Haz click aquí para copiar la URL

La democracia en peligro

Documental Aunque una vez Brasil fue un país lastrado por una dictadura militar, el 2002 se produjo uno de los acontecimientos más importantes de su historia social: la elección de Lula da Silva como presidente, un activista que había luchado largo y tendido para defender los derechos del pueblo brasileño. Bajo su mandato, más de 20 millones de personas lograron superar el umbral de pobreza. En 2010, Lula cedió el testigo del poder a un prodigio ... [+]
1 2 >>
Críticas 7
Críticas ordenadas por utilidad
27 de junio de 2019
21 de 29 usuarios han encontrado esta crítica útil
Documental en el que la realizadora, dejando clara de una forma más o menos evidente su toma de partido —el de la izquierda—, trata de presentar su visión de la (fallida) historia reciente de la República Federativa del Brasil, fundamentalmente el último "lustro horribilis", a través de dos personajes clave, los dos presidentes "petistas", Lula da Silva y su sucesora Dilma Rousseff, a los que retrata de forma benigna como políticos con una gran dignidad personal.

A ratos con una estructura algo deslavazada, el documental consigue no obstante plantear de forma convincente, por más que maniquea, su argumento central: la perversión de prácticamente todos los poderes de la República durante el segundo mandato de Dilma Rousseff para desalojar a esta de la presidencia mediante un impeachment, en lo que fue considerado por el petismo como un "golpe de estado". Petra Costa, que ha tenido acceso a buen y mucho material para su obra, es brillante en la caracterización de Brasília como una inmensa red de corrupción, escuchas y encausamientos, y, que no se aleja demasiado de la realidad.

En cuanto a sus carencias, se lamenta el limitado desarrollo explicativo que se ofrece de la pantagruélica crisis de 2014 y de las decisiones de Dilma entonces. Se echa de menos también un verdadero desarrollo del esquizofrénico "built-up" de las elecciones de 2018, con el apuñalamiento del a la postre vencedor electoral Jair Messias Bolsonaro. La falta de una mirada con las luces largas que ponga sobre la mesa problemas de la sociedad brasileña como la violencia estructural puede hacer también en cierto sentido poner en cuestión el valor del relato de la realizadora.

Visualmente impecable, algunas secuencias, como la intervención de Lula antes de ir a prisión, nos hacen experimentar una sensación de surrealismo, reminiscente de ese "realismo mágico" tan sudamericano.
Cosmic Troll
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
21 de noviembre de 2020
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Un documental de casi dos horas de los acontecimientos alrededor de los gobiernos en Brasil de los últimos años. Con una visión bastante subjetiva, desde un punto de vista, entiendo que partidista, aunque coincide con mis pensamientos, se centra en los gobiernos de Lula y de su sucesora, Dima, de las trampas que quedan por el camino, de las dificultades para formar gobiernos estables y tranquilizar a una población muy dividida, en este caso creo que muy parecida a lo que podemos estar viviendo en España en la actualidad.

El documento deja bien a las claras la pasión de las gentes brasileiras, que lo viven todo con una pasión extrema, que salen a la calle de manera muy habitual y que defienden o defenestran con el mismo vigor. Sin embargo, y por eso le doy un 5, lo veo un poco deslavazado, va y viene con los años de una manera que te hace pegar los ojos a la pantalla para no perderte nada y sí que te pierdes cosas, al menos yo he sentido esa sensación. Se me ha hecho un poco largo, la verdad. Un 5 de pasable.
Mag61
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7 de junio de 2021
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Documental expositivo brasilero, de género político. El mismo revela cómo la oligarquía pone y saca mandatarios a su antojo, así como también influye en la justicia.

El relato comienza con el advenimiento de la democracia luego de décadas de dictadura militar, y los distintos intentos de Lula por llegar a la Presidencia, para por fin lograrlo en 2002. Luego de dos mandatos y consagrarse como líder popular, éste designa a Dilma como su sucesora. Es durante el gobierno de ella que cierto sector político, la justicia y los medios, todo en manos de unos pocos, logran destituirla y condenar también a Da Silva.

La autora denuncia, a través de mucho material de archivo y filmaciones suyas recopiladas en el tiempo, el autoritarismo con el que se manejan ciertos grupos concentrados de poder, y cómo inyectan de odio a la gente para que sus expresiones sean cada vez más agresivas y carentes de fundamentos.
Max Musimessi
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
23 de junio de 2020
8 de 16 usuarios han encontrado esta crítica útil
182/31/22/06/20) documental realizado por Petra Costa que he visto debido a su nominación al Oscar en categoría Mejor Documental. Posee un sesgado sino panfletario, propio de activista agitpro de izquierdas, que además al mezclar la historia reciente de Brasil con la suya propia de la directora, demuestra lo narcisista ya la vez ese condición ‘pija’ de los comunistas que no han dado un golpe al agua en su vida, viviendo de sus padres, y en este caso de la fortuna del abuelo que se hizo millonario durante la dictadura brasileira. Y esta se cree con una gran superioridad moral para con un altavoz maniqueo retorcer la verdad a su gusto y gana, para crear una hagiografía de los ex presidentes del país ecuatorial Lula Da Silva y su sucesora Dilma Rousseff (una guerrillera marxista), dos representantes del PT (Partido de los Trabajadores), entre los dos estuvieron en el poder desde 2003-2011 el primero y ella hasta 2016, 14 años y medio, hasta que la destituyeron por un impeachment y sustituida por Michel Temer de derecha. Pero a Costa que destituya el parlamento a un mandatario le resulta antidemocrático, en España está la moción de censura que echó a Rajoy (el que ganó legítimamente las elecciones para que entrara Pedro Sánchez (que tomó el poder legítimamente a la constitución), esto es nos guste o no el juego de la democracia, no solo votar. Nos quiere hacer ver que la democracia brasileña está en peligro si ganan los que no son de izquierdas, lo cual es una visión (siendo benévolo) muy parcial. Si ganan los comunistas la democracia es buena, ha ganado la voluntad del pueblo, las gentes son felices, pero si osan vencer en unas elecciones los no izquierdistas entonces es un complot de las oligarquías para retorcer y estrangular a los pobres (puaj!).

La directora hace una labor de recopilación de datos a su antojo, todo muy superficial, sin hincar el diente en nada, sin hacer investigación alguna, todo es un esbozo de un esbozo, apuntes propagandísticos a pie de página, en que se caricaturiza a los que no son de tus ideas y se ensalza a los ‘tuyos’. Todo muy superficial, sin objetividad alguna para dar una mínima visión abierta de la otra parte, no se indaga porque tras varios lustros en el poder la izquierda, perdió las elecciones en 1918 ante un populista Jair Bolsonaro, todo son eslóganes vacíos, muy tendencioso, banalizando al que no es de tu cuerda. Denigrando a la estructura judicial, puede ser mala (acepto pulpo como animal de compañía9, pero entonces con casi 15 años en el poder, porque no la cambiaron?

No es inteligente Costa en dar categoría poliédrica a su metraje, coge datos y los manipula y cercena información de modo penoso, como es el hecho de la crisis brasileña de 2014. Se trivializa la acusación de corrupción de Lula Da Silva, todo circunscribe a un piso y un ‘power point”. No me creo las pruebas expuestas fueran el cuerpo de la acusación y sentencia.

Petra Costa tergiversó hechos históricos sobre Brasil y manipuló fotos que quitan armas en una imagen de dos militantes izquierdistas muertos, incluido Pedro Pomar (un mentor político de La madre de Costa), quienes fueron asesinados por la policía en 1976 durante la dictadura militar. Costa confirmó la edición de la foto, alegando que quería rendir homenaje a los hombres, ya que la Comisión Nacional de la Verdad confirmó que la escena fue manipulada por los militares para justificar un presunto tiroteo y responsabilizó al Estado por el crimen. Luan Sperandio de Gazeta do Povo enumeró una lista de 45 presuntas omisiones y narraciones falsas en el documental, concluyendo que "la película cumple su papel: ignorar los hechos, datos y pruebas para vender la visión del mundo del Partido del Trabajador del juicio político, el arresto de Lula y la elección de Jair Bolsonaro". Lo cual da idea de cómo Costa convierte dos horas en pura demagogia barata, donde ella se erige maestra de marionetas intentando nosotros seamos su muñecos.

Destaca en la puesta en escena el hábil manejo de los drones para dar vida a Brasilia. Y con el mejor tramo, de hecho el único salvable, que es el tiempo previo a la detención de Lula Da Silva, captando el temor latente a que estallara la chispa de la revolución violenta.

Esto es solo un escenario para que la realizadora despliegue su parcialidad hedionda, pero ser manipulador, no tiene por qué ser malo, lo es que se haga de un modo tan burdo, rozando lo infantiloide en su división entre los buenos muy buenos y los demonios vampíricos que viene a sacar la sangre a la democracia. Llegando a aparecerme el desarrollo un puñado de recortes de prensa y testimonios de la calle, que solo sirven para moldear torticeramente un relato que merecería mayor introspección que este folleto insustancial por su falta de profundidad. No hay análisis alguno sobre la corrupción de la que habla, suelta pedradas sin ton ni son pero no las examina, ejemplo como habla de que hay nueve familias que controlan el país, y pasa a otra cosa Costa. No es que sea falto de chicha por ser de izquierdas, lo es por una ínfima calidad en su misión de hacernos sentir emocionado o cabreados, pues al no haber una confrontación de ideas entre los dos bandos, solo se loa a uno y al otro se demoniza.

Vaya por delante que Bolsonaro, el que ha recogido el botín de todo esto, me parece un demagogo peligroso, pero ha sido elegido democráticamente. Y es que como decía Churchill, “La democracia es el menos malos de los sistemas de gobierno”: Fuerza y honor!!!
TOM REGAN
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 de noviembre de 2022
Sé el primero en valorar esta crítica
Hola.
El documental en materia de investigación y fotografía me parece sublime, creo que tiene tomas inéditas, declaraciones propias (debido a la militancia o elección política por parte de la directora son exclusivas de ella), eso lo vuelve interesante y único.

A nivel fotográfico muestra lo suficiente como para describir la devoción hacia Lula que lo hace ver cómo el Mesías de Brasil, ya que hay fotografía de gente aclamando, llorando y riendo por el, esto lo veo como un factor rico y que le entrega cierta epicidad a su figura.

Desde la otra perspectiva muestra lo suficiente como para reflejar actos de represión crudos, protestas masivas y un entramado de posible corrupción que quizás lo vuelve hasta maquiavélico. Las imágenes desde la corte mientras exponen fiscales y diputados o dando los votos es lo más parecido a House of Cards que te podes imaginar.

Por otro lado me hace basta ruido el nombre del documental ya que para algunos quizás fue "el filo de la democracia" mientras que para otros fue el inicio. Me suena bastante tendencioso llamarlo así, haciendo alarde de que la democracia corría solo por la figura de Lula o el PT. Por qué justamente es el título menos democrático que se le puede dar.
Más allá de esto el documental es excelente.

Saludos.
Juan Manuel
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 2 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow