Grand Canyon (El alma de la ciudad)

Magnífico guión.
Estupenda película.
Al igual que otras grandes obras sobre historias cruzadas (como Short cuts o Magnolia), las vidas de sus personajes, sus soledades, sus miedos y sus ambiciones, dibujan este fabuloso retrato coral con Los Angeles como lienzo.
La poética metáfora de magestuoso Gran Cañón frente a las vicisitudes personales de los humanos en la gran urbe es sencillamente magistral.
Una preciosa banda sonora y un montaje efectivo completan el buen trabajo de dirección y las interpretaciones.
Profunda, emocionante y muy entretenida.

Nos encontramos ante la reflexión entrelazada sobre una sociedad sumida en la cotidianidad, que se aleja de esa infrecuente interiorización, evitando la búsqueda real de lo que verdaderamente tiene valor, y al final importa.

Las historias de los personajes se entrecruzan en un contexto de sensibilidad profunda, con algunas propuestas abarrotadas de sinceridad, desde unos diálogos introspectivos y ponderados.

Existe cierta magia equívoca debida a escenas donde pudiera llegar a pensarse que los personajes se deslizan como en una especie de meditación... Hasta llegar a la escena final, donde entendemos ese título... Grand Canyon.

Lawrence Kasdan es famoso por ser uno de los guionistas mas celebrados en Hollywood, pero también tiene como director algunas peliculas grandiosas. Este es el caso de Gran Canyon (también de Reencuentro, el turista accidental y Fuego en el cuerpo ).
Hace más de 30 años que vi esta película en el cine. hoy he vuelto a verla.
Ha pasado el tiempo.
Ha cambiado la sociedad.
He cambiado yo.
Pero esta película sigue siendo un diez.
Porque aunque han pasado 30 años, aunque ha cambiado la sociedad, aunque yo soy 30 años más viejo (en realidad 32 años), hay cosas que permanecen igual.
Hace 25 años tuve la grandiosa oportunidad de visitar el Gran Cañon del colorado. Lo hice porque me lo recomendaron... y también, por qué negarlo, porque esta película me invitó a ello. Y no puedo más que recomendarlo a todo el que pueda hacerlo. Aquello seguirá (supongo), como hace 30 años, como hace 30.000 años, como hace...
La película trata de las relaciones humanas, trata de padres imperfectos, de hijos imperfectos, de relaciones imperfectas en una sociedad imperfecta. Y trata de la esperanza... de que merece la pena intentar hacer las cosas bien, que el futuro no está escrito, que lo escribimos todos cada día.
Hubo un tiempo en el que se hacían películas en Hollywood.

Drama social emotivo y humano en el que su director, Lawrence Kasdan, nos narra de forma coral, las vidas de un grupo de personas procedentes de diversas clases sociales, con un punto en común, la violencia de las calles de un barrio de los Angeles. Las interpretaciones están muy bien, incluso la de Steve Martin, acostumbrado a la comedia. La banda sonora por parte de el gran músico James Newton Howard es muy buena (no se esperaba menos). Es la gran obra maestra de Kasdan según algunos críticos.

Notable drama acerca de cómo la violencia en una gran ciudad puede afectar la vida diaria de sus habitantes.
Muchas historias cruzadas, personajes desarrollados, entretenimiento, emociones y un tono intencionadamente buenrollista en esta película de Lawrence Kasdan que sirve como antecesora clara de la posterior y magistral Crash, de Paul Haggis. Uno de los escasos roles dramáticos de Steve Martin, además, al menos en los últimos años, encabezando un reparto con nombres excelentes como los de Danny Glover, Kevin Kline, Mary McDonnell post-Bailando con lobos o Mary-Louise Parker.