Haz click aquí para copiar la URL

Leviatán

Drama Kolia vive en un pueblito a orillas del mar de Barents, al norte de Rusia. Tiene un taller de mecánica al lado de su casa, donde vive con su joven esposa y su hijo, fruto de una relación anterior. El alcalde del pueblo está decidido a apropiarse de la casa y del taller de Kolia a toda costa. Primero intenta comprar el terreno, pero Kolia no está dispuesto a vender. (FILMAFFINITY)
Críticas 82
Críticas ordenadas por utilidad
escribe tu crítica
7
30 de julio de 2021 Sé el primero en valorar esta crítica
El abuso, el egoísmo, la extorsión, la hipocresía, las amenazas y el engaño no son potestad de ningún pueblo sino de un género humano que allá donde se encuentre, vive enfangado por sus bajas pasiones y malos deseos.

El comediógrafo latino Plauto llegó a afirmar que el hombre es un lobo para el hombre, afirmación que desde su época tres siglos antes de Cristo hasta hoy no ha perdido vigencia.

La historia desarrollada en un lugar recóndito de Rusia nos hace ver que los rusos no beben vodka para disfrutar, sino para olvidar, Andrey Zvyagintsev nos muestra la vida rural rusa sin ambages, en zonas áridas y frías en las que las condiciones ambientales no son más duras que las propias vidas de sus protagonistas.

Los deseos propios y ajenos luchan sin cuartel durante todo el film haciéndonos reflexionar sobre las carencias y debilidades de la integridad de las personas, siempre proclives a desfallecer y caer víctimas de sus propias tentaciones.

Una buena película con el único inconveniente de su larguísimo metraje que llega a los 141 minutos.
7
8 de noviembre de 2022 Sé el primero en valorar esta crítica
La definición de Leviatán sería algo así como gigante monstruo mitológico que encarna el mal. Y "Leviatán" nos va a hablar del monstruo, no de un monstruo imaginario con tentáculos o enormes fauces, nos habla de un monstruo mucho más real.

Hablar del monstruo, apuntarlo directamente con la mira telescópica, no es algo habitual en el cine, y no me extraña, hacerlo implica señalar hacia los mandatarios de las instituciones.

Leo en alguna crítica de los "expertos" de los periódicos que en la película se hace un retrato de la Rusia contemporánea. Pero yo lo que he visto es un retrato de las actuales civilizaciones de la modernidad, está ubicado en Rusia, pero se puede extrapolar sin ningún problema a los países asiáticos, América y Europa (incluida por supuesto España, no nos comamos los mocos). Porque las nocividades de las que se habla existen, calcadas, en todas partes.

Me sorprendió hasta qué punto el sujeto común ruso tenía tanto en común con el occidental común, los mismos hábitos (uso del móvil), los mismos tics (la evasión constante, la falta de fortaleza interior).

Leo en una crítica de un usuario de FA que el monstruo es el sistema. Yo pienso que es mucho más certero hablar del Estado. De hecho en la película se alude a él varias veces. Si hablamos de sistema solemos aludir más bien al orden político que organiza la sociedad. En cambio, el Estado sería la estructura de poder impuesta sobre una sociedad. Aunque quizás la frontera entre los dos términos pudiera ser exigua, pienso que la palabra Estado es más concreta y permite visualizar mejor al monstruo.

En "Leviatán" podemos observar algunas de las garras del monstruo: El aparato político (el alcalde), el aparato propagandístico y aleccionador (el pope), el aparato policial-militar (policías), el aparato judicial (magistradas). Cada uno de ellos contiene la oscuridad de todo el conjunto, es decir, cada uno de ellos contiene la misma estructura jerárquica de poder.

¿Y qué pinta el ciudadano en todo esto? "Leviatán" nos da respuestas solventes: El individuo está aislado, el enfrentamiento generacional está servido, el desencuentro de sexos es absoluto, la necesidad de alejarse de la conciencia es lo común (las drogas blandas), la ausencia de valores éticos está ya asumida (la traición), ya nadie confía en sus iguales.

Panorama desolador el que Zvyagintsev relata, pero no por ello menos real. Quizás la cinta peca de poco relieve, y es que no se nos muestra destello alguno de luz esperanzadora.

Trabajo no fácil de digerir, pues el Director nos habla de otra cosa (no del drama aparente), nos habla de un monstruo en el que nadie piensa y por tanto no ve, pero por eso mismo es un trabajo de valor, independientemente de los defectos formales que se puedan hallar (pocos).
7
26 de julio de 2024 Sé el primero en valorar esta crítica
Una película muy interesante que se hace lenta al principio, pero va cobrando fuerza a partir de la mitad donde la historia cobra vida y el principio tiene un sentido, fiel al director se puede ver las imágenes detenidas de cada personaje mostrando diferentes sentimientos, logrando grandes escenas.
Una buena película con una gran moraleja.
Y sobre todo con buenos momentos que calan hondo.
Interesante
9 de marzo de 2025 Sé el primero en valorar esta crítica
Leviatán es una bofetada existencial con el frío cortante del norte de Rusia. No es solo la historia de Kolya, un mecánico que ve cómo el alcalde corrupto le arrebata su casa y su dignidad, sino una disección brutal del poder y la impotencia, donde la ley es una farsa y la fe brilla por su ausencia, con hipócritas por doquier. La cinematografía de Mikhail Krichman nos sitúa en un paisaje grandioso y devastador: el esqueleto de una ballena varada en la orilla es la metáfora perfecta para un lugar donde el Estado onipresente pudre la vida de la gente sencilla. Andrey Zvyagintsev filma con la paciencia de un entomólogo: cada gesto, cada mirada perdida en el vodka, cada silencio es una pieza más del engranaje que aplasta a los débiles. No hay consuelo, solo la certeza de que luchar es inútil cuando el monstruo está en todas partes y la gente no tiene fe.

Pero lo que realmente golpea no es solo la injusticia, sino la resignación, el veneno lento de la desesperanza. La relación entre Kolya y su esposa Lilya se desploma como una casa carcomida por dentro; el amigo abogado, que llega con promesas de ayuda, se convierte en otro símbolo de la traición. El Estado y la Iglesia aparecen no como refugios, sino como tentáculos del mismo leviatán que devora con burocracia, hipocresía y violencia. Y es aquí donde la película se vuelve insoportablemente real: no hay héroes, solo sobrevivientes que se ahogan en una indiferencia viscosa. Incluso los momentos de rabia y resistencia parecen gestos inútiles, gritos que se pierden en el viento gélido del Ártico.

Al final, Leviatán no busca redimir ni consolar. Es cine que hiere, que deja una resaca moral difícil de sacudirse. Uno sale con la impresión de haber visto no solo una historia rusa, sino una tragedia universal: la del hombre pequeño aplastado por estructuras inmensas y amorfas. Incluso recuerda a la incansable denuncia de Kafka en obras como "El proceso" o "El castillo". La Rusia de Zvyagintsev es un lugar donde Dios ha sido reemplazado por la corrupción, donde la verdad no libera, sino que condena. Pero lo más inquietante es que, después de todo, sabemos que el verdadero monstruo es la falta de fe.
7
22 de abril de 2025 Sé el primero en valorar esta crítica
Zvyagintsev construye en Leviatán un fresco desolador de la Rusia contemporánea, donde el poder –ya sea eclesiástico, judicial o político– opera como una fuerza ciega y aplastante, cadi mitológica. Pero más allá de su evidente carga simbólica y su crítica frontal, lo que más impresiona es la manera en que el entorno, ese pueblo perdido en el norte helado, se convierte en un personaje más, omnipresente y silencioso, como una amenaza soterrada.

El paisaje no es solo telón de fondo: define a los personajes, los enmarca en su resignación, los reduce frente a un horizonte inmutable. La fotografía de Mikhail Krichman capta con frialdad milimétrica esa geografía emocional, donde el gris del cielo parece fundirse con el alma de sus habitantes. No hay concesiones ni sentimentalismos: la película exige paciencia, pero recompensa con una densidad estética y moral que rara vez se ve en el cine actual.

Sin llegar a la categoría de obra maestra –hay ciertos subrayados en el guion que podrían haberse evitado–, Leviatán se mantiene como un ejercicio notable de cine político, con ecos de Tarkovski pero con una voz propia. Incómoda, cruda y necesaria.
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow
    Bienvenido al nuevo buscador de FA: permite buscar incluso con errores ortográficos
    hacer búsquedas múltiples (Ej: De Niro Pacino) y búsquedas coloquiales (Ej: Spiderman de Tom Holland)
    Se muestran resultados para
    Sin resultados para