Paseando a Miss Daisy

A pesar de haber leído las buenas críticas de esta película, sigo considerando que es aburrida y bastante sensiblera. Cierto que los actores están muy bien y hacen muy buenos papeles, seguramente porque son actores de pura cepa y con muchos años de experiencia a sus espaldas. Seguramente, fue gracias a su labor, lo que salvó la película, porque si llegan a intepretarlo otros menos conocidos, posiblemente su exito no hubiera sido tanto. La historia que cuenta es bastante simplona y sensiblera.

Magnífica, buenísima historia sobre relaciones humanas que se sobreponen a todo tipo de prejuicios (raciales, sociales, religiosos...) y donde se realza el auténtico valor de dichas relaciones por medio de la pura y sencilla humanidad que impregna a los dos principales protagonistas de la obra.
Toda la trama nos va "conduciendo" hacia un final de los mejores que yo he tenido oportunidad de contemplar en cine, absolutamente magistral, sin palabras.

Sin giros dramáticos de guión, ni buenos ni malos y tampoco un romance épico; lo que nos ofrece este melodrama es una historia sencilla muy bien contada que gira alrededor de la amistad que surge entre una anciana cascarrabias y su encantador chófer durante más de veinticinco años. Dos actores de nivel, situaciones cotidianas, ganas de hacerlo bien y la ausencia de escenas lacrimógenas son algunas de las piezas que componen esta agradable película que, sin ser una obra maestra, es capaz de hacerse un hueco en el corazón de todos los que la hemos disfrutado.

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Paseando a Miss Daisy es una de esas cintas que recuerdas con un dulce sabor de boca a pesar del paso de los años, y a pesar de haber degustado muchos más sabores a lo largo de ese tiempo como espectador en ciernes.
Es un trabajo realizado de forma sosegada, con encanto y buen gusto, y en el que sobresalen las actuaciones del trío protagonista muy por encima de todo lo demás. Morgan Freeman, Jessica Tandy, y Dan Aykroyd brillantes labores las suyas.
Otros puntos destacables son la música, precisa y ajustada, con ese sortilegio clásico que envuelve toda la historia. El maquillaje y la ambientación también son resaltables, permitiéndonos degustar con refinamiento el inexorable e ineludible paso del tiempo en sus vidas (y no nos engañemos, en las nuestras también).
Siendo este el tema principal desarrollado, la inevitable levedad del ser y su incapacidad innata para evitar el eterno transitar de la vida, para lo bueno y para lo malo, con sus alegrías y sus tragedias.
Incluso, la religiosidad, el racismo, la amistad, la familia, los cambios sociales, la discriminación, son otros aspectos abarcados y desarrollados; aumentando el rendimiento de la ficción.
En definitiva, una recomendable y disfrutable obra, un entrañable relato, sutil y tierno, una alabanza a la dignidad de la vejez, una enseñanza de humildad , que recibió el reconocimiento y el éxito justo en su momento. Pasión cinéfila que los años no ha estropeado. Película que se hace querer.

Esta película es una de esas historias que tienen alma y que encandilan conforme va pasando el tiempo. La he visto varias veces y cada vez que la veo reconozco que me gusta mucho más.
Bruce Beresford dirige este film en el que se narra como una anciana judía tiene un accidente con su coche mientras conducía. Su hijo le contrata a un chófer negro pero ella se niega a aceptarle debido a que no quiere tener esos lujos. Ambos vivirán una amistad que se irá forjando poco a poco, mientras en su país se viven situaciones donde los prejuicios raciales están a la orden del día.
Se trata de una película realmente entrañable y tierna que habla de la amistad más allá de la edad, del sexo, de la religión y del color de la piel. Una amistad que en la época en que trascurre la historia era difícil de entender debido a la forma de vida que se tenía.
El film se llevó varios Oscar de la Academia incluyendo el de mejor película y el de mejor actriz. Una tarea muy compleja debido a que ese año había competidores muy fuertes a quienes vencer.
La película está realmente cuidada estéticamente. La evolución de los años es apreciable gracias a un trabajo sobresaliente de dirección artística. No solo se aprecia en los coches que se conducen, sino también en toda la decoración y el vestuario. Uno hace un viaje en el tiempo durante algunas décadas, y se es testigo de como la moda ha evolucionado en todos los aspectos que nos rodea en la vida.
Con respecto a las actuaciones, decir que son fantásticas todas. Jessica Tandy se llevó un merecido Oscar por interpretar a esta anciana desconfiada y que no quiere destacar sobre los demás. Una mujer rica que tiene muy presente que procede de la pobreza.
Junto a ella un genial Morgan Freeman que me da mucha pena que no fuera galardonado. Su interpretación es increíble, y yo diría que es una de las mejores que ha hecho. Al igual que Dan Aykroyd que da vida al hijo de la anciana. También nominado como su compañero pero tampoco galardonado.
En fin, "Paseando a Miss Daisy" es una de esas películas que va ganando con los años. Un film que siempre es agradable de ver y que cuenta con ciertos detalles llenos de magia que emocionan. Un viaje en coche que es para recordar y volver a repetir en más ocasiones.