Navy Seals vs. Zombies

Si tuviera que definir con una palabra Navy Seals vs Zombies sería "entretenida". Simplemente. La película nos cuenta cómo un equipo de Navy Seals ha de rescatar al vicepresidente de los EE.UU. que ha quedado atrapado en mitad de una ciudad infestada de zombies, y mientras se procede con el rescate se van resolviendo diferentes incógnitas sobre el porqué se ha podido producir dicho brote zombie y cómo poder pararlo.

Técnicamente es una película que no está mal, por lo menos para los estándares de este tipo de cine de serie B. Salvando algunas explosiones que se nota claramente que son digitales, el resto no está mal. Los actores cumplen su papel, los zombies son aceptables, y la película se desarrolla con el suficiente ritmo como para que no se haga pesada.

Claramente es una película para los incondicionales de lo zombies, que disfruten viéndolos perseguir humanos, mordiendo aquí y allá, y acechando por todos los lados, sin complicarse la cabeza con un guión rebuscado.

Si eres uno de ellos, seguro que te resultará entretenida.

Horrible film y no precisamente por sus escenas de violencia frenética (que no las hay), ni de sustos relámpagos (de risa clueca), sino por las interpretaciones. Americana de un grupo de cowboys que les toca la misión de salvar a un vicepresidente, que casualmente se parece un montón a 'Barack Obama'. El guión, no me cabe la menor duda, fue elaborado en algún baño de un "pub" anglosajón después de una cansina jornada bebiendo bourbon con coca cola. Incluso los efectos y las escenas de acción son terriblemente malas.
Si quieres pasar un mal rato lo pasarás, pero no el que buscas.

Tontería del tamaño de la torre Eiffel que propone una suerte de cruce entre las películas de marines hipervitaminados, películas de apocalipsis y zombies. Vamos, algo así como una versión cutre y barata de “Aliens” en tierra firme. La película avanza de despropósito en despropósito con situaciones inverosímiles (¿de verdad ese número reducido de marines son los responsables de contener las hordas?) y no deja de ser una serie Z que aprovecha un título molón y el tener a Michael Dudikoff en el reparto (quien apenas aparece unos minutos y siempre en una oficina). Es decir, que vende gato por liebre pretendiendo ofrecernos algo épico cuando en realidad parecen cuatro actores aficionados jugando a paintball en un edificio en ruinas. No hay que perder el tiempo analizando el guion ni tampoco las interpretaciones ni aun menos la dirección. Esto es malo, se mire como se mire. Tan malo que no sirve ni para echarte unas risas.

Vamos, es que ellos mismos son tan o más peligrosos que los zombis. De verdad que sí.

Unos tipos que no hacen ni puñetero caso de la información que les dan y lo peor es que ni se enteran; que se enfrentan al ataque zombi sin dar disparos, que se fían de sus compañeros heridos y, por lo tanto, susceptibles de contagiarse; que se meten, por su seguridad, en callejones estrechos sin vías de escape y no controlan para nada a los supervivientes por si les han atacado o no los zombis, algo que puede poner en peligro (y de hecho pone) la seguridad de los demás...

Bueno, bueno, si es que no tienen precio estos soldados, estos rudos seals que se enfrentan al peligro con una parsimonia y sangre fría que ya lo quisiera Chuck Norris. Junto a ellos, la periodista es otra que tal baila, ¿eh? Un paquete que no hace más que estorbar.

Mención especial para la interpretación de la eficiente y responsable doctora que por edad debería ser recién licenciada. Un portento.

Desternillante.

"¡No nos pagan lo suficiente!"
Así de contundente se mostraba el navy-seal Steven McPurdy cuando le asignaron la última misión, rescatar al vicepresidente de una horda de zombies.
"Me han enseñado de to, he nasío pa matá, se coser heridas con bolsas de plástico, a sumar con los dedos.., pero eso de luchar con fucking zombies..., ¡¡Joer que mal rollo!!"
¡Pam!, ¡Pam!, ¡Pum!, ¡Grrrr, Arrrrr! Reviéntale la cabeza Johnny. ¡Ayyy, ma mordío¡ Y así una hora.
Las explosiones y las reventadas de cabeza son digitales, a muchos zombis se les ve reir, otros van sin maquillar, jaja, menuda mugre.