La reina virgen

Drama histórico centrado en los jóvenes años de la princesa Isabel, cuando la madre de ésta, es condenada al patíbulo por Enrique VIII. Isabel I fue una joven princesa que se rebeló contra su tiránico padre en numerosas ocasiones. La historia se centra en los escarceos amorosos de la princesa antes de ser coronada reina, dejando a un lado el contexto histórico de la época. Aunque visto cómo se entregaba la futura reina a su amado Thomas Seymur parecía un amor que podríamos llamarlo de todo... menos virginal.
Adolece de cierto rigor histórico de los hechos acaecidos centrándose casi exclusivamente en los líos de alcoba de la realeza británica de aquél siglo.
En su favor contiene la obra todo el magnifico esplendor del "look" de la MGM, con un reparto poblado de estrellas (Simmons, Granger, D. Kerr, Laughton), dirigidas por un artesano de los estudios, George Sidney, que ya había firmado cintas del calibre de "Scaramouche" y "Los tres mosqueteros".
Recordar que Charles Laughton era la segunda vez que daba vida a Enrique VIII, la primera fue en "La vida privada de Enrique VIII" de Korda donde consiguió un meritorio "Oscar".
Otro de sus puntos fuertes es la banda sonora del irrepetible Miklos Rozsa, menudo hartazgo musical nos brinda, dotando al film de una grandeza palaciega esplendorosa .
Tampoco hay que olvidar el gran vestuario de época que lucen los protagonistas. Menudo fondo de armario tenia el tál Thomas Seymur (Steward Granger), con esos fantásticos modelitos, y ese porte altanero de dandy ingles que nunca se descompone, ni siquiera en las distancias más cortas.
En conclusión, una buena película sobre los años jóvenes de la llamada reina virgen. Y para los que se hallan quedado con ganas pueden seguir con "El favorito de la reina" que versa sobre el mismo personaje, aunque en años posteriores a su etapa de princesa .

Bonita ficción histórica sobre la juventud de Isabel I de Inglaterra y en especial su enamoramiento de Thomas Seymour. Impresionante plantel de actores británicos -Jean Simmons, Stewart Granger, Deborah Kerr, Charles Laughton, ahí es nada al aparato- en esta entretenidísima película dirigida con enorme corrección por George Sidney, rodada integramente en estudio y en glorioso technicolor y con una partitura de Miklos Rozsa a la altura. Intrigas, amores inconfesables, ambiciones y venganzas, una estupenda ambientación y un vestuario de Oscar. Muy entretenida.

A pesar de los más de 50 años transcurridos desde que se rodó esta gran producción de Metro Goldwyn Mayer conserva su atractivo, por sus intérpretes, especialmente en su corto y estupenda actuación de Charles Laughton como Enrique VIII, por sus decorados, por su fotografía e inspirada música de Miklós Rózsa, sobre todo en lo momentos románticos y por la dirección, que hacen de este relato histórico un drama romántico que cautivó en aquellos años y que hoy día, en el 2014, posee un gran mérito cinematográfico y una gran carga de nostalgia para los que presenciamos su estreno en España y al mismo tiempo recordar la época del gran esplendor del CINE, con mayúsculas.
El DVD comercializado contiene la versión original en inglés, pero también la magnífica versión española (doblaje) realizada en los estudios Metro de Barcelona con motivo de su estreno en los años cincuenta, que aunque la calidad del sonido no es muy buena, sobre todo en comparación con el sonido de hoy, posee una calidad artística de primera, por lo cual hay que felicitarse de que no la hayan vuelto a doblar, y que casi siempre, aunque pudiera tener mejor sonido ahora, la calidad artística sería posiblemente inferior, como ya ha ocurrido con otras producciones de la misma época y además en una película antigua sintoniza mejor el primer doblaje..
Un film especial para los nostálgicos y para lo grandes aficionados al CINE de siempre.

Sin ningún género de dudas la reina inglesa Isabel I (1533- 1603) ha sido un auténtico filón para el cine desde La vida privada de Elizabeth y Essex (1939), con Bette Davis, hasta Elizabeth: La edad de oro (2007), donde Cate Blanchett repetía personaje después de Elizabeth (1998).

Para La reina virgen se adaptó la novela de Margaret Irwin, que contaba uno de los episodios románticos de Isabel I: su romance con el almirante Thomas Seymour, que después sería condenado a muerte. El film, rodado como gran superproducción por la Metro, tenía un reparto excelente encabezado por Jean Simmons y Stewart Granger (pareja en la pantalla y en la vida real), y seguido por Deborah Kerr, Kay Walsh y un Charles Laughton que volvía a representar al personaje de monarca británico tras haberlo hecho 20 años antes La vida privada de Enrique VIII (1933).

El vestuario de Walter Plunkett, así como la dirección artística a cargo de Cedric Gibbons, Urie McCleary, Edwin B. Willis y Jack D. Moore, fueron candidatos al Oscar aunque no alcanzaron el premio. Destacaría la extraordinaria actuación de jean Simmons, princesa decidida y valiente, y fiel a sus principios y su amor de toda la vida. Los entresijos, envidias, luchas de poder y demás alharacas. Un 7.

Jean Simmons y Stewart Granger estaban casados por aquel entonces, y jugaban un papel importante, y supongo que les funcionó.

La película fue un éxito en taquilla y aunque vista de ahora, pierde bastante interés, casi siempre las películas que tratan sobre las monarquías, en EEUU funciona bastante bien.

Tenemos a un Charles Laughton, ya metido en sus carnes y supongo que ya resignado a hacer papeles menores y como no, de papeles que no son galanes.

Nominada a 2 Oscars, que son de lo único que podría estar nominada, porque es un poco flojita durante el transcurso de la historia, aunque bastante curiosa en momentos históricos.