El último soldado

The last rifleman es un film bien logrado sin muchos sobresaltos pero prolijo, que llega bien a su cometido.
No intenta ser sensiblero aunque si quisiera pudiera serlo, pero así cómo esta es perfecto.
pPierce Brosnan se destaca con su gran labor y su caracterización es genial.
La historia se centra en un veterano de guerra que quiere volver a Normandía y aunque no lo dejen irá cómo sea, en el camino irá conociendo diferentes personajes que lo ayudarán a llegar.
Bonita película, gran dirección de Terry Loane.

'El último soldado' es una preciosa película basada, libremente, en hechos reales. Bernard Jordan, en el film llamado Artie Crawford, fue un veterano del ejército de Irlanda del Norte que sobrevivió al Desembarco de Normandía y realmente se escapó de la residencia de ancianos en la que vivía para acudir de nuevo a las playas de Francia para conmemorar la hazaña militar.

Kevin Fitzpatrick se estrena como guionista de largometrajes con un relato cargado de emotividad contenida, ritmo acompasado y un desfile de secundarios que enriquecen el relato y le dan un toque positivo y esperanzador. Terry Loane dirige la película con firmeza y respeto a unos personajes que representan mucho más de lo que cuentan: el sinsentido de la guerra y el agradecimiento para aquellos que dieron su vida por los demás. Y, sobre todo, un rendido homenaje a los mayores y un llamamiento a cuidarles con cariño y eficacia.

Desde el punto de vista cinematográfico, 'El último soldado' es una película correcta, de tres estrellas. Sin embargo, no me resistido a ponerle una más dedicada al Pierce Brosnan inmenso que la protagoniza. El elegante Remington Steele, que cuenta ahora con 70 años, interpreta al veterano de 92 años consiguiendo, con su calidad en la actuación, que nos creamos esos más de veinte años de diferencia y nos impliquemos en su torpeza al andar y sus lapsus mentales.

Por otro lado, cosas del cine, dentro de unos meses, se estrenará otra película con el mismo tema: 'The great escaper' con Michael Caine en el papel de Jordan. Veremos a ver. De momento, disfrutemos de esta bonita historia tan acertadamente realizada.

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Esta película está inspirada en la historia real de Bernard Jordan de 89 años, un veterano británico de la Segunda Guerra Mundial que se escapó de su residencia de ancianos en Inglaterra en 2014, llevando colgadas sus medallas en la chaqueta. Viajó en autobús y ferry a Francia para asistir a las conmemoraciones del 70º aniversario del desembarco del Día D donde él participó.

Pierce Brosnan, de 70 años, con mucho maquillaje, interpreta a este veterano de 90 con bastante credibilidad, removiendo el doloroso pasado, también tenemos a Jürgen Prochnow interpretando a uno de los alemanes que defendían las playas de Normandía, incluso hay un homenaje a su película más emblemática "El submarino" (Das Boot) de Wolfgang Petersen donde vuelve a cantar  'It's a long way to Tipperary'. 

Una conmovedora y reflexiva historia de los hechos que acontecieron en Europa en 1944 con los recuerdos de las personas que siendo jóvenes participaron, pasados ya tantos años no queda nadie vivo que pueda contar lo que se sufrió durante la gran guerra a las generaciones venideras para que esto no vuela nunca a ocurrir, ya que se tiene muy mala memoria y se tiende a olvidar.

Curiosamente, hay otra película de este mismo año con Michael Caine y Glenda Jackson titulada "La gran escapada" de la misma temática que tendrá su estreno en España en abril.
Destino Arrakis.com

"- Es un shock perder la guerra, pero es un shock mayor saber que estabas en el bando equivocado".

Film proveniente del Reino Unido, que tiene como mayores virtudes, primero, que está llena de buenos sentimientos, aunque haya alguna consideración en contra que hacer. Y segunda, que contiene una excelente y creíble interpretación de Pierce Brosnan, encarnando de forma veraz a un hombre de nada menos 92 años edad.

Sus andares, sus movimientos corporales en general, la mirada perdida, la voz, todo encaja y no era tarea fácil al tener 22 años menos en realidad.

La película se sigue sin dificultad aunque no emociona gran cosa, si exceptuamos la últimas imágenes del film, mientras comienzan a verse los títulos de crédito finales.
Pero no sorprende dado que, en realidad, es exactamente como yo pensaba que sería antes de verla. Tiene un ritmo romo, es cálida aunque el dolor del personaje se nos presente en todo momento, y entretiene de forma tranquila, sin aspavientos ni escenas desgarradoras.

Van apareciendo diversos personajes, la mayoría positivos, que van ayudando al protagonista en su viaje y los elementos técnicos con muy competentes, como la preciosa fotografía de Mark McCaluley y la precisa banda sonora de Stephen Warbeck.

En cuanto a lo, único, que no me ha gustado y me ha repateado bastante, es lo que indico en la frase del comienzo, realizada por el veterano alemán. La verdad es que, personalmente, me ha rechinado. Después de comentar cómo fue su incorporación al frente y aspectos anteriores, esa frase suena a falsa e impostada. Que no me la creo, vaya.

Pero, en líneas generales, se ve bien y resulta agradable.

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