Los blancos no la saben meter

Una de las comedias deportivas más divertidas de los noventa y que hay que reivindicar, y mucho más si trata de baloncesto. El deporte que aúna la pericia y habilidad de los lanzadores de arco, la destreza física del atletismo y las tácticas del ajedrez. No hay otro igual.

La mejor película del director Ron Shelton, un hombre siempre preocupado por temas deportivos, el boxeo, el golf, el béisbol (por dos veces) y por supuesto el baloncesto han sido abordados en su obra.

La pareja de protas, Woody Harrelson y Wesley Snipes, en estado de gracia, eso es química como Karl Malone y John Stockton en en Utah Jazz.

Lo que menos me gusta es el título en español, una cosa es “Los blancos no pueden saltar” y otra es meter. La primera es más acertada, la segunda en ningún caso, y mucho más cuando en el 1992 ya habían pasado jugadores blancos del nivel de Sabonis, Bird, Petrovic, Jerry West, McHale, Pete Maravich, Bob Cousy o el citado Stockton. Todos ellos entre los 50 mejores jugadores de la historia de este deporte. Y por supuesto Pau Gasol no tardará en entrar en la lista.

El que también era un crack, aunque no se vistiera de corto, era Andrés Montes, vaya jugón. Siempre te recordaremos por apoyar el baloncesto como pocos periodistas lo hicieron en este país. Descanse en Paz.

Nota: 6,4.

Entretenida pachanga deportiva que reunió a dos de los actores con más proyección en aquellos momentos. Harrelson se quedó después entre la comedia y el drama y Snipes se ha convertido en el Stallone de color. Película bastante tópico pero tiene un punto para el domingo por la tarde. Ah, y los blancos la metemos de puta madre, y si no que le pregunten a Gasol.

...esta es tu pelicula.

¿Quién no ha ido alguna vez a jugar a las pistas del barrio y ha tenido broncas por el marcador?. ¿Quién no ha pitado o le han pitado una falta que no era?. ¿Quién no se ha jugado en un torneo a triples algo (ya sean cañas o pasta)?

Pues esto, añadiendo diálogos ingeniosos ("escoge al que quieras, a tu prima, a tu abuela...a cualquiera, menos al blanquito"), relaciones de pareja tormentosas y situaciones de tensión, hacen de esta pelicula un entretenimiento puro y duro para reirte con los amigos de las pachangas.

Le doy un 10 por el cariño que le tengo.

Una historia de negros y blancos, de los tópicos interraciales, de cómo ganarse la vida de una manera facilona y de sus relaciones de pareja, dan mucho juego como para afirmar que "Los blancos no saben meterla" es una cinta vulgar, cansina o una de tantas de las que saca el cine americano; en mi opinión la película tiene diálogos ingeniosos, divertidos; algunas situaciones son cómicas y lo de sus relaciones de parejas acertado; me parece una apuesta diferente, un entretenimiento hasta atractivo y muy por encima del montón de basura cómica con personajes inhumanos que llegan cada viernes a las carteleras.

La película se lleva esta puntuación por el cariño que la tengo.

Me fascinó desde pequeño y seguro que es la película que más he visto en mi vida.
Hizo que me molase el basket y todo lo que le rodea, como la jerga , la vestimenta callejera (Aunque ahora parezca un poco ridícula... Ya han pasado 20 años) o los fulmines (buen guión) que se lanzan los personajes. Personajes logradísimos. Te los cres. Son cabezotas, egoistas y algo perdedores. Caen bien.
No es una obra de arte pero mola mucho mucho.

ps: De pequeño siempre me he querido parecer a Billy Hoyle, jugar al basket como él y llevar esas pintas brutales.