Shrek 2

Desde la 1ª película,en la que presentaba a los personajes principales, hemos vivido aventuras emocionantes y bastante humor.
La 2 sigue siendo muy buena, como la 1.
Vuelve con una mágica trama.

Una continuación que, como bien digo, supera mucho a la original y coge muchos elementos de "Huída del planeta de los simios" para traerlos a esta película y adaptarlo para los niños.

Le tengo cariño a esta película porque fue la primera y única de "Shrek" que vi en el cine y con mis colegas Juancho y Quicolas. En aquel momento, la disfruté mucho. Por ello, aunque no esté entre mis películas importantes de mi vida, sí lo está en mi ranking de las más entretenidas.

Eso sí, supera a la original y es muchísimo mejor.

Shrek 2 es la mejor película de la saga del ogro verde, y lo es por varias razones. Para empezar, prosigue con el eficaz humor de la primera y consigue mejorarlo en varias ocasiones. Presenta al mejor villano de la franquicia, el cual es el hada madrina, y a un secundario memorable, que no es otro que el Gato con Botas. Los personajes principales son correctamente profundizados, pues la historia nos muestra los temores y las inquietudes de estos. El final es con diferencia el más emotivo de todos con esa épica canción. Los puntos cómicos no solo son efectivos, sino que también son estupendos por su originalidad. Mi personaje preferido de esta segunda entrega es por supuesto el Gato con Botas. Doblado de manera acertada por Antonio Banderas, con el permiso de Asno es el alma de la película y una de las principales fuentes de humor de esta. Su visionado resulta altamente divertido y se pasa en un suspiro.

Siempre me pareció que rodar ‘Shrek 2’ era una locura. Dreamworks había conseguido un pelotazo que ni ellos mismos se esperaban con la primera entrega, hablaban de tú a tú a la poderosa Pixar por lo que, lógicamente, la secuela estaba obligada… ¿pero cómo continúas una historia que has dejado tan brillantemente cerrada? Pues completándola sin resultar excesiva.

Y así fue. La empresa era difícil, pero se puede considerar ‘Shrek 2’ como una secuela bien maja y, sin duda, la más completa de las que vinieron después de aquel gran éxito. Como era de esperar, es una secuela inferior a la original, pero que mantiene el encanto. Esta vez, encontramos a Shrek y Fiona felizmente casados, de luna de miel, pero llega el momento de conocer a los padres de ella, los mismos que metieron a la princesa en aquella torre. Así, comienza un viaje repleto de momentos hilarantes que les llevará hasta el reino de Muy, muy lejano, para vérselas con hadas madrinas malvadas, príncipes encantadores con pelazo pantene y un gato con botas de lo más fiero.

Como su predecesora, ‘Shrek 2’ sigue desprendiendo inteligencia, talento y mucha gracia. Pierde efecto sorpresa, pero lo sabe compensar con la inclusión de nuevos personajes (y es que es Gato con botas con la voz de Antonio Banderas es impagable). De esas que hacen disfrutar tanto a niños como a adultos.

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Es una secuela que recoge muy bien los elementos que engrandecieron a la primera entrega, convirtiéndola en la saga paródica perfecta de aquellas adaptaciones infantiles de príncipes y princesas, es decir, Disney en su multitud. Su humor y su sentido de la aventura son herramientas muy potentes para un guion que se supera así misma y acentúa su originalidad, componiendo una buena dosis de entretenimiento.

Pertenece esta cinta una de las películas de animación más importantes del cine y huelga decir que es la más importante que ha producido Dreamworks. Una de las cosas más importantes es que, aunque parodie y adapte desde su sátira la naturaleza de los cuentos de los hermanos Grimm, elabora una crítica hacia conceptos de lo establecido en torno al amor, el concepto de mujer y la puntualizada perspectiva de la condición laboral como importante factor de socialización y a su vez perpetuadora de la simbología sexual y amorosa.

Sus referencias a "El Señor de los Anillos: La comunidad del anillo" (Peter Jackson, 2001) "Alien: El octavo pasajero" (Ridley Scott, 1979) y "Misión: Imposible" (Brian de Palma, 1996) son formas de emplear la imaginación y la versatilidad al desarrollar escenas convencionales en el cine de aventuras, lo que hace que el guion gane en calidad y en innovación.

"Shrek 2" (Adamson, Asbury, Vernom; 2004) es la consolidación de que estas dos películas en la saga predilecta de DreamWorks es un clásico imprescindible en el cine de aventuras medieval y para la historia del cine de animación.