Haz click aquí para copiar la URL

La rodilla de Clara

Romance. Drama. Comedia Jerome, un escritor de mediana edad, intenta conquistar durante sus vacaciones a una joven de 17 años que tiene novio. Instigado por una novelista, lleva adelante una operación de seducción que tiene mucho de afirmación personal. (FILMAFFINITY)
<< 1 2 3 4 5 >>
Críticas 23
Críticas ordenadas por utilidad
11 de abril de 2009
14 de 21 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hablan demasiado, es un escudo, lo tienen que comentar todo, además siempre están en contacto, se tocan el brazo, se abrazan, se acarician... del modo más artificial posible, porque se tocan para crear un ilusionismo de cercanía, pero no te crees que se encuentren. Parecen gallinas, siempre hablan de lo mismo. Puede que el problema sea yo, que me he saltado cuatro cuentos morales para ver este conmovida por el título, o tal vez que comencé a ver una película a la que le tenía ganas y a los quince minutos de sumisión sexual me aburrí y puse esta, de una temática totalmente distinta. No está mal un par de decepciones por día...

Lo que realmente ocurre es que el estudio que intentan hacer los adultos con las adolescentes, el intento de rellenar una historia de curiosidad amoril veraniega, por ambos lados, no es apta para mi, ni para las noches de lluvia intensa.

Yo sólo quería ver la película por una historia que nos contó un profesor cuando era una niña. Como nos relató el, en la universidad tenía un amigo que se enamoró perdidamente de una muchacha, cuando le hablaba de ella, sólo podía repetir lo preciosas que eran sus rodillas, estaba obsesionado, no podía ver en ella otra cosa que sus rodillas... al parecer, nunca pudo acercarse a ella y contactar con su objeto de deseo... cómo decirle que estaba perdidamente enamorado de sus rodillas, que todo lo demás era secundario...

Siempre he sentido curiosidad por ver a un hombre con la mirada perdida en las rodillas de una mujer, cómo sería ver ese amor a primera vista y la película, como imaginaba, ha completado esta historia, fue emocionante contemplar la escena, y por una vez comparar la imaginación infantil con la visión adulta.

Por lo demás, terminé de ver la película por la barba de Jérôme, tan negra y poblada... una imagen que embelesa sin darte cuenta... porque tanta conversación enraizada en un mismo tema, me encendía.

De todos modos no me doy por vencida, seguiré investigando a Éric Rohmer... tal vez sólo fuese un mal día...
mnemea
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
17 de diciembre de 2020
6 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es difícil identificar con precisión de dónde surge el magnetismo de las películas de Rohmer, especialmente esta, que como la rodilla de Claire en Jerome, ejerce una particular fascinación en el espectador atento y curioso. Existe una empatía con el protagonista que surge posiblemente de una cierta admiración por personajes como Jerome, que no disocian la realidad de la reflexión intelectual que de la misma se deriva, con lo que son personajes que resultan inevitablemente interesantes, e intentan vivir de acuerdo con ello. Son personajes que invitan al propio espectador a observarse, a entenderse, a conocerse.

A partir de personajes como esos, a partir de Jerome, en este caso concreto, le resulta muy fácil a Rohmer trasladar al espectador las contradicciones, las obsesiones de su criatura. Y también los éxitos y los fracasos que de todo ello se deriva. Los cuentos morales de Rohmer, también "La rodilla de Claire", son montañas rusas para los protagonistas, para Jerome en este caso, momentos de subidón, momentos de incertidumbre, de suspense, y también momentos en los que el personaje no tiene otro remedio que escaparse discretamente con el rabo entre las piernas. Es una exposición transparente de las virtudes y los defectos de esos personajes, que son comunes en todos nosotros. Posiblemente no haya modo de alcanzar tanta transparencia como la que consigue Rohmer, porque pone a sus criaturas en juego con una coherencia interna - su propia coherencia, que muchas veces no es la del mundo en la que Rohmer les situa -, que hace comprensibles todos los matices de los tropiezos y equívocos a los que ellos mismos se conducen.

Esta película es especialmente atinada en todo esos aspectos, además de hacer uso de unos espacios y de unos colores que potencian y acompañan el ánimo de los personajes. La película es sencillamente una maravilla, porque los personajes son una maravilla, creaciones llenas de detalles que el espectador tiene todas las facilidades para captar. Jerome, anuncia cada paso que va a dar, y luego justifica el resultado que de él se deriva, que muchas veces no es el esperado. Este juego entrañable resulta inagotablemente atractivo, al menos para un Rohmeriano como el que suscribe, a quien películas como esta se le hacen cortas..

La rodilla de Claire, esa preciosa parte del cuerpo de la muchacha, y la obsesión que desencadena en Jerome, es una magnífica metáfora que permite a Rohmer hacer algo muy habitual en él, naturalizar a sus personajes y ponerles en contradicción con la construcción intelectual que han hecho de sí mismos, lo que los lleva a tambalearse, para regocijo del espectador. Nadie pone tan sutilmente a la vista las pequeñas miserias del ser humano. Esta película en particular, hace una interesante reflexión sobre las distancias generacionales y el modo que desde una generación se atisba hacia la otra, con nostalgia en un caso, con admiración en el camino inverso, aunque la mayoría de las veces con indiferencia absoluta de unos en relación a otros, como en un amor no correspondido.

Las obsesiones y derivas de Jerome son las del propio Rohmer, quizá más en esta película que en cualquier otra, porque el origen de la misma es un relato de Rohmer escrito años atrás, titulado "La rosaleda", en la que un personaje, un tanto pagado de sí mismo, adultera los hechos para conseguir un propósito que no le pertenece, que moralmente debe serle ajeno, pero hacia el cual se siente atraído de un modo primitivo y esencial, aunque pretenda intelectualizarlo. A su vez, "La rosaleda", se inspira libremente en algunos pasajes de la obra "Confesiones", de Rousseau, en concreto "El huerto de las cerezas". En todas hay un hilo de unión, que hace de esta película una de las más hondas y reflexionadas de Rohmer, sin que haya un solo diálogo, una sola imagen, un solo gesto que no signifique algo importante. Obsesiones que ya trataba Rousseau, en su observación liviana de la juventud, raíz esencial de esta película.

Rohmer tiene su propia visión de las cosas, reconstruye una idea a su manera. Esta película es una historia de amor que no puede ser llamada como tal, es algo más allá de un amor imposible, porque es entre un hombre y una rodilla.
Uma
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
23 de mayo de 2022
5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tal como mencionó otro usuario, se nos hace difícil explicar detalladamente con argumentos por qué la filmografía de Éric Rohmer se nos hace tan disfrutable. El magnetismo que tenemos por sus obras... me estoy refiriendo a los espectadores a quienes nos gusta el director francés, no a todos obviamente. Éste autor es lo menos comercial que puede haber, y no todo el público conecta.

Lo que me resulta triste porque es producto de la decadencia de las sociedades en general, es que lo que más les molesta es la intelectualidad de los guiones de Rohmer. Les irrita que en sus películas lo más destacable sean los diálogos, y que éstos muchas veces tengan connotaciones filosóficas. Que los personajes sean individuos, la mayoría de veces, de clase acomodada o cuyas inquietudes no sean las nuestras, que a muchos nos cuesta llegar a fin de mes, por ejemplo. Y así automáticamente odian a los personajes y al director. Qué lástima la verdad.
A mi me gusta, una porque me gusta la "Nouvelle Vague" y creo que Éric Rohmer es el mejor de los impulsores de ésa corriente cinematográfica, con un estilo totalmente distinto al de Jean- Luc Godard, que también me parece un grande pero a día de hoy, sus obras han perdido vigencia y esa fuerza y olor a juventud que en su día tenían. Por el contrario, el tiempo no pasa por la filmografía de Rohmer. Y me alegro que se esté reivindicando gracias a algunas plataformas de streaming.

"La rodilla de Clara" a su modo, me parece una pequeña obra maestra, es lo mismo que pienso de "El amor después del mediodía" (1972), de "Cuento de invierno" (1992), y de "Cuento de verano" (1996). Y hablando de cuento y de verano, Éric Rohmer es un experto en la materia. Es el mejor cuentista de historias que suceden en paisajes idílicos... bueno Francia es idílico, pero en sus tramas situadas bajo el sol se dejan ver unas localizaciones preciosas con esas casonas que dan al mar. La fotografía de Néstor Almendros siempre luminosa realzan aún más la belleza del lugar. Un director de foto muy ligado a éste cineasta, por cierto, trabajaron muchos años juntos.

Yo más que escribir específicamente sobre la trama, las interpretaciones, los personajes prefiero usar éste espacio para contar a quien quiera leerme lo mucho que me gusta éste director y cómo jamás me decepciona. No soy una snob, simplemente el cine más académico, el cine de autor me gusta y no tengo que sentir vergüenza por eso. Hoy por hoy parece que es de postura que disfrutes del cine que ya no se hace, pero que afortunadamente en su momento se hizo y hay que agradecer el tener acceso a esas obras inimitables.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
MarlaSinger
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
17 de diciembre de 2006
38 de 73 usuarios han encontrado esta crítica útil
Resulta cuanto menos sorprendente que obtuviese el premio al mejor film francés del año. Y también que fuese premiada con la Concha de Oro del Festival de Cine de San Sebastián.

Hay que reconocer que eran otros tiempos. No es lo mismo el año 1970 con el recuerdo reciente del Mayo francés del 68 que el año 2006. La revolución de los jóvenes estudiantes introdujo aires nuevos en un sociedad autocomplaciente y burguesa pero sobre todo supuso una llamada de atención hacia esa juventud de pedía paso. No obstante, resulta apropiado resaltar las críticas que el propio Partido Comunista francés hacía, por aquel entonces a esta juventud "revolucionaria" : " Hijos de la gran burguesía, despectivos hacia los estudiantes de origen obrero, que se cansarían pronto de protestar para heredar los negocios de papá"...

Sin menoscabar el impacto social que supuso el Mayo del 68, al ver esta película uno no deja de acercarse a los planteamientos del P.C. francés. Una juventud burguesa especialmente aburrida y creida de sus propias premisas filosóficas sobre la vida, la amistad y el amor, entre otros muchos temas, con un futuro asegurado y con exceso de tiempo para vaguedades.

Si a todo ello le sumamos una escritora que busca la inspiración en futilidades y el hombre maduro, bien pagado de si mismo y probando lo que aún le resta de atracción para las jovencitas, pues tendremos resumida esta película donde desde el tedio, el aburrimiento y el letargo que nos produce solo cabe destacar dos cosas, la rodilla de Claire cargada de erotismo y ya en el plano puramente cinematográfico la excelente fotografía de Nestor Almendros que realza más, si cabe, la belleza de los paisajes que rodean el chalet junto al lago.

El resto, absolutamente prescindible.
FATHER CAPRIO
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
22 de febrero de 2023
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
En los años 60 el cine francés aportó un poso de frescura con la gestación de vanguardias cinematográficas como la nouvelle vague y una nueva ola de realizadores dispuestos a saltarse los preceptos marcados por Hollywood y las producciones convencionales. Sin embargo, más allá de ciertas controversias en torno a su estilo, los primeros films de Godard o Truffaut fueron un soplo de aire fresco y generaron nuevas formas de contar historias. No obstante, pocos años después, el estilo parece casi desgastado, con una sobredosis de narraciones e historias que se manejan por una serie de tópicos que se instauraron con tal fuerza, que a ratos parecen estar autoparodiando las obras que en un primer momento pudieron resultar revolucionarias.

Si usted lo que pretende es filmar una peli francesa con todas las de la ley, estas son las instrucciones que deben seguir:

1) Si bien personalmente no es algo que me moleste en absoluto y menos aún en esta obra concreta (donde sí noto cierta calidez y elegancia dentro del "pegado" de las distintas escenas), no es una peli francesa si no posee un montaje abrupto que divida la trama de forma episódica y poco armónica. Eso del montaje sutil o de los encadenados elegantes es para los hollywoodienses esos, nosotros apostamos por aquello de la economía visual.

2) No es una peli francesa si los personajes no poseen aire intelectual y se pasean por la pantalla divagando entre diálogos presuntamente profundos. Lo que en su momento fue un acercamiento a la clase media tratando de mostrar que la cultura no era accesible únicamente a las élites y fruto de la bonanza económica europea del momento, se ha convertido en un signo de pedantería por parte de realizadores que plagan sus obras de discursos vacuos disfrazados de réplicas inteligentes. Algo así replicaría Woody Allen desde sus inicios, solo que el neoyorquino demostró mucho más talento en este campo.

3) No es una peli francesa si los personajes no hablan de amor libre o cuestionan el duro pesar que supone la monogamia en una sociedad donde todos debemos disfrutar de nuestros cuerpos libres. Si bien hace más de 50 años era una provocación según en qué territorios se mirara, a día de hoy como topic ya no resulta especialmente candente. Lo que sí resulta incómodo es ver a un cuarentón tratando de seducir a menores de edad disfrazándolo como búsqueda de nuevas experiencias por ambas partes. Y es que a pesar de que tratemos de empatizar con el protagonista, el hecho de que se morree con una niña de 14 años... Actualmente echa mucho, muchísimo para atrás.

4) No es una peli francesa si el director no deja cuasi libre albedrío para sus actores (la mayoría no profesionales), lo cual puede llegar a traducirse en genialidades como la de Jean Paul Belmondo en 'Al final de la escapada' o en interpretaciones desapasionadas como la que aquí ofrece Laurence de Monaghan (sin la menor capacidad de seducción, sorprendente siendo su personaje quien da título a esta cinta) y otras claramente sobreactuadas como la de Aurora Cornu.

¿Es 'La rodilla de Clara' un clásico más a desmitificar? Desde un punto de vista moral e ideológico, es más que reprochable. Cinematográficamente, hay numerosas situaciones que producen tedio en cualquier espectador que se precie y el interés decae por momentos, sobre todo cuando descubrimos que los diálogos se encuentran claramente sobrecargados. Sin embargo, Rohmer es un auténtico pintor de imágenes impresionistas y hermosas, y a pesar de todo, la obra te hace sentir la esencia de un verano de auténtico descubrimiento y travesuras adolescentes tardías. No sé si será por la increíble belleza de esa maravillosa fotografía del gran artista que fue Néstor Almendros, o por la calidez de esos sonidos naturales y sencillos, que la obra posee una capacidad embriagadora realmente encomiable. Y solo por ello merece la pena visitar al menos una vez los lagos y las praderas cercanas a Annecy, a pesar de que... Esto nunca deje de ser una película francesa.

·LO MEJOR: La maravillosa fotografía de Néstor Almendros.

·LO PEOR: Adolece de los peores tópicos del cine francés de la época.
Dirover
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 2 3 4 5 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here

    Últimas películas visitadas
    El gran Santini (El don del coraje)
    1979
    Lewis John Carlino
    6,0
    (168)
    Baires
    2015
    Marcelo Paez-Cubells
    3,8
    (104)
    arrow