Haz click aquí para copiar la URL

Trenes rigurosamente vigilados

Drama. Comedia Durante la ocupación nazi de Checoslovaquia, el joven Milos trabaja en la estación de trenes local junto al mujeriego Hubicka, el bobo jefe de estación Zednicek y la bella revisora Masa. El director de los ferrocarriles del pueblo les encarga la misión de proteger ciertos trenes estratégicos, indispensables para los planes de dominación del Führer en Europa central. Pero Milos tiene otro problema más íntimo y acuciante, que le lleva a ... [+]
<< 1 2 3 4 5 6 >>
Críticas 27
Críticas ordenadas por utilidad
19 de septiembre de 2007
18 de 25 usuarios han encontrado esta crítica útil
Una obra deliciosa, preciosa cinta que cautiva desde el comienzo, un comienzo con la presentación del joven protagonista es simplemente portentoso, digno del mejor Billy Wilder. El argumento entremezcla varias historias a cuál más tierna y conmovedora, siendo la principal la del despertar sexual del protagonista todo ello con el telón de fondo de la ocupación nazi en un entrañable pueblo checo, siendo el centro de toda la acción una estación de trenes y los personajes que en ella trabajan, contado en un tono de comedia a pesar de bombardeos, intentos de suicidio, etc... Los actores estan soberbios pero el jefe de estación y el conde estan especialmente bien. El final te descoloca ya que no lo esperas, esto no va en su detrimento pues hace que aún se te quede en la cabeza. En definitiva una gran película que roza la obra maestra.

P.D: Ya tengo otro lugar para soñar que vivo uno es Innisfree y ahora esta estación checa.
TOM REGAN
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
20 de septiembre de 2011
10 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
Llego a Jirí Menzel, a través del Cineclub El Gallinero y de su última película: "Yo serví al rey de Inglaterra (2006)", y retrocedo cuarenta años (1966), cuando aquello se llamaba Checoslovaquia, para encontrarme a un primerizo joven (28 años) que con su primera película, Trenes rigurosamente vigilados, gana el oscar a la mejor película de habla no inglesa. Descubro que la proximidad de los temas tratados en ambas, la ironía, la tradición y la mirada tienen mucho que ver con el gran novelista checo Bohumil Hrabal, autor de muchas de las historias que ha llevado al cine Jirí Menzel y guionista incluso en esta de la que hablamos.

En la corta vida de Milos hay un objetivo claro y dos asignaturas pendientes: conseguir un trabajo en el que no se trabaje, capear filosóficamente la ocupación nazi y dejar satisfecha a la chica que quiere en su primera relación íntima. Los trenes del título son transportes especiales del ejército alemán, llegados, en mala hora y entre otras cosas, para fumigar la bendita indolencia tradicional de los guardagujas. Así nos lo cuenta el que posiblemente sea el mejor director checo, con un blanco y negro de documental que convierte las posibles carcajadas en resignadas sonrisas.
Sinhué
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
13 de septiembre de 2008
9 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
Uno de los films más populares en el inicio profesional de Menzel, cuarenta años antes de dirigir "Yo Serví al Rey de Inglaterra", película que le debe mucho a esta producción de 1966 si tenemos en cuenta las similitudes del holgazán Milos con el afortunado camarero Jan Dite. Los dos están acechados por los nazis pero viven con indiferencia la situación de su país y les importa un comino la guerra en Europa. Por otra parte merodean en los quehaceres del sexo aunque en este film en blanco y negro solo nos situamos ante una época, sin recurrir a "flash-backs" temporales.

Milos es guardaagujas y eyaculador precoz. Su principal problema es que su prometida Misa no lo acepta en dicha condición mientras hastiado contempla como sus compañeros de trabajo no tienen ningún problema en consumar sus conquistas en el despacho vacío del jefe de estación. Milos intentará suicidarse aunque la esperanza de liberarse también puede tener doble respuesta al poder doblegar las rígidas normas disciplinarias que se le han impuesto como empleado del Ferrocarril (bajo supervisión alemana) a quien le obligan prestar atención a los convoyes que paran en el andén; a veces con miembros de las SS, u otras con enfermeras ávidas de pasión y deseo.

Supuso el reconocimiento internacional de su director llevándose así el Oscar a la mejor película de habla no-inglesa en 1967.
Natxo Borràs
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 de agosto de 2012
9 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Divertida, amena, perspicaz, crítica… una joya de película ideada como una forma punzante de desenmascarar algunos vicios de la Segunda Guerra Mundial y la ocupación nazi y lo hace despertando una simpatía desbordante, bajo un humor natural y la máscara de las primeras experiencias sexuales de un chico con algún problemilla de eyaculación precoz ante las chicas un tanto ‘facilonas’ que se le ponen por delante. Humor grácil, delicioso, sencillo, tierno, que se desparrama en forma de sexo (o intentos del mismo) en el ambiente de un pueblo controlado por el nazismo y que esconde mucho más de lo que aparentan sus juegos con braguitas de risueñas señoritas que se dejan tocar. Leí en una crítica que tal vez la eyaculación precoz sea “la impotencia del pueblo checo” y que mejor forma de expresarlo que a través del sexo “¿Qué mejor que el sexo para romper el himen del silencio?”. Lo cierto es que tras ese desparpajo narrativo, esa aparente frivolidad de coqueteos, nalgas que asoman por debajo de la ropa, y sonrisitas cómplices acolchadas por carnosos labios, se esconde toda una declaración de intenciones, de la lucha por la libertad de un pueblo y de una realidad que se palpa (nunca mejor dicho) con el paso del tren, que descubre las ruinas, los tejados de chapa, los uniformes manchados por las excreciones de palomas, que dejan entrever muy sutilmente las desgracias de la guerra. Pero esto requiere de una segunda lectura porque la película es todo encanto. La utilización de la mordaz ironía también tiene un efecto embaucador en la película y las metáforas visuales (imagínense a una mujer acariciando el largo cuello de un cisne mientras el protagonista intenta buscar a un ‘madurita’ para su primera experiencia sexual) son sorprendentes y poco comunes. Esta cautivadora obra tiene a personajes magníficamente definidos en detalles y soberbiamente interpretados, especialmente el protagonista, torpe , debilucho, ingenuo que empieza a despertar en la vida. El soniquete de la musiquilla en forma de sátira de himno militar es pegadizo y se queda danzando en la cabeza horas después de haber visto la película. Y en este mundo mágico y envolvente que se crea bajo el prisma del humor, la tragedia también viaja soterradamente, los acontecimientos dibujan un futuro peor, pero es imposible escapar de la sonrisa que despiertan estos personajes pintorescos que remolonean por el filme, hasta que, justo antes del The End y de forma inesperada, todo estalla en una tragedia, ni aún así fui capaz de perder la sonrisa.

http://palomitasconchoco.wordpress.com
Palomitasconchoco
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
17 de octubre de 2008
7 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Después de ver Mi dulce pueblecito sentía tremenda curiosidad por seguir conociendo las películas de este director checo del que desconocía por completo su existencia y el cual descubrí con la gran película que anteriormente he nombrado.
Película ganadora del oscar a la mejor película de habla no inglesa es una muestra del buen cine que en Checoslovaquia se hizo.
Este director, hasta ahora bastante desconocido para mí, es genial al saber combinar la ironía de las historias normales del día a día de la sociedad más realista checoslovaca para hacer grandes críticas políticas y sociales y muchas veces pasando desapercibidas, así como he podido ver en Mi dulce pueblecito donde se ve un manantial de valores humanos y ahora en Trenes rigurosamente controlados vuelve a unos personajes de la Chequia más realista y rural donde se ven los contrates sociales de una sociedad que está pasando una guerra y se ve dividida por aquellos checos a favor de los alemanes y su ocupación y de aquellos checos en contra de esto.
Entre crítica y crítica se cuentan las peripecias de un chico joven, tímido y sensible además de tener muy pocas luces, un pobre chico con ganas de perder su virginidad.
Además de ser una gran crítica a la situación política de la ocupación alemana en Chequia es una película erótica y tremendamente sensual y demasiado avanzada para una época donde los checos estaban bajo el dominio comunista.
La película está llena de momentos de un gran erotismo, donde no se ve ninguna escena de sexo pero donde se supone y donde quizás tenga más fuerza sexual que cualquier desnudo íntegro.
Si en Mi dulce pueblecito critica al comunismo en Trenes critica la ocupación alemana en Checoslovaquia además de cuestionar el sentido de la sexualidad en las personas católicas y tradicionales donde el vacío del día a día y de la rutina de trabajo, hacen a estos trabajadores utilizar el sexo como medio de evasión.
Con momentos divertidísimos estamos antes el auténtico cine europeo de los años sesenta que con pocos medios y grandes actores son capaces de contar historias interesantes además de críticas demás de tener un ritmo mucho más lento del que estamos acostumbrados así que uno ha de sentarse a ver este tipo de cine como algo diferente a lo que últimamente nos llega de américa.
manuel
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 2 3 4 5 6 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow