Insidious: Capítulo 3

Para prepararme para hacer esta review quise ver las dos primeras entregas de Insidious. Hasta ahora no las había visionado porque mi interés por esta saga era prácticamente nulo, y para mi sorpresa me he encontrado bastante más calidad de la que me esperaba en un principio. Terror de nivel y un argumento bastante curioso que no imaginaba. Ya cuando fui a ver esta tercera parte iba con ciertas ganas y me encontré que me dieron lo que me esperaba, pese a que está un pelín por debajo de las otras dos entregas.

Quinn Brenner es una joven que perdió a su madre hace año y medio. En su tristeza intenta comunicarse con ella, pero no es a su madre con quien consigue contactar.

La película es una precuela del resto, si quieres saber cómo se desarrolla la trama después de la segunda parte te va a tocar seguir esperando. No obstante esparce multitud de señales que se explotan en las siguientes y se enfoca mucho más en la figura de la medium Elise, siendo prácticamente la protagonista. Baja un poco el nivel de terror de las anteriores aun así tiene momentos efectivos sin inventar nada nuevo. Y como suele ocurrir últimamente en el que su as en la manga es dar golpes de sonido para asustarte por necesidad, técnica que desprecio totalmente y que en esta película abundan. Al igual que el remake de Poltergeist añade elementos tecnológicos que casan muy bien con el género del terror. Sorprende también algunos elementos de humor, sobretodo en su segunda mitad que ayudan a dar un respiro, y bastante divertidos.

Toma el testigo de James Wan el debutante Leigh Whannell, aunque todo el argumento de las anteriores ya era suyo, al igual que en la saga Saw. Y pese a que es su primera dirección se le ve bastante cómodo en esas funciones, se le ve especialmente inspirado en las escenas que suceden en la otra dimensión, que por cierto, ocurren las mejores escenas de la película. También interpreta al personaje de Spec y junto a su compañero Tucker son un alivio cómico bastante agradable. Protagonizan Lyn Shaye (Ouija, Pesadilla en Elm Street) como la medium Elise y la jovencísima Stefanie Scott, en el papel de la acosada Quinn, ambas muy correctas en sus respectivos papeles llevándose el premio la veterana Shaye, ya que el personaje posee un carisma entrañable, y un par de frases especialmente memorables.

Insidious: Capítulo 3 es quizás la parte más floja de todas pero es, igualmente, muy disfrutable. Completamente desconectada del argumento de la saga quizás habría estado más acertado llamarlo "Capitulo 0". Queda claro que la intención del estudio es alargar la trama con múltiples entregas y, de momento, el nivel de calidad continúa siendo bastante decente.

http://www.terrorweekend.com/2015/06/insidious-capitulo-3-review.html

Peliculilla irrelevante que intenta barrer lo poco que pervivió de Insidious en la segunda parte.
Queda así definitivamente claro que lo que tuvo la primera de fresco se agotó en la misma y no hay aquí de Insidioso sino continuar intentando rascar.

Parece la copia de la copia. De hecho, es la copia de la copia. Así que tanto si te gustó la primera como si no, aquí no vas a ver nada ni nuevo, ni original, ni terrorífico.

Ocasión perdida de levantar la franquicia tras acabar el caso de la familia guay. Pero no, Insidious era ese caso.

PD: y una vez más, los mejores momentos te los revelan en el tráilker. Mira que les gusta joder las películas. No sé por qué no se dedican a hacer falsos tráilers de películas, que es lo que mejor se les da.

Hace ya algunos años vi en el cine un estreno de terror llamado El hada de los dientes. El tráiler prometía y, de hecho, los primeros minutos eran bastante inquietantes. No obstante, a medida que iban pasando los minutos la trama se fue despeñando hasta llegar a un final de los más ridículos que recuerdo...el protagonista acababa a puñetazos contra el hada gritándole: '''¡¡¡muere **** ** ****(políticamente incorrecto)!!!"
A partir de ésa, he visto otros finales de ese tipo en los que los guionistas/directores/productores recurren al ataque físico en el clímax de un film de terror para paliar su falta de imaginación. Creo recordar que El Exorcista 4 nos regalaba otro de estos lamentables finales.
Pues bien, Insidious 3 tiene el dudoso honor de entrar por la puerta grande en esa lista.
Esta tercera entrega empieza bien, crea una atmósfera inquietante con la visita de una joven a una médium retirada en busca de contacto con su madre muerta. La escena muestra poco y sugiere mucho siguiendo las bases con las que James Wan ha reinventado el género. Pero claro, Leigh Whannel no es Wan y a la media hora te das cuenta que hay más trampa que cartón cuando empiezan a desaparecer personajes del film sin que importe que pasa con ellos. No porque mueran; simplemente desaparecen del guion. Así, el vecino enomorado de la protagonista, la amiga o ese hermano se desvanecen llegando al clímax para dar protagonismo a una médium que da empujones a los demonios como si fuera luchadora de sumo.
Incluso la protagonista se la trae al pairo al director en un bochornoso final en el que la "empujadora de fantasmas" se monta un negocio con dos farsantes de pacotilla mientras la sacan de plano a lo Lina Morgan en vaya par de gemelas.
El otrora rey de las comedias románticas Dermot Mulroney hace lo que puede con un papel de padre viudo abnegado que no da para mucho.
Sinceramente, esta tercera entrega era innecesaria supongo que igual que la cuarta que dejan entrever entre bambalinas

Ver “Insidious” era como montarse en el tren de la bruja, una montaña rusa de clichés del género sabiamente mezclados por James Wan y Leigh Whannell. Su secuela directa suponía una inteligente vuelta de tuerca a lo que ya habíamos visto, pasando de los viajes astrales a los temporales sin despeinarse en absoluto, y siempre bordeando la delgada línea que separa la verosimilitud del esperpento en forma de espectáculo de marionetas. Juntas suponían un soplo de aire fresco a algunas ideas ya trilladas, como las casas encantadas o los espíritus y demonios.

Por ello, tratar de exprimir una idea que ya parecía marchita era un riesgo enorme, especialmente sin Wan en la silla de dirección. Y lo primero que llama la atención de este tercer capítulo es que su heredero, el propio Whannell, no se defiende nada mal con la cámara. Consigue no repetir los esquemas y maneras de su amigo, no hay imágenes aceleradas y en general la fotografía es efectiva, ya no parece que asistamos a un film con estética tan fría y luminosa que da la sensación de ser televisivo.
Whannell encuentra su propio camino como director, pero sólo desmarcándose de la estética de anteriores entregas, no porque acuñe un estilo personal. Porque le falta la capacidad de su compañero para recrear atmósferas y generar tensión, y en su lugar tira del susto fácil y los tópicos del cine de terror de bajo calibre, más cercano a la reciente “Ouija” que a “The Conjuring”, a la cual homenajea de una manera bastante graciosa.

Sin embargo, su debilidad en la dirección podría perdonarse si hubiera sido capaz de ofrecer algo mínimamente original. Y aquí es donde falla “Insidious: Capítulo 3”. Hay muy poco en ella que te remueva en la butaca –quizá la figura de su villano, y algún momento conseguido, pero que recuerdan a lo ya visto en otras películas, como el ojo en la garganta-. Es una precuela que se contenta con ser, no con lo que puede dar de sí. Una propuesta de espíritus típica, sin más interés que pasar un rato entretenido –a veces, que le cuesta arrancar y tiene serios bajones de ritmo-, y donde lo realmente relevante transcurre en su media hora final, pero sin llegar a resultar escalofriante ni ofreciendo esa chispa de ingenio que la haga mantener el tipo con respecto a las anteriores.

Eso sí, es un vehículo de lucimiento para la gran Lin Shaye. La trama central de la chica que siente la presencia de un ente maligno está de más. “Insidious: Capítulo 3” es la película de Elise, y Shaye vuelve a ser lo que sobresale por encima de todo el conjunto. Aún así, supone un retazo de la vida de esta médium totalmente descafeinado, un spin-off involuntario que bien podríamos habernos ahorrado. Ya saben, tres son multitud.

A favor: Lin Shaye, y su tramo final
En contra: su falta de originalidad y su terror de bajo calibre

Con esta tercera parte esta claro que la saga "Insidious" empieza a ir a menos. Y todo porque el señor James Wan prefirió ser productor en vez de director, mal hecho, pues si se hubiese decidido a ser director en vez de productor esta tercera entrega hubiera sido todo un peliculón en vez de una buena, por no decir, correcta película. No quiero decir con esto que me arrepienta de haber ido a verla al cine el mismo día de su estreno, es que sinceramente no esta a la altura de las dos primeras partes, por lo que es una pena que después de dos estupendas películas de fantasmas esta última no haya precisamente la mejor.
El caso es que esta película merece la pena ver sólo si te han gustado mucho las dos anteriores y eres muy fan del este tipo de films, por que si no es así quizá no te vaya a gustar mucho "Insidious 3", es más, puede que incluso no te llegue a gustar nada, aunque esto depende de la exigencia de cada uno.

Ahora bien todos nos preguntamos si a lo mejor dentro de unos años habrá una cuarta parte y si la volverá a rodar James Wan (ojalá) por que como ya he dicho antes es una lástima que la genialidad de las anteriores entregas de "Insidious" se haya perdido un poco en esta, además tiene la pega (según se mire) de que el film no siquiera cuenta con actores conocidos, a lo que tengo que añadirle que el día que fui a verla no había demasiada gente en la sala ...
En resumen, que es buena pero no tanto como se esperaba, así que ya sabeis.