Admitido

Quizá haya que ser un universitario para que de verdad entiendas la idea de la peli. Quiero decir que si no has ido a la universidad o hace mucho que fuistes no te sentirás identificado con la historia como me pasó a mi. Resulta que cuando la vi yo estaba pasando una mala racha con mi carrera y estaba un poco asqueada del sistema universitario, así que fue ver la peli y pensar ¡yo también quiero eso!
Mucha gente la ha catalogado de otra estúpica comedia americana más, pero a mi no me lo parece. Realmente es graciosa, Justin Long tiene una buena vena cómica y te partes con sus ocurrencias. Los demás actores tampoco están mal y las risas de la peli no van del tema sexo y borracheras en la fiesta de la piscina, como suelen ser las típicas del género. Simplemente son un grupo de chavales que al ser rechazados de todas las universidades intentan colarle a sus padres que han sido admitidos en una inventada por ellos mismos. La cosa se les va de las manos y empieza a ser algo más que una forma de tener contentos a sus padres, surge una idea alternativa de lo que puede ser la educación y la universidad. Aunque esté en una comedia adolescente esta idea no es superficial en absoluto, sabemos que mucha gente se ve presionada por su entorno para hacer una carrera con futuro y que le asegure un trabajo con un buen sueldo, sacrificando en muchas ocasiones lo que de verdad es su pasión, algo que sé por propia experiencia. Por no hablar de que la unversidad está completamnte politizada y corrompida en muchos sentidos.
El mensaje de la película es que las cosas podrían ser diferentes, que la educación superior no tiene que ser tan rígida y cerrada, hay otras posibilidades.
Esto aparte tiene otras connotaciones porque las universidades en Estados Unidos son muy exclusivas y muchísimo más caras que aquí, y algunas son de un auténtico rancio abolengo, como las de las Ivey League (Harvard, Princeton, Yale y demás), las consideradas ocho mejores universidades del país.
En resumen es una película agradable, pasas un buen rato y te ries a carcajadas. Y además se añade que la idea de la historia es buena y diferente a lo que estamos acostumbrados. Así que la considero muy recomendable.

El género de esta película es malo por naturaleza, hasta ahí muchos de acuerdo, entonces es por eso que le doy un 7, ya que tiene mérito hacer una película medio decente en dicho género, adolescentes, preuniversitarios... La idea de la creación de una universidad para rechazados e inadapttados es muy original, y el director lo enfoca todo con un aire cómico, como no podía ser de otra manera, simplemente me gustó.

Accepted nos cuenta la historia de unos amigos rechazados por varias universidad que comienzan una propia para que sus padres se sientan orgullosos. Es una historia simple, pero, ¡qué buena película!

Es el sueño de cada chico o chica en la Universidad, no seguir las reglas de la sociedad y comenzar tu vida de la forma que quieras. Trata sobre los sueños, las posibilidades y de no arrepentirse de ellos. ¡La amé!

El final es un tanto cursi y las actuaciones son pésimas, pero es la típica comedia juvenil que amamos las almas infantiles. Si te gustó American Pie o Eurotrip, esta película es para ti, además que podrás ver a Blake Lively (Gossip Girl) en sus comienzos.

Supongo que la mayoría de ustedes querrá unirse a S.H.I.T (South Hampton Insitute of Tecnology) luego de ver divertida película.

¡El monólogo final de Justin Long no tiene precio!

Otra comedia de estudiantes más para echar al saco. La verdad es que esperaba otra cosa mucho peor y gracias al cielo ha sido una peli bastante entretenida pero sin llegar a más. Para pasar el rato está muy bien y la idea la verdad es que es original, pero ocurre tan rápido y con tan poca explicación de todo que resulta un poco vacía al final.

Los actores muy divertidos y muy bien escogidos, y el final lo mismo de siempre con los topicazos de siempre y con el discursito de siempre

Independientemente es mejor que otras que he visto del mismo género.

Película del siempre aprobado «por los pelos» Steve Pink (director, entre otras, de Jacuzzi al pasado 1 y 2), esta que nos ocupa tiene un inmerecido 5,1, hoy al menos, día en el que escribo esta crítica. Sin embargo, yo le pongo un 9 porque cada vez que la veo (y son muchos años ya) me divierto, me abstraigo de malos pensamientos, me recuerda los tiempos de instituto cuando no sabías qué estudiar, si te iban a aceptar, si sacarías la nota o si tendrías dinero (en este caso ese es el menor de los problemas de los protagonistas), que por cierto, tiene un buen elenco de jóvenes promesas. Esto lo sabemos ahora, en su estreno imagino que nadie pensaba que Blake Lively (Gossip Girl) o el gran Jonah Hill (El Lobo De Wall Street) se convertirían en unas de las mayores estrellas de la nueva era de Hollywood. Justin Long (Jeepers Creepers) también ha hecho cositas en el presente, pero se ha quedado en un segundo plano comparado con estos dos. No son los únicos, en la cinta aparecen actores conocidos por todos y que están bastante hilarantes.
Creo que tiene una muy injusta crítica. No se la puede comparar con otras como American Pie, con mucho más tirón (aunque muy burdas, al menos para mí). Esta en su día fue original y a mí no me pillaba muy lejos de haber tenido que irme a una universidad imaginaria. El guion es, entre otros, de Adam Cooper (Divergente, Assasin´s Creed) y es bastante creativo. No solo por fundar de la nada una universidad, sino por contarnos todo lo que conlleva hacerlo. El trabajo de los actores es muy bueno y el toque especial de meter a Hill es simplemente brutal. No hay mucho más que decir y tampoco hace falta. Es buena. Es corta. Es divertida y no tienes que pensar en nada mientras la ves.