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Un adulterio decente

Comedia El matrimonio de Fernanda (Carmen Sevilla) con Eduardo (Jaime de Mora y Aragón), un famoso compositor que sólo se preocupa por sí mismo, pasa por una crisis. Ante esta situación, ella decide serle infiel con el joven escritor Federico (Andrés Pajares), pero mediante engaños Fernanda encuentra un modo para que ese adulterio sea 'decente'. Por otro lado, un excéntrico científico llamado Leopoldo Cumberri (Fernando Fernán Gómez), que ha ... [+]
Críticas 4
Críticas ordenadas por utilidad
18 de abril de 2009
6 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
Basada en una obra de uno de los mejores, más incisivos e inteligentes escritores de la literatura humorística de todos los tiempos, (con permiso de Mihura y Tono) además de autor teatral y guionista de cine, que incluso hizo sus pinitos en Hollywood: D. Enrique Jardiel Poncela (del que es imprescindible leer: La Tournée de Dios, Exceso de equipaje y El libro del convaleciente), nos encontramos como no podía ser menos, con una muy divertida historia dirigida por Rafael Gil, que en el apartado actoral, salvo Fernando Fernán-Gómez en el papel de una especie de profesor Bacterio y Manolo Gómez Bur como un castizo y muy divertido taxista, deja mucho que desear, además, muy a mi pesar, debo de reconocer que la dirección y puesta en escena tampoco hace justicia a la obra en la que se basa, por lo que salvo para los que veneramos todo lo que lleve el nombre de Jardiel Poncela impreso, para el resto de los mortales seguramente será vista como un castañazo (y con toda la razón del mundo).
El merito de la película está en los ingeniosos, inteligentes y divertidos diálogos escritos por el maestro Jardiel Poncela, pero los encargados de poner la función en marcha, por desgracia no han estado a la altura, sobre todo a la hora de meter con calzador las canciones de Carmen Sevilla.
tiznao
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10 de mayo de 2015
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Modesta producción que traduce a imágenes un texto de Enrique Jardiel Poncela, un gran autor de marcada sutileza que en cine ha sido adaptado con escaso acierto casi siempre. En el teatro lo que cuentan son las palabras por encima de todo pero en cine si las palabras no están reforzadas por una estética adecuada y un sentido narrativo oportuno todo se viene abajo. Rafael Gil no controla bien el asunto y consigue una película estéticamente plana donde las virtudes de la obra original se diluyen en un producto confeccionado a base de diálogos insustanciales y que sólo supone una confusión entre cine y teatro que puede llegar a aburrir por la falta de dominio del ritmo. Y es que sólo está animada por el arte de Carmen Sevilla para cantar. La adaptación la hizo Rafael J. Salvia, que acababa de finalizar su etapa como colaborador de Pedro Masó en los guiones de sus producciones y es curioso porque en esos casos habia demostrado habilidad. Y Rafael Gil era todo un experto en adaptar a grandes autores. Sorprende entonces que este film sea el más soso de los tres que hizo Carmen Sevilla con Gil. Dada la situación del cine español actual nos podemos conformar con que una película no irrite. Y este producto no irrita pero tampoco entusiasma. Poco partido se saca además de algunos de los intérpretes que acompañan a la estrella protagonista, cuya belleza y agradable personalidad son las dos cosas que salvan a esta fallida película aparte también de la graciosa caracterización del mítico Fernán-Gómez. Son estos elementos suficientes para que la película al ser vista despierte un poco de simpatía por parte del espectador. Existen limitaciones pero el resultado puede aceptarse.
Cromatico
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11 de marzo de 2018
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cuando la empiezas a ver, crees que será la típica comedia de enredo, con malentendidos y líos varios, pero la película decide embarcarse en un extraño viaje (el problema es que es difícil de explicarlo).
La protagonista absoluta es Carmen Sevilla, que en este film cambiaba un poco de registro, en lo que a uso de vestuario se refería, la acompañan un Andrés Pajáres, al que aún le faltaban unos años para su grán éxito, y un Jaime de Mora y Aragón, que si no hubiera estado, nadie le hubiera echado de menos. Para finalizar con el reparto, tenemos a un Fernando Fernán Gómez totalmente desatado en su papel de doctor.
Es una lástima ver que ante un guión que prometía, el resultado final defrauda.
Bdange
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8 de noviembre de 2023
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El matrimonio de Fernanda (una provocativa y algo erótica Carmen Sevilla) con Eduardo (el aristócrata Jaime de Mora y Aragón), pasa por un mal momento porque Eduardo es un famoso compositor que sólo se preocupa por sí mismo, por lo que ella se hace pasar por viuda y tiene una relación con el joven escritor Federico (Andrés Pajares). De este modo se convence a sí misma de que el adulterio es decente. Entonces el famoso compositor Eduardo Bernal descubre que su esposa, Fernanda, le es infiel con un joven escritor llamado Federico Latorre. Un científico llamado Leopoldo Cumberri (Fernando Fernán Gómez), que ha desarrollado una teoría sobre el adulterio como una enfermedad causada por un virus, intentará curar a Fernanda en su sanatorio. Amiga de su difunto marido. ...ella!.

Una comedia tonta y desconcertante con los mejores intérpretes españoles del momento. Director Rafael Gil y escritor Rafael J. Salvia adaptaron al notorio escritor humorístico Enrique Jardiel Poncela, basada en su exitosa obra de teatro de igual titulo, en esta justamente subestimada y anodina comedia coral de enredos, adulterios, engaños y desencuentros con múltiples personajes alocados, entre ellos una divertidísima caracterización de Fernando Fernán Gómez en el papel de un genio despistado ó la presencia de Manolo Gómez Bur como un obnubilado taxista que admira el "talento" del citado genio que utiliza antiguos ordenadores y descacharrantes maquinas para sus extravagantes teorías. Aunque inferior a la obra literaria, es una poco divertida película, conteniendo algunas piezas cómicas chispeantes, con incidentes absurdos y paródicos, en torno a egos profesionales y amoríos.

Una de las pocas cosas que salva la película es la simpática interpretación del siempre grande Fernando Fernán Gómez como el típico sabio loco y olvidadizo, quién realmente roba el show. Como suele ser habitual en la mayoría de películas de los años sesenta y setenta, la gran diversión del film es adivinar el nombre del ilustre actor secundario que aparecerá en alguna actuación, normalmente breve, sin créditos ó bien en cameos. En esta ocasión los intérpretes dignos de mención, son los siguientes: José Orjas, Guadalupe Muñoz Sampedro, Matilde Muñoz Sampedro, Mary Begoña, Venancio Muro, María Isbert, Julio Riscal, Rosa Palomar, Manuel Alexandre, Erasmo Pascual, Maribel Hidalgo, Rafael Hernández, Mónica Randall, Eduardo Calvo, Rafael de Penagos, Joaquín Prat, Francisco Rabal y el presentador José Luis Uribarri.

La película fue desigual y mediocremente dirigida por Rafael Gil. Gil fue el ganador del Premio de la Unión Nacional de Espectáculos a la Mejor Película en 1959. El veterano cineasta Rafael Gil fue uno de los mejores directores del período franquista. Durante la Guerra Civil rodó varios documentales para el bando republicano. Al concluir la guerra inició su relación con la productora valenciana CIFESA, dirigiendo su primera película en 1941: El hombre que se quiso matar, adaptación del libro de Wenceslao Fernández Flórez y protagonizada por Antonio Casal. Su primer gran éxito fue Eloísa está debajo de un almendro, basada en la obra de Enrique Jardiel Poncela, producida también por CIFESA. El éxito impulsó a Rafael Gil a continuar su relación con CIFESA, con la que llegó a dirigir ocho películas, de las que casi todas obtuvieron un fuerte éxito. Filmó varias importantes películas antiguas, como: Don Quijote De La Mancha, El Clavo, La Fe, La Señora de Fátima, Las Aventuras de Juan Lucas, La Santa Reina, La Guerra de Dios, El Beso de Judas. Y realizó diversas películas sobre el mundo taurino como Currito de la Cruz, El Litri y la sombra de Él, El Relicario, Chantaje a un torero, Sangre en el ruedo. Sus peores películas fueron en los años Setenta y Ochenta como: A la Legión le gustan las mujeres, Los hijos de papá, Y en el tercer año resucitó, La boda del cura, De la camisa vieja al saco nuevo, Las Autonosuyas, la mayoría basadas en libros de Fernando Vizcaíno Casas. Calificación. 4/10.
miguelan
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