You Hurt My Feelings

En esta historia sobre personajes que atraviesan algunas crisis de confianza en sus profesiones, una escritora (Julia Louis-Dreyfus en otro muy buen papel), escucha cómo su marido opina negativamente, a sus espaldas, sobre su obra. A partir de aquí se abre debate acerca de la comunicación, las pequeñas mentiras y otras yerbas.

Con un tono amable y con un ritmo llevadero durante sus 93 minutos de metraje, 'You Hurt My Feelings' nos genera la sensación de que este film (por su tono) ya lo hemos visto en varias oportunidades.

Existen algunos momentos de humor que funcionan, otros que se quedan a mitad de camino y actuaciones naturales sobre situaciones cotidianas.

Como ejercicio sincero, para pasar el rato, cumple, sin sobresalir ni mucho menos.

6 Alancitos Mentirosillos Piadiosos sobre 10

*Matrimonio en crisis

You Hurt My Feelings, es un drama con un suave toque de comedia, que hace que el guion no sea tan agrio. La trama nos cuenta como una matrimonio compuesto por una escritora de cierto éxito, y su marido, un psicoanalista, entren en crisis. Todo a razón de una crítica que el marido hace en confianza a su cuñado, sobre la última novela de su esposa. Este es el detonante que hace que nuestros protagonistas tengan que lidiar con sus inseguridades, y su mutuo apoyo se resquebraje por un momento puntual. Se nos revela aquí lo frágiles que podemos llegar a ser, y como en muchos casos necesitamos la aprobación de los otros para sentirnos bien.

*Nicole Holofcener y su mundo

La nueva película de Nicole Holofcener, sigue los patrones de su visión de la relaciones de parejas y humanas, tan habitual en su filmografía. Dotada de un tacto especial para saber contar este tipo de situaciones, pone aquí con You Hurt My Feelings, una nueva muesca en su cinturón sobre el amor, la amistad, la traición, el crecimiento personal, las inseguridades y todo aquello que nosotros como personas anhelamos en determinadas ocasiones. Como guionista fuera de sus películas, la podemos encontrar en la reciente El último duelo (2021), de Ridley Scott o en ¿Podrás perdonarme algún día? (2018) dirigida por Marielle Heller. En cuanto a su ojo como directora, tiene títulos muy interesantes, ahí está el antiguo trabajo también con Julia como protagonista con Sobran las palabras (2013). Su debut tras la cámara data de 1997, con la recomendable, Nadie es perfecto.

La televisión también le es muy familiar, dirigiendo capítulos en importantes series como, Sexo en Nueva York, A dos metros bajo tierra, Parks and Recreation o Iluminada. Con esta nueva película, la directora consigue un trabajo no tan redondo, al que se le ven las costuras por momentos.

El guion es algo anticuado, juega en ligas ya muy transitadas, pero que con unos diálogos sencillos, consigue que no decaiga el interés. Con cuidado, nos va contando lo frágiles que somos, pues nos podemos sentir reflejados en los protagonistas. Todos a lo largo de la vida nos sentimos con la necesidad de que nos sintamos valorados, en diferentes aspectos de nuestra existencia. La duda, o el silencio, nos trastoca los sentimientos, como diferentes afluentes puede tener un río. You Hurt My Feelings nos toca esa fibra, y desde luego, podemos sentir en nuestra piel, los diferentes matices que su directora intenta explorar con una sola escena como explosión reaccionaria.

*Conclusión

Estamos con You Hurt My Feelings, ante una película de diálogos, de sensibilidades y de crecimiento ante la vida. Su directora nos da otra pincelada de su mundo, ofreciendo un trabajo bien hecho, pero al que no consigue sacarle todo el jugo. Unos actores competentes, hacen de la historia una trama más cercana. Recomendada para los amantes de las relaciones humanas, un drama que nunca llega a ser cargante, pues su ligero toque de comedia la embalsama para que no se vuelva fría y hostil.

Escrito por Víctor Vega Cuervo

Comedia agridulce sobre un matrimonio de cincuentones que necesitan crearse un problema para agitar sus anodinas vidas. Ella, escritora ¿de éxito? escucha a escondidas como su marido expresa lo que de verdad piensa sobre su obra. De ahí derivará una crisis tanto existencial como de pareja.

La frase con que inicio la reseña es irónica, pero no tanto. Cuando las personan alcanzan una situación de comodidad profesional y vital es frecuente que conviertan absurdas pequeñeces en montañas que, a sus ojos, parecen infranqueables. Llegar a ese punto de confort y desahogo hace olvidar en qué consiste de verdad tener problemas.

Nos podríamos haber ahorrado este análisis avinagrado si la película hubiera ido, precisamente por ese camino, el de la comedia ácida y cáustica. En su lugar nos encontramos con un relato que tira por lo amable y benévolo, sin una sola gota de mala baba e intentando, desde su inicio, que sus personajes nos caigan en gracia. No podemos decir que el visionado haya sido desagradable, es muy llevadero y, sí, los personajes nos caen bien y el humor es muy blanco. Uno esperaba algo como Carnage (2011) pero olvídense. Esta es una película tan agradable e inofensiva como olvidable.