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El retrato de Dorian Gray

Drama. Thriller Dorian Gray (Hurd Hutfield) es un joven aristócrata muy atractivo que vende su alma al Diablo a cambio de la eterna juventud. Gracias a una invocación consigue que sea el retrato que le ha hecho su amigo Basil Hallward (Lowell Gilmore) el que sufra el proceso natural del envejecimiento. (FILMAFFINITY)
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Críticas 34
Críticas ordenadas por utilidad
12 de octubre de 2010
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Debido a ser básicamente una teatralización del libro, el protagonismo y calidad de esta cinta, queda reducida, para bien o para mal, al talento del reparto.
Y en éste destaca sobremanera un George Sanders cuyo personaje lleva tanto el hilo en el film como lo hace en el libro. Consigue ser un muy digno narrador de las peripecias y milagros del personaje de Dorian Gray. Y Gray, a su vez, resulta bastante insípido en manos de Hund Hatfield, actor sin sexualidad ni carácter, todo lo contrario que el truhán de Dorian.
Angela Lansbury, añade el punto curioso a la cinta, y junto a Lowell Gilmore completa el cuarteto protagonista.

De la grabación, destaca principalmente el cuadro de Dorian, que no se esconde al público en ningún momento y se muestra como un ente decrépito por la corrupción de un corazón envenenado. La verdad, las sensaciones que expresa están bastante conseguidas (y de manera algo macabra para los estándares de la época).
Follawski
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6 de agosto de 2014
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Entiendo que la mayoría que deciden escribir algo sobre esta película hagan referencia a la obra de Wilde, es inevitable hacer comparaciones y opinar sobre la adaptación cinematográfica. Sólo quería apuntar que en esta ocasión (me es imposible no decirlo aunque sea una obviedad) seguramente el valor literario nunca será alcanzado por el del cine o mejor dicho, aún no se ha realizado una película de "El retrato de Dorian Gray" a la altura de la obra literaria.

Dicho esto último como único apunte de Wilde me gustaría decir que encuentro poca fascinación por la película de Albert Lewin, una película que tampoco es ningún desastre y que mantiene vivo el desasosiego del protagonista al que hacen un cuadro y va a perder el alma de la manera más tonta, casi sin querer. Me gusta la voz en off, curiosamente algo que es lo más denostado por otros usuarios, como si subrayar los hechos a través de una tercera persona fuera un insulto. Lo mismo me sucede con los diálogos ampulosos y las intervenciones presumiblemente pedantes, formas de hablar que casan a la perfección con el status social de los protagonistas, incluso diría que pegan con la época. Diría que es lo mejor de la película, esa forma de hablar de Henry, del pintor y hasta del servicio. La película pierde en la teatralidad, como si pesara demasiado la obra literaria de referencia, como si le faltara un empujón y malviviera en una contención que la frena. Los temas que trata son universales y bien puestos da para hacer una gran película.

El sufrimiento por el paso del tiempo, las tristezas de los recuerdos, la agonía de la conciencia de la existencia y la infructuosa lucha por conservarse lejos de la vejez. Dorian Gray es humano y padece el intento de una loca estrategia por mantenerse al margen de las reglas de la vida. Todo ello daría para mucho si no fuera por la atonía de Hurt Hatfield, alguien que debiendo sobreactuar su interpretación habría que situarla directamente en el otro extremo. Una lástima. De todas formas, creo que la película mantiene el pulso y no es tan mala como algunos opinan. Eso sí, mucho menos es una obra maestra...
Luisito
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30 de abril de 2022
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Lo mejor del filme es que está dirigido al pensamiento crítico, al planteamiento de la moralidad a través de la fantasía, una invitación al autoanálisis, hasta que punto estamos dispuestos en aceptar entre lo que queremos en la vida y lo que daríamos a cambio por ello, el director Albert Lewin lo hace sin apasionamientos, ni distracciones, casi sin juzgamientos, los actores escogidos me parecen bien, Angela Lansbury, Hurd Hatfield, no son tan bellos ni feos para no ser distantes al común de la gente, y se vean representados en él, las implicancias, las muertes, los romances, no son retratadas en magnitud a propósito para no apartar al espectador del raciocinio profundo, la moraleja de la reflexión, y el filme lo hace a través de una fotografía bella británica a inicios del siglo XIX en Londres, decisiones con o sin arrepentimientos.
¡Oh por Dios!, mi cuadro como estar quedando...
John
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21 de agosto de 2022
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Entretenida película de intriga, incluso de terror, salpicada con las siempre refrescantes reflexiones de Oscar Wilde.
Sigue con bastante fidelidad el relato original y las pequeñas modificaciones incluso le dan más coherencia a la historia. Una historia que delira entre lo edificante y lo perverso. Y en medio de ambos extremos, ¿cómo no en Wilde?, se encuentra el hedonismo inteligente y autocomplaciente.

La historia es muy buena, y se sigue con interés como en un thriller. El descreimiento y el cinismo ante el amor sincero, la pose distanciada y snob, la caída a los infiernos de la depravación, drogas y el hampa hacen mella en el interior del protagonista, ¿podrá detener a tiempo la espiral de autodestrucción?

El andrógino y algo amanerado protagonista no actúa con mucho convencimiento. Sólo posa hieráticamente y declama sin convencimiento sus líneas. Menos mal que Sanders cumple con su propio papel y le sobra energía para apoyar al del protagonista. Los demás cumplen con profesionalidad.

La ambientación es fantástica tanto en las mansiones como en las tabernas de mala muerte.
La fotografía es muy buena gracias a unos encuadres elegantes, a una cámara que busca la perfección geométrica en las composiciones, unos picados brillantes, a unos travellings interesantes y muy bien empleados en la historia, a unos juegos de sombras interesantes y bien usados y a un technicolor que sólo aparece en tres momentos puntuales pero de la mejor manera posible. Es una delicia para la vista el resultado final.
Pero…¿no podían haber hecho envejecer con maquillaje al resto de personajes? Si no parece que no envejecen ninguno de ellos.

Muy bien dirigida. Alterna con inteligencia los comentarios irónicos superficiales y los momentos de tensión, tanto la tensión sentimental como la criminal. Hay una armonía en toda la película que te lleva con suavidad de un escenario a otro, por muy dispares que sean sientes una continuidad dentro de la historia.
Jose Solo Z
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20 de febrero de 2023
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Versión clásica de la gran obra de Oscar Wilde, donde un hombre joven, adinerado y con una gran belleza hace un pacto con el diablo para que un retrato suyo envejezca en su lugar, acumulando todos sus pecados y corrupción.

Jamás una obra literaria adaptó mejor el concepto de bien y mal solapándolo a la verdad absoluta de que a nadie le gusta envejecer, tópico exagerado incluso hasta límites insospechados a día de hoy viendo la cantidad de dinero que cada vez más gente se hace en estar 10 años más joven en la cirugía estética, el mal de Dorian Gray.

Aquí adaptado de la mano de Albert Lewin propone a Hurd Hartfield como Dorian Gray y a Angela Lansbury como el amor de su vida, Sibyl Vane, cantando la hermosa canción del pajarillo amarillo.

Si bien la película cuenta con algunas dosis de diferencia respecto al libro, sobre todo en cuanto respecta al retrato, pedido al artista Ivan Albright, mostrando la corrupción grotesca y colorífica en tanto que la historia transcurre en un sórdido blanco y negro en los bajos fondos, ideal para retratar esta parte de la Inglaterra victoriana, y en otro glorioso cuando a la zona alta se refiere, y al ambiente ideal de cuento de hadas de las grandes mansiones, es lo más reseñable de la película.

La frialdad y calma pasmosa de Hatfield no era de Dorian, es suya, y en todas sus películas.
Su Dorian es calculador, cambiante, veleidoso, mientras que Lansbury muestra toda la perfección inocente y juvenil de su canción y su mejor interpretación de amante repudiada. Que gran mujer, la recordaremos siempre como la gran dama de la pequeña pantalla y la gran pantalla, fallecida hace apenas un mes.
barbara12
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