Los compañeros del diablo

Intentaré darle una nota y una crítica que creo que se merece a esta película, evidentemente no se trata de una película al estilo de "Con la muerte en los talones" o el "Salario del Miedo" si es lo que estamos buscando, se trata de una película más "light" digamos hecha en un momento donde Charles Bronson estaba en su mejor momento y era muy popular en Europa.

Títulos como "Adios Amigo" (1968) protagonizada junto a Alain Delon o "Ciudad Violenta" (1970) dirigida por Sergio Sollima forman parte de esa etapa, entre otras películas.

En esta película comparte cartel junto a James Mason y Liv Ullmann, está dirigida por el gran Terence Young, recordemos el gran director de los primeros títulos de Bond bajo la batuta de Sean Connery a comienzos de los años 60, Charles Bronson y Terence Young repetirían rol de actor y director respectivamente en la también disfrutable los "Secretos de la Cosa Nostra" de 1.972.

Centrándonos en esta película es simple y llanamente una película de Acción y Aventuras hecha para un actor en plena forma, no busquemos más, basada sobre un argumento de Richard Matheson, con la única pretensión de entretener y con todo lo que suponía a principios de 1.970 que ya era mucho, hay unas secuencias en las que la película sobresale y creo que a muchos les interesará y que no se ha comentado en las anteriores críticas, dichas secuencias se centran en una muy buena carrera/persecución donde Charles Bronson a bordo de un Opel Commodore GS/E Coupé corre por una de esas míticas carreteras típicas de la Costa Azul repletas de curvas y pegadas al mar.

La persecución fue coreografiada por el gran especialista Francés Remy Julienne, habitual en el cine Europeo de esa época y que trabajaría en España también con el gran José Antonio de la Loma, a decir verdad es una maravilla disfrutarla en su plenitud ya que de aquella época como muchos sabemos las escenas con automóviles se ejecutaban con realismo donde se notaba que los coches corren y los sonidos de los motores son también protagonistas, cuenta además con buena fotografía y buenos encuadres de cámara, vamos, algo que en la actualidad es muy díficil de encontrar salvo muy contadas excepciones.

Por lo demás destacaría el entorno de la película, una película muy veraniega donde se nota que hace calor, no obstante fue filmada durante el verano de 1.970, por citar un apunte personal me acuerdo perfectamente de su pase por TV en Antena 3 en el verano de 1.992.

En definitiva, me parece una película disfrutable, indispensable para todo fan de Charles Bronson, el que considero uno de los mejores actores duros de la historia, si encima la podemos encontrar con su doblaje original y en buena calidad en DvD y en Blu Ray que más se puede pedir?.

Básica, directa, intrigante, contundente, violenta, irregular, emocionante, impactante y trepidante producción de suspense y acción, confeccionada para el lucimiento de su estrella protagonista, Charles Bronson.

Los responsables de la película hacen lo que pueden con lo que tienen y confeccionan una historia de honor, amor, engaño y venganza, en la que se consigue potenciar y exprimir al máximo las dotes para las secuencias de acción de Charles Bronson.

Algunas situaciones de la trama y su desarrollo, se pueden antojar forzadas e insostenibles, pero se disfrutan si se pasan por alto diversos conceptos de la realidad que quiere mostrar sobre el mundo de la delincuencia.

La presencia y labor interpretativa ofrecida por el reparto, hace que la historia cobre fuerza y sentido en muchos aspectos, destacando la presencia y labor de: Charles Bronson y James Mason.

Los compañeros del diablo, queda como una trepidante producción de acción y suspense de los años 70, que ofrece e inculca algunos valores sobre la amistad y el honor.

Es una película muy rara, como si toda ella estuviera hecha de trozos retales descartados o equivocados, puzle mal hecho acabado, rompecabezas sin testa, el laboratorio del doctor Frankenstein haciendo de las suyas, casando sacando recetas, más vacunas, y la película real o verdadera fuera otra, estuviera vagando por el espacio, en una especie de limbo, el cementerio de las películas olvidadas, o como si la hubieran robado pidiendo un rescate que nadie finalmente se arremangó a soltar la pasta o el dinero, y nos hubieran dejado a cambio esta cosa sin rumbo ni por qué, vaca loca, liebre por gato, es en sí misma una oda al diálogo de besugos, es disléxica y daltónica, contrahecha, una onomatopeya hasta el infinito que se alarga, no cierra, una obra de teatro muda, una cochinada casta, una charlotada, llanto por un bandido, si te dicen que caí, hablando y no dicen nada, se mueven y no avanzan, los personajes aparecen en lugares donde no están o no les corresponde, se teletransportan, mimetizan, telepatizan, en fin, arte conceptual escapista performativo abstracto expresiosista existencialista pensionista avant garde el cuerpo es mi lienzo en blanco yoko ono yo manejo dios me guía, Marina. El cuerpo de Bronson concretamente sin hacer de menos mejorando lo presente Ullmann y Ireland y Mason, una venía de Bergman y el otro de Kubrick, la de en medio de la santa cama del protagonista, y acabaron haciendo esto no somos nada polvo en el viento, una piedra en el arroyo, un rato príncipe y al día siguiente su porquero, del rey abajo ninguno, ¿todo por el dinero, un enredo?

¿Por qué uno se mete en esto?, ¿cómo es posible picar el anzuelo?, ¿tal anzuelo existe?, ¿Bronson, Ullmann o incluso Terence Young son ese anzuelo?, ¿ansiedad cinéfila?, ¿querer abarcar todo?, ¿buscando joyas olvidadas e incomprendidas?, ¿son muchas preguntas estúpidas?, ¿soy estúpido?

No voy a contestar a todas las preguntas salvo la primera y la última. Uno se mete aquí por culpa de esas plataformas para la televisión que nos están invadiendo, cualquier amante del cine añejo curiosea por los títulos con algo más de dos décadas de envejecimiento que ofrecen esas plataformas, y como todas esas películas ya están vistas y resobadas, finalmente es posible caer en algo así por el título, por el protagonista, por la actriz secundaria, por lo que sea. Y sí, rotundamente sí a la última pregunta, lo cual ya ofrece las explicaciones del conjunto. La afición por ver películas que quedan atrás no debería hacernos perder el norte, "Los compañeros del diablo" es una castaña. Dicen por ahí que hubo un exceso de metraje y que al recortarla para el formato habitual de noventa minutos quedó malherida: ¿y qué?; no creo que una versión no recortada mejorase lo que tenemos delante. Todos los diálogos son absurdos y ridículos, las actitudes de los personajes, la mediocridad de la acción (salvo las escenas de persecuciones por esas maravillosas carreteras), etc, etc...

Absolutamente presicindible.

Después del monstruoso éxito de Doce del patíbulo, Charles Bronson emigró a Europa... y se convirtió en una estrella. Un tipo duro, con la camiseta pegada al cuerpo, y tan expresivo como un dinosaurio fosilizado. Con Terence Young, el director de tres películas emblemáticas de James Bond, filmó otras tres películas, el extraño western Sol rojo, la violenta Los secretos de la Cosa Nostra, y este pestiño que aporto a vuestra consideración.
Los compañeros del diablo no es mala; es un engendro, un aborto, un amontonamiento de disparates sin pies ni cabeza. No me sirve que IMDB diga "heavily cut", o sea, mutilada a hachazos. Todo es horrendo. El guión no existe, los diálogos son risibles, los fallos de raccord dan ganas de llorar, la música de Michel Magne es vomitiva, la fotografía de Jean Rabier tan plana y falta de alma como en las numerosas películas de Chabrol que firmó... Cuesta creer que este bodrio pudiera llegar a las pantallas de Europa, no digamos ya de Estados Unidos.
El apartado interpretativo es penoso. Dejaremos a un lado a Bronson, del cual ya hemos hablado. ¿Qué c... hacía Liv Ullmann en esta cosa? Ganarse una pasta, ya lo sé, pero la pobre no se lo creía y así salió. Da pena ver a un señor actor como James Mason cayendo en el ridículo más estruendoso como malvado de la función. Y como guinda del pastel, Jill Ireland, mona ella, mediocre ella, pero como señora de Bronson aparecía en todas sus películas. Sale unos momentos Michel Constantin diciendo tonterías, pero a fin de cuentas está doblado.
En fin, que me lo pasé de fábula, sin dar crédito a mis ojos, ni a mis oídos. No caigáis en la tentación, atraídos por el reparto. No se merece ni un momento de vuestro tiempo.