Bowling for Columbine

Es de un gusto pésimo entrar en casa de un Charlton Heston enfermo tal y como lo hace Michael "McGordo" Moore, pero al margen de eso centraré mi crítica en el intento Moore de buscar el hecho diferencial estadounidense con respecto al resto de paises para tratar de explicar la gran cantidad de homicidios con arma de fuego. Cuando Moore parece acercarse a una explicación razonable del asunto empieza una comparación entre los estates y otros paises como Japón o Canada, primero descarta lo más obvio; los videojuegos, el cine violento, las estrellas de rock.., pero falla estrepitosamente cuando ignora dos diferencias fundamentales con esos países, su historia y su situación económica.
La historia de los EEUU es radicalmente diferente a la de Europa y Japón, la sociedad americana se termino de formar a finales del siglo XIX y principios del XX con las ultimas grandes masas de inmigrantes italianos e irlandeses, por aquel entonces Europa y Japón llevaban siglos con sus sociedades configuradas, unas sociedades etnicamnete muy homogeneas. Todavía hoy se sigue marcando la diferencia entre italoamericanos, irlandeses, wasp, judíos.., por no hablar de negros, hispanos y nativos. Es el famoso Melting Pot del que nos hablaban en las clases de inglés y que no es tan bonito como nos quieren hacer creer.
En cuanto a lo económico, puede que los EEUU sean la potencia mundial y que en Canada o en España el desempleo sea mucho mayor pero Moore parece ignorar en su documental que la distribución de la renta en su país está más cerca de Venezuela y México que de los países del 1er Mundo, si comparamos EEUU con estos dos paises nos damos cuenta de al evidente relacion existente entre desigualdades sociales y homicidios y criminalidad y hay que ser claro, la inmensa mayoria de los homicidios con arma de fuego se dan en el ámbito de la delincuencia común (trafico de drogas, crimen organizado, asaltos...), los casos de amok y matanzas como la de Columbine son muy anecdóticos, la mayoria de los implicados son pobres y lumpen, no rednecks.
Hollywood nos ha traido a Europa las andanzas violentas y delictivas de cada uno de los grupos étnicos de EEUU, un breve repaso en el spoiler:

Exactamente, no recuerdo qué día del 2002 me acerqué a los cines de Jaén, debería haberlo apuntado, ya que marcó mi vida cinéfila. Ese día iba con mi hermana, no teníamos ni puta idea de lo que ver, fue unos de esos días en los que se decide peli en frente de la cartelera, a ver si se cruza la suerte, la casualidad y el buen cine.
Vi un cartel de un gordo con una pelota en la mano, asemejada al planeta tierra, y leí el título “Bowling por Columbine”, algo centellea en mi memoria, esas tres palabras me suenan y para bien, ya que me había llegado un revuelo inmenso semanas antes, pero por mi costumbre de no informarme de los estrenos (para no recibir influencias o destripes argumentales) no sabía nada. Convencí a mi hermana para verla con una única frase: “escuché que es la hostia, es una crítica a la sociedad americana”.
Entramos en la sala, una pareja de veinteañeros estaban ya en la penúltima fila, mientras se dan achuchones palomiteros les ignoro y espero a que empiece el film con las conversaciones típicas con mi hermana.
No pasaron ni cuatro minutos, cuando constaté que la película era un documental, pese a la actitud a la defensiva en los primeros segundos, descubrí con interés el planteamiento de la obra, ya que vi a un sagaz Michael Moore moviendo su grasiento culo, abriéndose una cuenta en un banco y recibiendo un arma (“¡Ostia!”, pensé). Cuento tres minutos de risas en los primeros cinco, no tenía ni puñetera idea de qué carajo trataba el docu, pero, indudablemente, me atraía lo que estaba viendo.
Me llamó la atención el comportamiento instintivo del filisteo que achuchaba a su novia, mientras yo me maravillaba del descubrimiento, él, enfurecido, alzó la voz y le preguntó a su novia: “¡pero…pero… ¿qué coño es esto?! ¡Qué mierda es esta! ¿Un documental? ¡¿Sabías de qué iba?! “Tranquilo”_ respondió su novia avergonzada”_ “no lo sabía, a ver si después cambia, a ver…”. A los diez minutos se fueron, yo seguía conmocionado por lo que veía, sólo tenía la compañía de mi hermana en el cine, mejor así, mejor.

“Bowling” es la película de Moore más divertida, menos politizada, con los gags más conseguidos a la par que frescos, con la línea argumental menos cuestionable y llamativa. Ayudados por un ritmo sensacional, caminamos entretenidísimos por las teorías, por los datos, por la seriedad intrínseca del tema aquí expuesto, por el populismo inherente al de Flint, por el estupor al conocer una realidad desconocida, que no deja de ser otra que las consecuencias de una política de horror teledirigida en una sociedad muy similar a la nuestra.


(Por falta de espacio sigo en el spoiler, no revelo nada)

Excelso documental del extravagante Michael Moore, quien trata de develar las razones por las que los estadounidenses tiene la más alta tasa de muertes por armas de fuego en el mundo, tomando como base el incidente ocurrido en Columbine en 1999 en el que se produjo un tiroteo en una escuela donde fallecieron 15 personas (incluidos los perpetradores) y resultaron heridas 24.

El documental es casi perfecto, las imágenes escogidas son algunas veces fuertes, pero siempre apropiadas, las entrevistas son llevadas a cabo con gran maestría, Moore posee un gran instinto para sacar la información precisa y muchas veces para ridiculizar a sus entrevistados, quienes a propósito han sido muy bien escogidos para lograr un adecuado análisis, que brindará muchas conclusiones finales para los espectadores.
Y digo que es casi perfecto porque Moore, debido a su extremo histrionismo, pretende ser la noticia antes que mostrarla, dejando a un lado su rol de documentalista, que si bien no tiene que ser neutro, por lo menos debería aparentarlo.

No hay que dejar de mencionar una magnífica versión animada de la historia de los Estados Unidos, imperdible.

Dentro de la entrevistas destacan la de Marilyn Manson y la de Charlton Heston.
El rockero nos deja boquiabiertos por sus inteligentes respuestas, mientras que Heston recibe a Moore en su mansión con un inicial aire altanero y confiado, el cual se va desencajando poco a poco, terminando en la entrevista más incómoda que alguien le haya hecho, por momentos incluso te da la sensación de que Heston, en plena entrevista, sufre una epifanía que le demuestra la estupidez de su postura.

Pero ¿cuál es la conclusión? ¿Por qué los estadounidenses se matan unos a otros? ¿Es una cuestión histórica, racial o genética?
Yo creo que los medios de comunicación tienen mucho que ver, la cultura del miedo que promueven día y noche termina influyendo en sus consumidores, la industria armamentista es igualmente responsable, no es por nada que sea la única industria en el planeta que nunca haya entrado en huelga.
Rousseau decía: “El hombre es bueno por naturaleza, la sociedad es la que corrompe”, entonces la sociedad americana está en una profunda crisis de valores, una prueba de esto es que en el resto del mundo las multitudes salen a las calles a festejar solamente ante éxitos deportivos, mientras los estadounidenses salieron a festejar en masa cuando asesinaron a Osama Bin Laden.
Dr.Juventus

Un documental que trate sobre las armas, sobre su peligrosidad cuando los civiles pueden acceder a ellas muy fácilmente y sobre el alto índice de asesinatos en un país que sucede esto, es tarea complicada. Michael Moore, en éste documental realiza una buena labor informativa, presenta datos y estadísticas interesantes, realiza entrevistas y se plantea preguntas tanto a sí mismo, como a los entrevistados, además de documentar sobre ciertos acontecimientos como la matanza de Columbine y lo que se desarrolló a su alrededor a posteriori. Lo malo, de este documental, es que creo que algunas entrevistas las enfoca desde un punto equivocado y a personas equivocadas, y presenta muy pocas soluciones al problema, y muy pocas respuestas, ya que yo pienso que en un país capitalista, poco pueden decir quien lleva un negocio de armas, todo el mundo sabe que a esa persona solo le interesa vender y prosperar. Yo pienso que sería más útil haber entrevistado a gente que de verdad las utilizo para hacer daño, o a gente que hubiese estudiado el tema y escrito sobre el mismo, los cuales, seguramente hubiesen aportado datos interesantísimos y reveladores. Aun así, el documental es interesante y entretenido, puro trabajo de calle.

En mi vano vivir, de todo he visto:
Justos perecer en su justicia
e impíos envejecer en su iniquidad.

También he visto buscar objetivos loables con medios infames:
He escuchado discursos populistas y he visto usar la demagogia en nombre de grandes empresas. He visto manipular y aprovecharse de débiles y tullidos para alcanzar buenos fines.
Pero mi corazón se ha sentido mal, y sigue sin saber si el fin justifica los medios.

También he visto, en nombre de la justicia, allanar la morada de un anciano abusando de su confianza, para después confundirle con cuestiones difíciles y discurso agresivo. He visto al anciano tener que huir en su propia casa por culpa de aquel al que abrió la puerta.
Y mi corazón no sabe quién se cubrió más de vergüenza.

He visto individuos de doctrina conservadora y mente abierta, así como otros de ideología liberal y mente cerrada.
Mi corazón ha conocido a tipos como Clint Eastwood y Michael Moore, y siente una mezcla de orgullo y desprecio por ser humano.