenido ocasión de ver esta aclamada película, y ahora que lo hice, me quedó una cierta decepción. Tal vez había magnificado el potencial de esta cinta, pensando que iba a brindar grandes cuotas de dramatismo y emotividad, y la verdad es que ha resultado bastante sencilla. Con esto no quiero decir que sea mala, simplemente que es un sencillo retrato de vida, adornado con algunas anécdotas interesantes (como al fin y al cabo ocurre con la vida de la mayoría de las personas), pero sin caer en excesivas incitaciones al lagrimeo.
En cuanto a los papeles, lo de Morgan Freeman me pareció algo sobreactuado, Jessica Tandy bien y, a mi gusto, Dan Aykroyd hace un papel bastante interesante como el hijo siempre preocupado.
En definitivas, una película bastante simple, como simple suele ser la vida, al fin y al cabo.

Traslación al cine de la obra teatral del propio guionista, en torno a la relación entre una temperamental dama sureña y su chófer negro a lo largo de veinticinco años.

La pareja protagonista (Jessica Tandy y Morgan Freeman) brilla a gran altura en esta irónica historia de amistad, por momentos conmovedora, enmarcada en una época de tensiones raciales que Bruce Beresford se encarga de poner al descubierto. Un merecido éxito crítico y comercial.



"Sí, señora."

Es una película interesante con un bonito argumento, pero que si no fuese por la magistral actuación de Morgan Freeman hubiese pasado al olvido. Esta peli tambien se salva por su destacado final y por la atracción que tiene esa dinámica pareja que forman Jessica Tandy y Morgan Freeman. Pero incluso estando todo eso siento decir que no pienso que esta película sea tan genial como he oido y leido de mucha gente.

-Para una tarde en la que no se tiene nada que hacer y tampoco se quiere perder el tiempo echando un sueño resulta muy gratificante el poder disfrutar de una cinta sencilla como esta, sin demasiadas pretensiones que la de enternecer al espectador con una historia y unos personajes encantadores y carismáticos y con un presupuesto bajo, sin necesidad de grandes superproducciones para distraernos de manera muy efectiva. El filme elude los tópicos y la sensiblería propia de este tipo de productos, contando la historia de buena forma, con un buen ritmo en la trama, algo lento pero sin aburrir. Al mismo tiempo me sorprende que una película tan poco pretenciosa y sin un gran presupuesto como esta no pasase desapercibida para las masas en los cines allá por el 1989 y además de ganar su merecido Oscar tuviera un gran éxito de taquilla, pues es prueba de que el público americano también sabe apreciar los dramas sencillos pero complejos al mismo tiempo que aquí en España precisamente son el lastre del cine que se produce en nuestro país.

En lo referente a las interpretaciones, Morgan Freeman interpreta a un personaje tierno, bondadoso y carismático de los que solo él podría y a los que ya nos tiene muy acostumbrados, pues casi toda su filmografía se reduce a semejantes. Así mismo, el actor hace una gran interpretación, a un buen nivel como es habitual en él y digna de reconocimiento. Bien respaldado se ve por la veteranía de Jessica Tandy que brinda otra gran interpretación para el recuerdo en su papel de anciana desagradable y malhumorada pero con un gran corazón que espera ser abierto. Mención especial para Dan Aykroyd que se encuentra apartado de sus típicos papeles de comedia y que se muestra también muy correcto e idóneo en el drama.

En resumen, un buen drama, que no hace alarde de tópicos ni mata a sensiblerías, que entretiene pero que no enternece como debería y que personalmente no se me guardó demasiado en la memoria. No obstante, es una buena opción de tarde de una calidad estimable y con unas interpretaciones y personajes memorables para el recuerdo.

·LO MEJOR: las interpretaciones. Es muy entretenida.

·LO PEOR: no me enterneció como pensaba.