A pesar de todo

Si yo fuera guionista y tuviera que presentar este guión, me sentiría profundamente avergonzado. Creo que estamos llegando (Tal vez lo hemos superado) al centro del hoyo en la creatividad, o desarrollo de proyectos que carecen de objetivos y se gestionan desde la epidermis.

Ya no basta con tener un buen elenco de actrices para atraer a un público que cada día más, se aleja de la superficialidad en el tratamiento de las historias. La comedia es uno de los géneros más complicados, y aquí se recurre a ella continuamente creyendo que el público conectará con mayor facilidad. Pues ya veis las puntuaciones generales.

Nada de lo que aquí se cuenta interesa, ni siquiera las escenas pretendidamente mas sutiles consiguen impactar. Tal vez no se merezca el uno que le he dado, podría llegar a un dos... jamás a un tres, pero tenemos que comenzar a castigar la escasez de talento.

Comedia española salida de la multinacional NETFLIX. Como tal película española tiene de común el bajo presupuesto y los mismos actores/actrices de esta década que salen en todas las películas españolas, pero en ésta comparten reparto con otros actores veteranos del cine español como Marisa Paredes, Juan Diego o Tito Valverde, aunque con papeles más cortos o secundarios. Es de destacar el de Juan Diego en un personaje de persona mayor a la que le está atacando ya el alzheimer. En cuanto a las cuatro actrices protagonistas están fantásticas las cuatro, no me decantaría por ninguna de ellas en especial.

El argumento es simpático, aunque no faltan sus momentos sensibles y de corazoncitos. Los personajes son muy actuales, sacados de una sociedad nuestra muy plural, aunque pudieran caer, para algunos, en los tópicos sociales.

En suma, es una comedia española sin pretensiones, solo la de pasar un rato entretenido/a y lo consigue, yo me reí mucho y lo pasé bien con este visionado del cine español.

Madre mía, no me lo puedo creer. Netflix se ha vuelto majareta. El despropósito mayor que he visto en mucho tiempo. Y eso que las actrices protagonistas son de lo más actual del panorama español ( actual no es sinónimo de bueno), los secundarios son de lo más bueno del panorama español ( esos si que son buenos), la fotografía, los escenarios , el vestuario... es un derroche del grande. Pero la historia...... es el bodrio del año, increíble, no hay por donde cogerla. El guion que es de la directora, no sé si idea original o adaptado, deja todo que desear. No hay un chiste gracioso, ni una chispa de ingenio. No hay emociones, les han dado cuatro pautas y con una cámara delante han rodado hora y pico intentando contar algo que resulta cansino, predecible, fatal. Lo de siempre, me la he tragado porque no doy crédito, siempre espero ese giro final que haga que merezca un poco la pena, pero ni eso. El único entretenimiento era ver el desfile de secundarios haciendo el papelito penoso de su carrera(entiendo que el paro es muy malo). Y luego ver las diferencias estéticas entre las cuatro protas, sus looks, como van creciendo ( en la vida real y como personas se entiende. Porque como actrices, a este paso, ya no crecerán nunca más). Un churro total y absoluto.

Buena idea mal concebida. Reparto brillante (exceptuando a la tan sobrevalorada Macarena García, que no es brillante pero cumple) echado a perder. Tocan temas cruciales, algunos de ellos tan de actualidad, y se pasean por ellos alegremente sin profundizar en ninguno, como quien nada más toca el agua con el pulgar del pie para ver si está muy fría. Totalmente simplista al abordarlo todo. Los conflictos se resuelven con reacciones blandas o, la mayoría, fuera de cámara, así "por arte magia", parece. Se quedan lejos de todos sus objetivos: ni análisis, ni sátira, ni comedia, ni drama. Belén Cuesta, eso sí y como siempre, te saca unas sonrisas. Y la dirección de arte correctísima; buena atmósfera.

Venga, va - intentemos ver el largo -- SPOILER - necesité tres malditos intentos para verlo entero. Lo cual es significativo, pues el largo dura apenas una hora y veinte. Menos que un episodio del Ministerio del Tiempo. O sea - anda más cerca de la TV patria por intenciones y hasta duración que de un largo. Mala cosa - que me aspen- tres largos españoles que he visto made in Netflix, tres noes - dos que son teatrales y ahora una que parece un telefilme, señoras y señores -- madre mía de mi vida -- ¿por dónde atacar? Pues desordenado - el turisteo de la ciudad en el largo sobra. Relleno. ¿El humor? Nulo. ¿Los beats? de uno a otro, torpemente, forzado y con alta de elementos de transición - luego está la BSO, sonrojante - y la subtrama amorosa, de Michael Curtis made in Hacendado -- los malentendidos, sin chispa, el dibujo de personajes, superficial - y un conjunto lleno de clichés + lugares comunes que están vistos hasta el cansancio. Esto parece un largo de 1996, gente - el mínimo común denominador más ñoño, disneyano, buenista, ingenuo y desfasado.

Tele marinera. Netflix -- (suspiro)