Krull

Allá por los años 80 películas de aventuras fantásticas como 'Legend', 'El dragón del lago de fuego' o 'Excalibur'. Todas obtuvieron muy buenos resultados comerciales en taquilla y eran buenos ejemplos de filmes para toda la familia. 'Krull' no es la excepción y todo aquel que posteriormente la haya visionado se dará cuenta de que bebe de todos los anteriormente mencionados. Pero si hay alguna película (o más bien, saga) de la que este insustancial y pbre film se alimenta y se nutre es de la revolución cinematográfica que supuso 'Star Wars' en los 70 y en los 80, dado que entre ambas es muy sencillo encontrar semejanzas. Y precisamente, sin yo ser un gran adepto de la saga más exitosa de todos los tiempos, 'Krull' no le llega ni a la punta de los talones en su patético intento de ser la típica aventura fantástica de los 80, no solo por su trillada historia, sino por su pobreza a la hora de contarla debido a una dirección poco o nada inspirada, a su vergonzoso diseño de producción y a un presupuesto ínfimo que desde luego ya debían de estar confiados sus productores en que este bodriete de espadas y princesitas secuestradas fuera a tener éxito alguno. Naufragio merecido, sin más.

En lo referente a las interpretaciones, un desconocido (y creo que aún nadie lo conoce) Ken Marshall interpreta al héroe de turno en una actuación sin carisma y regular, contando además con un personaje muy plano y falto por completo de la enjundia que debiera poseer. Lysette Anthony sigue la estela del anterior y su belleza no es suficiente para suplir sus carencias como actriz. Liam Neeson (poco famoso por aquella época) como secundario en un personaje desaprovechado y al que se le podría haber sacado más jugo. En cuanto al diseño de producción, los vestuarios que acompaña a film son ridículos y la estética en general del film es muy ''freak''. Los decorados cantan a la vista y se nota por todas partes el uso del cartón-piedra y del papel pintado, además de unos vergonzosos efectos especiales que aún utilizan técnicas stop-motion e incluso algunos efectos de rayos y tiros ¡son dibujos animados¡ Una película que fue realizada en los 80 pero que debido a estos aspectos más bien parece de los 60.

En resumen, una floja aventura fantástica, tan típica en los 80 y que posiblemente en su época obtuviera un pequeño fracaso más que merecido, con poco presupuesto y un diseño de producción que incluye vestuarios ridículos, escenarios de papel y efectos especiales vergonzosos para ser de la época en la que están realizados. Poca originalidad y entusiasmo para una película comercial y fallida que aprovechó el tirón de filmes similares y sobre todo de 'Star Wars'.

·LO MEJOR: como curiosidad no está nada mal. Su revisión nostálgica de tiempos pasados para el cine.

·LO PEOR: el cutre y patético diseño de producción entero. Falta muchísimo carisma, ingenio, enjundia y originalidad para llevar el argumento por buen puerto. El síndrome post 'StarWars'.

Sin duda esta no es una de las mejores obras del cine; poco original, efectos especiales mediocres (incluso para la época), argumento bastante flojo... pero consigue lo que busca, entretener al público infantil. Cualquiera de nosotros que la hubiera visto cuando era un niño habría disfrutado como un loco, y muy posiblemente nuestros hijos aún lo hagan de la misma manera. Mención especial a la excelentísima banda sonora de James Horner, que hará que la recordemos con cariño a través de los años.

No sé si fue o no una "imitación barata" de la saga Star Wars, la verdad es que no me importa. Solo sé que Krull me parece una estupenda y preciosa película. Otra más de aquella maravillosa época de la historia del cine como fueron los 80s, con maravillosos e irrepetibles films, y en concreto del cine de fantasia y aventuras, un género tristemente olvidado y maltratado desde hace tiempo.

Un joven apuesto y valiente principe (Colwyn) que pierde a su padre, su prometida (Lisa) y su reino a manos de una horda de extraños seres procedentes de otra galaxia, comandados por un oscuro, poderoso y terrorífico ser llamado "La Bestia", deberá armarse de valor para rescatar a su amada y terminar con dicho ser y su ejercito, que amenazan con destruir su mundo, el mundo de Krull. Durante la aventura hacia su propósito, se verá acompañado de curiosos personajes, como un viejo sabio, un peculiar mago, una banda de ladrones y un cíclope.

Las actuaciones son más que correctas, donde podemos ver a un jovencísimo Liam Neeson, que ya habia actuado un par de años antes en otra maravillosa película de fantasia llamada "Excalibur" (1981), seguro que os suena...

La fotografia es preciosa y los efectos especiales de buena factura para un film de principios de los años 80s.

Una de mis películas del género de fantasia/aventuras favoritas.

Fallida superproducción de corte fantástico, hermana bastarda de Star Wars, que se estrelló en taquilla estrepitosamente. A pesar del considerable dinero invertido la película enseguida quedó desfasada por la imposible mezcla entre el género fantástico y la edad medieval. Todo el apartado técnico a excepción de la banda sonora, obra de James Horner y a la postre lo mejor de la película, luce obsoleto. Es decir, vestuario, diseño de producción y efectos especiales desfasados en una historia que se asemeja un tanto a la del Señor de los anillos pero que no funciona de ninguna de las maneras.

Soy escritor y un amante del Fantástico, en especial del cine de Ciencia Ficción. Nací el año que estrenaron la primera "Guerra de los mundos", así que no me dejo llevar por los juicios rápidos e insensatos; y al igual que Harryhausen o Bradbury sigo siendo un joven lleno de sueños y con mucha imaginación; aunque algo más listo. Me he decidido a realizar una revisión de todos los títulos del género, y comprobar a fecha de hoy su frescura. Ésta merece el calificativo de: REGULAR.
Krull fue una simpática y curiosa incursión de Peter Yates en el género Fantástico, ensalzada con la música épica de James Horner. Para llevar a cabo el proyecto hubo de rodearse de un diseñador talentoso como Stphen Grimes, a quien se debe toda la atmósfera futurista en un mundo de corte medieval. Derek Meddings puso se buen saber en lo referido a los efectos. En su día tuvo que competir con películas de la talla del "Retorno de Jedi", y aun así se hizo un hueco entre los aficionados. Hoy por hoy la película ha perdido mucho porque los medios del momento no permitían más, y los efectos han quedado pobres y desfasados, dejando claro las limitaciones que tuvieron que afrontarse en su día. Esto le pasa factura a la cinta. Las transparencias cantan que es un primor, no estando a la altura de los maravillosos y gigantescos decorados que se emplearon en los estudios Pinewood de Inglaterra, donde rodaban la película en varios sets a la vez, dada la proporción y complejidad de la producción. Por otro lado, toda la historia del príncipe de cuento que va en busca de la princesita de turno, está ya muy vista. Sobre todo, si la rodeamos con los tópicos habituales. Una pena que el paso de los años tire por tierra tantas ilusiones y esfuerzos.