Haz click aquí para copiar la URL

Rebelión en las aulas

Drama Mark Thackeray, un ingeniero negro sin trabajo, acepta un empleo como profesor de un grupo de estudiantes bastante conflictivos en una escuela de la periferia de Londres. Sus alumnos son insolentes y groseros pero, en el fondo, no tienen malos sentimientos. Al principio intenta ganarse su confianza utilizando los métodos tradicionales, pero fracasa tan estrepitosamente que no tendrá más remedio que recurrir a otras fórmulas. (FILMAFFINITY) [+]
<< 1 2 3 4 5 6
Críticas 28
Críticas ordenadas por utilidad
13 de julio de 2022
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
234/13(09/07/22) Envejecido drama británico que trata sobre los problemas de educación en jóvenes beligerantes. James Clavell dirigió a partir de su propio guion, adaptando la novela autobiográfica de 1959 de ER Braithwaite del mismo nombre. Pretende ser un homenaje a los profesores que se toman en serio su trabajo, pero me queda todo muy trivial en cómo evoluciona la trama. Historia que se siente como una secuela del film estadounidense “Blackboard Jungle” (1955), también con el protagonista de esta, Sidney Poitier (el actor estaba en la cima de su carrera, estrenando este 1967 además de “To Sir, with Love”, también protagonizó “Guess Who's Coming to Dinner?” y En el calor de la noche. Todo un año de hecho., en este caso hizo de alumno problemático, y aquí pasa a profesor, en una clara evolución del personaje que siguió los consejos de su maestro entonces encarnado por Glen Ford. Los dos films con temático idéntica, como es la llegada de un nuevo profesor idealista (aquí tiene frases tan low cost de autoayuda como: "con trabajo duro, puedes llegar a lo más alto"), a un colegio de enseñanza superior (High School) donde le esperan un puñado de estudiantes conflictivos, y lo que viene después es tan previsible como que después del día viene la noche, el maestro sufrirá los ataques de esos alumnos en crescendo, hasta que explotará y dará con ello con la tecla de como poder domarlos. Y la película en este sentido no sorprende en momento alguno, no hay capacidad a la sorpresa, a algún giro ingenioso, todo resulta tan plano como una mesa. Pero es que encima, para él que haya visto el film mencionado de 1955, con auténticos alumnos bichos pandilleros (ladrones, violentos, violadores, navajeros, …), estos son unos traviesillos graciosetes donde los más peligroso que hacen es tirarle una bolsa de agua al maestro, o cortarle la pata de la mesa, todo muy discretito, nunca vemos sean mala gente. Con lo que la reconversión que se espera resulta muy liviana y poco emociónate, con el más Destroyer de los alumnos haciendo algo tan salvaje como dar un portazo al pupitre. Todo se siente de enorme ligereza. Y encima la forma en que se gana el profe a sus alumnos resulta chusca, pues pega cuatro gritos y ya está, ya los ha sometido, dejará de darles clases de ninguna asignatura (no se si llega a decir cuál es su temario), y se atendrá a darles lecciones de educación (que, si deben llamarlo señor, si a las chicas deben decirles señoritas, y que si los lleva a un museo, …). Ah, y para el más gamberro (Christian Roberts) de todos le basta con un combate de boxeo y ya cae rendido a sus pies el chico. Todo muy manufacturado en su simpleza.

Mark Thackeray (sidney poittier), un inmigrante a Gran Bretaña de la Guayana Británica, no ha podido obtener un puesto de ingeniería a pesar de una búsqueda de trabajo de 18 meses. Mientras tanto, acepta un puesto de profesor para la Clase 12 en la Escuela Secundaria North Quay en el duro East End de Londres, como puesto interino, a pesar de no tener experiencia docente. Los alumnos de la Clase 12 han sido rechazados de otras escuelas y Thackeray es el reemplazo del ex maestro fallecido. Los alumnos, liderados por Bert Denham (Christian Roberts) y Pamela Dare (Judy Geeson), se comportan mal. Sus payasadas van desde el vandalismo hasta las bromas desagradables. Thackeray conserva una actitud tranquila, pero pierde los estribos cuando descubre que algo se está quemando en la estufa del aula, que resulta ser la toalla un támpax (¿?).

Hay elementos que se tratan de un modo tan suave que parecen estar diciendo ‘no molestaremos’, como es el enamoramiento de una rubia y bella alumna (Judy Geeson) del profe negro, y esto no tiene connotaciones en el colegio interraciales (¿?), como también se apunta a otro romance entre una hermosa profesora (la ex modelo Suzy Kendall, afeada [imposible] con unos grandes anteojos) y se queda in media res; El mismo tratamiento del racismo se aborda de un modo poco serio, y eso que hay un profesor negro en una clase con casi todo el alumnado blanco, esto solo se roza con la muerte del padre de un joven negro, pero la forma en que se resuelve esto me es de un buenismo propio del infantilismo más del mundo de la piruleta, donde unos díscolos jóvenes pasan de gamberros irrespetuosos a educados abnegados en un plis plas; Luego tenemos su pasteloso rush final, de los no apto para diabéticos, de lo almibarado que es dan ardores.

De la película, aparte de la buena actuación de un siempre carismático Poittier, queda su famoso tema central en la canción de Lulu Frieda (hace un rol secundario como alumna, Babs), la que da título al film, "To Sir with Love", que se hizo popular en su tiempo llegando a la cima de la lista Billboard Hot 100 en USA durante cinco semanas en el otoño de 1967 y finalmente fue el sencillo más vendido en los Estados Unidos de ese año, aun así no fue nominado al Oscar en su categoría lo que hizo que los productores oficializaran una queja mediante una carta a la Academia. Tema que se escucha 4 veces en el transcurso de la película, en cuatro versiones distintas, siendo grimante una de ellas, cuando se oye mientras vemos un muy arrugado montaje de fotos del alumnado en el museo, como si no les hubieran dejado rodar allí y hubieran echado fotos furtivamente. Tramo este de la excursión al Museo Victoria and Albert y al Museo de Historia Natural en South Kensington se mueve entre lo ridículo y loa vergüenza ajena en el modo en que se infantiliza a estos talluditos alumnos. Por cierto, como dicen los rostros de los alumnos que su adolescencia hace años que pasó, y que rebasan con mucho la veintena, de hecho, podrían perfectamente ser los profesores por edad.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
TOM REGAN
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
17 de noviembre de 2022
Sé el primero en valorar esta crítica
Una muestra de que con interés y voluntad todo se puede conseguir. Hay que ser paciente y saber actuar ante las diferentes situaciones y, especialmente, personas que se nos cruzan a lo largo de la vida. No vale con perder los estribos y enfrentarse a todos o darse por vencido y dejar que los problemas nos resbalen y les caigan a otros. A pesar de que la sociedad de hoy en día deriva cada vez más en el individualismo y el hermetismo del hogar, el ser humano es un ser social que necesita comunicarse y ser atendido en esa comunicación. Esto es lo que nos demuestra este filme al presentar a una serie de chavales aparentemente desastrosos y que lo único que reclaman es una atención que nadie (padres, profesores, gobierno o sociedad) le prestan para poder enseñar su lado bueno.

Gran actuación de Poitier que necesita de un mejor planteamiento de la historia, ya que la resolución final del filme parece un poco simple, con varios saltos bruscos entre escenas. Es una película que llama más por su trama, poniendo en la pantalla a un sector de la sociedad que recibe muy poca atención y la que recibe no es la más idónea -como remarca el guión-, que por su puesta en escena.

Como ya se ha dicho, se trata de una película de crítica social muy marcada, que es pobre en planteamiento cinematográfico, pero rica en intención comunicativa.
Juguti14
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
21 de junio de 2012
3 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Mark Thackeray (Sidney Poitier) se muestra como la salvación a unos chicos y chicas londinenses bastante perdidos, que gracias a la dedicación y buen hacer de este buen profesor comienzan a enderezar su vida. Desde luego Poitier pasa por varias acciones que desestabilizan su buen caracter, provocados por estos chicos pendencieros que carecen de la educación necesaria para enfrentarse a la vida.

Pronto el nuevo profesor se da cuenta de que de nada sirve enseñarles las materias comunes y trata de impartirles tanto disciplina, como buenas maneras en su vida próxima. La película no queda muy actual, de hecho queda bastante anticuada por ciertas enseñanzas que hoy día no estarian "bien vistas" impartir en una clase. La película es plomiza y queda muy alejada de la realidad. La clase de adolescentes problemáticos parece más bien una excursión de novicias. En fin; un film mediocre protagonizado por un gran actor. Ahora que estoy viendo el final, ¡Poitier baila como una maricona!.. ¿o es que en los sesenta se bailaba así?

La canción principal de la peli interpretada por Lulú (Señorita Peg) es bastante buena. Por cierto; en el reportaje previo dijeron que dos años después esta actriz-cantante actuó por su país en el festival de Eurovisión, que ese año tocó en España.
axlyerin
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 2 3 4 5 6
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow