Haz click aquí para copiar la URL

Gomorra (Serie de TV)

Serie de TV. Drama. Thriller Serie de TV (2014-2021). 5 temporadas. 58 episodios. Los protagonistas forman el clan de los Savastano, que impone su ley en Secondigliano. El temible "capo", don Pietro Savastano (Cerlino) está casado con la implacable Imma (Maria Pia Calzone) y tiene un hijo de 20 años, Gennaro (Esposito), pero es demasiado joven y débil para suceder a su padre. Su mano derecha es el inteligente y ambicioso Ciro di Marzio (D`Amore), y su gran rival en ... [+]
<< 1 3 4 5 10 11 >>
Críticas 55
Críticas ordenadas por utilidad
12 de julio de 2014
12 de 16 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me la he terminado en menos de una semana y nada mas que añadir a esta obra de arte. Sublime simplemente sublime, la trama que tiene, la fotografía, los personajes que empatizaras con ellos para bien o para mal.. Una de las cosas que mas me ha gustado de esta serie es que es mas directa, desde el capítulo uno ya estás en medio de todo. No tengo mas que añadir salvo que tienes que verla, te guste o no el género y/o ambiente en el que se mueve.
oliverlp
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
12 de septiembre de 2014
10 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
Melancolía. Romanticismo. Alegría. Épica. Todo eso es lo que podemos encontrar prácticamente en cualquier serie o película actual. Pues Gomorra no tiene nada de eso. I lo mejor es que no lo necesita. Es diferente a cualquier cosa vista hasta ahora. Es simplemente diferente.

Cuando pensamos en la mafia probablemente nos venga a la cabeza la mafia italoamericana de Al Capone: caballeros vestidos impolutamente, asesinando sin dejar rastro y utilizando sicarios para acometer el trabajo sucio; la aristocracia de la mafia. Pero la Camorra no es así, es harina de otro costal. Ellos deciden, ellos ejecutan i sin miramientos. No hay problema si se tiene que hacer en una calle transitada, nada de esconderse ni intentar no dejar rastro. Precisamente al contrario, se tiene que marcar territorio y después llevar un negocio de la mejor manera, que no es fácil. Es una cuestión de poder callejero.

Es una serie totalmente adaptada al espectador puesto que la presentación de los personajes es muy progresiva, muy bien relatada y con los giros argumentales acertados, también gracias a un guión excelente.

Un factor que también crece exponencialmente es la calidad. En el primer capítulo ya podemos ver lo que se cuece en aquel lugar y ya nos proporciona la acción y el suspense presente en toda la entrega. A destacar, la escena final del primer capítulo y el final de temporada, bestiales e imprevisibles.

Este intercambio de tiros, persecuciones y enojos son genialmente interpretados por unos actores prácticamente desconocidos en el panorama internacional pero que aportan un realismo extremo a la serie. Sin duda, otro factor que es esencial es que ha sido grabada en el mismo barrio de Secondigliano aunque los políticos italianos no estuvieran del todo a favor. Hasta la propia y temida camorra pidió cobrar por grabar en ciertos lugares; pero el acogimiento y respuesta de la audiencia la ha llevado al éxito y ha ayudado incluso a que podamos disfrutar de una segunda temporada. Se vive una intranquilidad palpable que no podemos encontrar en el Baltimore o New Jersey de The Wire y Los Soprano, respectivamente. Se podria decir que es una mezcla entre las dos serie aunque serie insuficiente. Siempre es más completa.

Violencia, venganza y ambición puede que sean los adjetivos que pueden describir de la mejor manera una serie indescriptible. Se tiene que mirar, se tiene que escuchar, se tiene que sufrir y hasta diría que se tiene que vivir. Recomiendo por encima de todo verla en versión original porque no tiene perdida el dialecto napolitano, que desafia hasta los más entendidos en italiano. Una de las series del año con más repercusión en el mundo televisivo i con una segunda entrega llamando a la puerta. Da non perdere, capire?
mmint14
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
27 de febrero de 2022
10 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
51/13(14/02/22) Recién acabo de ver el décimo y último episodio de la quinta y definitivamente última temporada de este pináculo catódico en formato thriller mezclado con drama criminal creado para el canal Sky Atlantic por el periodista y escritor transalpino Roberto Saviano, basándose en su libro homónimo de 2006 (también dio origen en una película del 2008 libremente inspirada en la novela, pero no relacionada con la serie), también en la gestación están Ludovica Rampoldi, Giovanni Bianconi y dos amigos, Stefano Bises y Leonardo Fasoli, guionistas con experiencia en el mundo policial, autores de la serie “Squadra antimafia - Palermo oggi”, creada por Stefano Bises y Leonardo Fasoli (2009, 7 temporadas), estando en la dirección Stefano Sollima (responsable de la serie “Romanzo criminale”), Francesca Comencini y Claudio Cupellini. Una devastadora deconstrucción del mundo de los narcotraficantes, donde la amoralidad, la deslealtad, la traición priman sobre el honor y la dignidad, donde las relaciones familiares resultan disfuncionales, aquí lo importante es tener el poder como sea, en un juego darwinista incisivo, donde vale tanto la fuerza bruta como la inteligencia para manipular al adversario.

Para mí ha sido como ver un Juego de Tronos trasladándolo a nuestros días, y donde el gran Reino a conquistar es Secondigliano en Napoles (serie rodada en gran parte en el barrio de Scampia-Napoli, con otras localizaciones en Roma, Milán, Ferrara y Barcelona), y para ello los clanes no cejaran en su empeño, con alianzas de conveniencia y rupturas de estas, mostrando un nivel de violencia atávica colosal. Con todo un sinfín de humillaciones (para siempre se me quedará ver a Pietro orinar en un vaso de tubo y hacérselo beber a su lugarteniente Ciro como muestra de su sometimiento, Brutal), amenazas, torturas, asesinatos, raptos, nadie está a salvo en este micro universo, donde la venganza suele ser el motor deux machine de muchas acciones y reacciones. Mostrando un mosaico de una sociedad con metástasis, donde a todos los niveles está de una u otra forma involucrados en estos negocios espurios. Todo surtido por guiones ingeniosos, mordaces, que delinean personajes con carácter y alma propia, con evolución de los mismos, con situaciones tensas, con momentos épicos, con actuaciones sensacionales, con giros imprevisibles que te dejan ojiplático. Relatos de una crudeza que duele, despojando de cualquier glamur al mundo criminal, una mirada desmitificadora, mostrando que quien entra en estos clanes ya no escapa de su espiral de maldad, has vendido tu alma al diablo. Teniendo el talento para saber ampliar espectro de lo que se cuenta, cuando se dedican episodios a personajes secundarios para dar un enfoque más amplio de este mundillo.

Todo ello con una puesta en escena brillante, moviéndonos por el Nápoles marginal, el patio trasero (o basurero) de la gran ciudad, lugares deprimentes, pisos asquerosos, callejones sucios, moles de hormigón deshumanizadas, paredes con grafitis, dando la impresión por momentos de ser lugares postapocalípticos de donde en cualquier momento saldrán zombis. También llama la atención como muestra las viviendas de los capos, como lugares horteras, sobrecargados de decoración hasta la cursilería. Hacen creíbles las ‘aventuras’, con una fotografía dramática muy acentuada en cómo se juega con la escasa iluminación, con las penumbras, y se suma una banda sonora hip-hop fascinante del grupo Mokadelic que sirve no solo para ambientar muchas escenas, si no, también para ser la coda de cada capítulo, donde el clímax te asfixia en cada capítulo, Brutal. Con escenas de acción formidables, con persecuciones, tiroteos, explosiones, y todo esto que suena a otra más de la mafia desde el lado feísta, y me doy cuenta que describirla es limitarla, pues una tragedia griega que te imanta, te atrapa, por su modo de contar la historia y por unos personajes carismáticos que te importa lo que les pase. Excepcional en retrato de cómo funcionan los mecanismos de la venta de droga de estos camellos, como comercian en las plazas con ella, como vigilan, como se mueven en scooters, excelente.

En 2019 el personaje de Ciro di Marzio, interpretado por Marco D'Amore, dio el salto a la gran pantalla con una película, “L'Immortale” (2019), que se centraba en sus orígenes. El actor Marco D'Amore protagonizó y dirigió la película, escrita por algunos de los guionistas de la serie, es tanto una precuela como una secuela a los eventos posteriores a la tercera temporada de la serie.

La serie cubre una etapa con cada temporada, sabiendo evolucionar a cada episodio, con el choque entre Genna y Ciro que se establece como columna vertebral, su tensa relación de tiras y aflojas, con luchas cainitas, con muertes desgarradoras, hasta parecer que en el final de la tercera se han pegado un tiro en el pie con la desaparición de un protagonista, pero entonces llega la cuarta temporada y te das cuenta de que no, que la historia sigue avanzando de modo orgánico, en este caso con uno de los capos intentando ‘lavar’ su fortuna con la construcción de un aeropuerto, en paralelo uno de los personajes femeninos (Patrizia) toma protagonismo en un gran argumento. Y llegados a la quinta llega la gran batalla final (con el forzado regreso de un protagonista, esto si es una tara el modo de hacerlo regresar) en esta Guerra el enfrentamiento en este Desembarco del Rey que es Secondigliano, donde todo vuelve a ser imprevisible, y donde las relaciones paterno-filiales serán fundamentales en su devenir. Hasta desembocar en un capítulo final espléndido, una conclusión a la altura de la serie, calándote lo que les ocurre a los protagonistas, dejándote pensando un rato, Trémulo.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
TOM REGAN
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 de julio de 2018
9 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
NO son vidas llenas de ostentación, lujos, super coches o fiestas VIP muy caras.

SÍ son gastos prácticos en vehículos de alta gama para moverse, salarios altos a vigilantes, sueldos de soldados o sobornos.



NO son personajes que nunca se equivocan, todo les sale bien y, en caso de que no, siempre saben lo que tienen que hacer en cada momento.

SÍ son personalidades muy fuertes que en todo momento se paran a pensar antes de cada paso, consultan, aciertan y -sobretodo- se equivocan.



NO son una estética cuidada con decorados bonitos, paisajes paradisíacos o ciudades glamurosas.

SÍ son barrios marginales con entornos decadentes que se caen a trozos, almacenes ponzoñosos y callejuelas mugrosas.



NO son montones de dinero y droga que vienen y van que solo muestran al espectador una vaga visión de cómo funciona "el sistema".

SÍ son todos los mecanismos de cómo se organiza "el sistema", cómo se tienden los lazos, cómo se conecta logísticamente o cómo se empieza desde cero.




NO son mujeres despampanantes que solo son un cuerpo y una cara bonitos sin tener ni voz ni voto.

SÍ son mujeres que saben en cada momento qué hacer y cómo actuar. Son el ejemplo perfecto del dicho: "Detrás de un gran hombre hay una gran mujer".




NO son héroes bondadosos que tienen un código ético o moral.

SÍ son personas que a veces son compasivas y solidarias y otras son seres completamente despreciables, llegando a mostrar la parte más cruel del ser humano.





A nivel producción es la cara más cruda y real del crimen organizado que haya visto nunca.
Sin florituras, sin voces en off, sin reflexiones internas. Todo lo que los personajes tienen que decirle al espectador se les puede leer en la mirada, no se explica nada pero se entiende todo.
En ese sentido las interpretaciones son de 10.

No lo puedo comparar a nada que haya visto hasta ahora en cine o series relacionadas con el crimen organizado o el narcotráfico.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Johnson Vega
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
13 de abril de 2018
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Empecé esta serie en su momento por las buenas referencias. La verdad es que la producción debe ser de lo mejor que se ha hecho en la televisión europea. En producción alcanza los estándares de las series americanas. Algo pocas veces visto a este lado del charco, sobre todo si no contamos Reino Unido.

También es aquí donde empecé a prestar especial atención a la carrera de Stefano Sollima, que se convirtió en uno de mis cineastas favoritos de la actualidad. La primera temporada me gustó aunque no me enamoró. En un segundo revisionado sí supe apreciarla mejor. Pero fue la segunda temporada la que me encandiló. La serie pasaba a convertirse en un Juego de tronos, mucho más coral, con un mapa más diverso de personajes carismáticos cada uno a su manera. Lo cual solucionaba un poco el hecho de que el padre patrón original nunca llegase a convencerme, no se si por el personaje o por el actor, que me resultaba muy impostado (aunque de esto pecan varios de la serie y conforme pasan las temporadas cada vez más y peor).

Es cierto que desde el principio hay que concederle licencias en lo forzada que resultan algunas situaciones y diálogos, pero se compensa con los grandes momentos y, sobre todo en la segunda temporada, con lo mucho que engancha. El problema viene cuando a partir de la tercera temporada, la serie va perdiendo rápidamente sus mejores bazas y por contra evidencia cada vez más sus defectos. Acaba convirtiéndose en una serie de diálogos ridículos, interpretaciones malas y tramas tan cutres y rocambolescas que llegan a dar hasta vergüenza ajena en la quinta y última temporada. Y todo innecesariamente ya que tras la segunda temporada quedaba bastante cerrado todo, a partir de ahí es querer volver al punto cero una y otra vez y cada vez peor.

Es una pena que haya acabado de esa manera tan poco digna (y también tiene uno de los peores finales de serie que recuerdo, tosco y estúpido para ir a juego con lo que viene siendo los últimos tiempos de la serie). Pero no se puedo olvidar tampoco que durante dos temporadas fue de lo mejor que se ha hecho en televisión europea. Y solo por eso me parece imprescindible y recomendable. Eso sí, dejad de verla tras la segunda temporada para no estropearlo. Y, por cierto, no soy talibán antidoblaje ni mucho menos, pero en esta serie es vital verla en italiano.

Notas por temporadas:
Temporada 1: 8
Temporada 2: 8,5
Temporada 3: 6
Temporada 4: 4
Temporada 5: 2,5
El Tito Mel
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 3 4 5 10 11 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow