Lo poco que escribo suele estar precedido de un periodo de reflexión y una observación desde distintos puntos de vista y ópticas sobre aquello de lo que voy a dar mi opinión, pero en este caso no va a ser así. Acabo de terminar de ver el octavo capítulo, es decir toda la serie, y debo decir que es una puta obra maestra. ¿No considero que tenga fallos? Si, los tiene y muchos, pero es una "obra" porqué esta hecha con cuidado y precisión, con el esfuerzo por sacar de un poco de barro una magna escultura, y "maestra" porque tiene mucho que enseñar a todos aquellos que nos avergonzaron con superproducciones como "Alatriste" como se hace un film de contenido histórico con 50 veces menos dinero.
Lo que acabo de terminar de ver es sublime. Intuyo que con medio presupuesto invertido en sacar las recreaciones de las naos un rato al medio del golfo de Cádiz y el otro medio en buscar y arrendar armaduras y armas varias, se ha construido un trabajo que espero que no pase desapercibido para la posteridad.
Me parece maravilloso por dos motivos. El primero es que se expone con pelos y señales el periodo por el que España pasó a formar parte del imaginario de cualquier habitante de la Tierra por los siglos de los siglos. Estoy aburrido de que cualquier país, por pobre o joven culturalmente que sea, tire de su pasado para plasmarlo en la pantalla con cualquier excusa. Joder, hasta los caballos protagonizan películas épicas si sus dueños hablan inglés y nosotros nos la comemos con patatas. Cualquier estudiante conoce mejor el origen de Estados Unidos que las circunstancias del desembarco de Colón y los suyos en el Nuevo Mundo, lo que ello aconteció y como cambió a la Humanidad.
Y segundo es que estoy harto de que me cuenten historias sobre nuestro pasado, lo que yo quiero es que me cuenten la Historia y eso es lo que he visto en esta serie por primera vez. Estatuas en plazas de pueblos, nombres de avenidas, de buques insignias... todo eso que con cientos de capas que el barniz de la corrección política y el aura con el los siglos visten a los que decidimos que serían nuestros héroes queda en infantil cuento tras el visionado de esta serie. Y sabes lo mejor, que me gustan estos nombres mas ahora. Ahora que Nuñez de Balboa, Colón, Elcano, Vespucio o Pizarro han quedado al desnudo como porqueros, embaucadores, arribistas o sanguinarios militares. He conocido a Alonso de Ojeda, cuyo intérprete se come la primera parte de la serie con permiso de Colón, y también a Antonio de Pigafetta, interpretado por un Juan Diaz cuya imitación de italiano renacentista es impagable.
Los españoles masacraron a los pueblos indígenas, abusaron de ellos, los esclavizaron y los aniquilaron. No es necesario recordar que otras naciones europeas cometieron los mismos crímenes y en tiempos más recientes.
Sí, aquello lo hicieron los mismos que salen en monedas y páginas de libros de Ciencias Sociales, y precisamente por eso es necesario recordarlo con todo la puta precisión que sea posible.
Esta serie es seria, o al menos a mi me lo parece. Sin apenas recursos, sin apenas escenarios mas allá de unas paredes de piedra y unas cuantas playas, me han dado una lección de Historia, de cine y de ambición. Bravo.

La leyenda negra va tanto de las mentiras que se cuentan como de la manera tendenciosa de contar las verdades.
Esta serie es del segundo estilo.
La serie es veraz y una buena muestra de los hechos que ocurrieron, por eso le pongo un 8.

Pero al mismo tiempo es la mayor propaganda hispanofóbica que vi en mi vida.
Todo está rodado con el objetivo de transmitir odio a España.

Aparte de que ningún país se retrata a si mismos como criminales cuando muestra su propia historia, cuando muestran la de otros no lo hacen de modo hostil salvo cuando se quiere difamar a un enemigo pasado o presente.
No mas dos ejemplos de muchísimos que podrían mentarse.
Henry V era tan sanguinario y codicioso como cualquier conquistador español, pero jamás lo muestran así en las pelis.
Chingis Khan mató a mas gente que todos los conquistadores españoles juntos. He visto 3 películas sobre el, ninguna hecha por Mongolia, y siempre lo retratan como un buen hombre.

Acá una clara prueba de que estamos bajo un régimen colonial que nos odia.
Y la gente todavía lo vota.

Pésima serie que trata de los primeros treinta años tras el primer viaje de Colón al Nuevo Mundo. Así pues, Cristóbal Colón siguió la ruta hacia Catay y Cipango y se encontró con un continente desconocido, lo que provocó en el mundo un profundo cambio. Si estuvieron los vikingos, o quizás los chinos, los egipcios o los vascos es irrelevante, lo importante es que fue la hazaña de Colón.

Absurdo desaguisado que se puede catalogar como otro clavo cinematográfico dentro de la 'Leyenda Negra antiespañola'. La serie trata de los descubridores y conquistadores pero siempre desde un punto de vista negativo y depredador, empezando por Cristóbal Colón y otros de mayor o menor rango, entre ellos: Fernando Magallanes, El Cano que dio la primera vuelta al mundo, Vasco Núñez de Balboa - éste ejecutado por Pedrerías Dávila- descubridor del Pacifico, Cortés, Pizarro, Alvarado, Pánfilo de Narváez descubridor de la Florida, Ponce de León en busca del elixir de la eterna juventud, Jerónimo Aguilar, Gonzalo Guerrero, Ojeda, Cabeza de Vaca, el cartógrafo Santoñés Juan de la Cosa, entre otros. España dejó un legado irrepetible en forma de fabulosas universidades, hospitales, catedrales con retablos dorados, así como un justo cuerpo legislativo: las leyes de Burgos de 1512 o las bases del derecho internacional humanitario de la Escuela de Salamanca en el siglo XVI, con sus principales representantes y fundadores, pioneros de la lucha por los derechos humanos: Francisco Suárez y Francisco de Vitoria, este último considerado el padre del derecho internacional y homenajeado por las Naciones Unidas; añadiendo la Controversia en el Colegio de San Gregorio de Valladolid, el famoso debate que tuvo lugar en 1551, dentro de la llamada disputa de los indígenas y que enfrentó dos formas antagónicas de concebir la conquista de América, románticamente interpretadas como la de los defensores y la de los enemigos de los indios: la primera, representada por Bartolomé de las Casas; y la segunda, por Juan Ginés de Sepúlveda. Esta serie tendenciosa no quiere resaltar todas estas cosas, regodeándose en lo negativo, en la sordidez, en la explotación, dando una imagen destructora, avara, absolutamente genocida y ávida de oro, centrándose en los abusos, que sí ocurrieron lo fue en sus términos, y conforme en la época en que se vivía.

Entre los continuos despropósitos, imprecisiones y exageraciones que aparecen en la serie están: continuos ahorcamientos, degollamientos, sangrientas masacres, Bartolomé Colón disparando a simples indígenas como si estuviera disparando al tiro al plato. Entre las barbaridades dichas por una voz en off (con palabras creadas por el propio director): que los indios nativos son tratados por los españoles peor que perros; que en los barcos descubridores sólo había gente de mala vida, ladrones y esclavistas. Criticando además la labor evangelizadora de la Iglesia Católica ú olvidándola, y riéndose de Papas como Inocencio VIII que tuvo varios hijos durante el papado y siempre deseoso de beber la leche de una mujer, e incluso apareciendo en primer plano los pechos de una joven cogiéndola la leche a fin de alimentarle.

En cuanto el apartado narrativo, el mismo se desarrolla penosamente, sin orden ni concierto, se pasa de descubridor y conquistador, y para volver de nuevo a lo que se había dejado en otro episodio. La serie resulta pues totalmente descoordinada, desigual, retorcida y francamente deprimente. Añadiendo una fotografía incolora, pálida, oscura, hubiera sido mejor que se hubiese hecho en blanco y negro. Mientras que los actores, todos desconocidos, salvo la ya envejecida Aitana Sánchez Gijón como la reina Isabel de Castilla, se dedican a declamar o a gritar las insípidas frases en un tono rimbombante .

Bien cierto que los mayores propagadores de la leyenda negra son los propios españoles. Véase el caso de esta misma serie, o el de personajes históricos como el traidor Antonio Pérez, secretario de Felipe II, que traicionó a su patria porque no logró los favores que creía merecer o las exageraciones de Bartolomé de las Casas, apóstol de las Indias, pero que en sus inicios abogó por traer negros de África para hacerlos esclavos, ya que no tenían alma. El odio a España tiene sus mayores detractores dentro de nuestra nación, pero estar cerca de algo parecido a la Hispanofilia te pone al mismo nivel que el infame inquisidor Fray Torquemada.

Principal responsable de esta terrible y desastrosa serie es su guionista y director Israel del Santo. El cineasta es un autor presuntuoso, engreído, que escribió y dirigió esta horrible serie, gracias a nefastos consejeros de Telefónica, Movistar, que realmente no puedo creer que financiaran tal bochornoso engendro, -podría ser que alguno de ellos sean parte de la familia-. Así que el propio Israel, sin ninguna preparación, se da a la tarea de escribir una serie histórica de 8 episodios, resultando en desastrosos resultados. He visto muchas series pero nunca una en la que el mismo 'showrunner' sea el director, no así en los largometrajes si es habitual que la escritura y la dirección sean de una misma persona. Pero además, no es solo esta, sino que el también a creado otras series en las cuales también ha expulsado su bilis interior, tal como ¨El Corazón del Imperio¨ en la que se recrea con los aspectos más sórdidos de la época romana incluyendo fuertes imágenes, escenas eróticas, hechos violentos, asesinatos, prostitución y todo tipo de explotación. Así como, ¨Los Templarios¨, en la que estos y los Cruzados aparecen como auténticos asesinos que han venido a expulsar de sus legitimas tierras -España y Tierra Santa- a los siempre pacíficos y buenos musulmanes. Rogaria a este director que dejara su ego, se dedicara a los programas de entrevistas como los que ha hecho sobre ¨Lola¨ y ¨Lina¨ y aparcara los semi-documentales de los que no tiene ni idea, y en los que se permite incluso el egoísta derecho de guionizarlas, dejando lo mismo para los expertos.

Una serie de 8 episodios para 30 años, que se salta partes fundamentales para comprender la conquista y colonización de América, mientras resalta otras que le interesan más, como los asuntos relacionados con el papa Inocencio VIII, que son anecdóticos, y basados en leyendas no confirmadas.

Hay multitud de errores, que no pasan desapercibidos a alguien que conozca la historia y haya acudido a las fuentes.

Aunque la Historia del Descubrimiento de América es un filón de guiones que podrían ser apasionantes, volvemos a perder la oportunidad de disfrutar de una aventura en el más amplio sentido de la palabra. Todos los aspectos técnicos de la serie están muy trabajados, a excepción de las localizaciones tanto en las escenas de España como las de las Indias. Pero el guion falla cayendo en los tópicos de tantas veces. Ya sabemos lo mal vista que está la leyenda negra del acontecimiento histórico mas importante de la historia de España, pero se podría aprovechar la sensación épica y de pura aventura que debieron ser las expediciones de los conquistadores. Nuevamente se centran en resaltar lo “malo” y el maltrato a los indígenas con lo que es imposible empatizar con el aventurero, que queramos o no son nuestros antepasados. Además, se toman licencias dramáticas en el guion afeando hechos que nunca se ha registrado como tal. Por ejemplo, describiendo a Alonso de Ojeda como una suerte de criminal de guerra racista. No se menciona que se casó con la hija de un jefe tribal y tuvo tres hijos, afianzando la integración. No se menciona la aventura de explorar territorios en los que ningún europeo se había adentrado nunca.
En fin, supongo que es más interesante una y otra escena de los enfrentamientos y escaramuzas que obviamente se producirían por el contexto de la época.