Haz click aquí para copiar la URL

La carretera

Drama El planeta ha sido arrasado por un misterioso cataclismo y, en medio de la desolación, un padre y su hijo se dirigen hacia la costa en busca de un lugar seguro donde asentarse. Durante el viaje se cruzarán con otros supervivientes: unos se han vuelto locos, otros se han convertido en caníbales. Adaptación de una novela de Cormac McCarthy, autor de "No es país para viejos". (FILMAFFINITY)
Críticas 386
Críticas ordenadas por utilidad
escribe tu crítica
9
22 de enero de 2012
7 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
“Si él no es la palabra de Dios, entonces Dios nunca habló”.

La carretera es una historia de esas que no dejan indiferente a nadie, un relato sobre la destrucción del mundo y la vida más allá de esta. Han pasado los años desde que una hecatombe terminó con la apariencia de la Tierra tal y como ahora la conocemos. Un padre camina junto a su hijo hacia la costa con el deseo de encontrar un lugar seguro, escapando del hambre y de los caníbales.

Sin duda alguna, ésta es una de las películas más terroríficas que se han hecho en muchos años, por no decir en la historia. ¿A quién se le ocurre una pesadilla más aterradora? Es cierto que hay decenas de ficciones apocalípticas. En algunas aparecen zombis, en otras vampiros, extraterrestres, máquinas exterminadoras… Pero aquí se presenta la criatura más cruel existente: el ser humano. Y no ha de parecernos una idea disparatada y poco verosímil la de comernos unos a otros. No sorprende incluso que aquellos que se autodenominan “los buenos” sean capaces de dejar a gente hambrienta detrás, a merced de “los malos”. ¿Acaso no sucede esto actualmente? Así es el hombre, egoísta cuando se trata de sobrevivir y egoísta cuando se trata de salvaguardar la vida de los más queridos. De ahí se argumenta y se hace creíble las acciones de un padre que, por un lado intenta inculcar buenos valores a su hijo, y que por otro no duda en dejar de ser compasivo con los demás si es necesario para protegerle. Esta idea es mostrada en una de las escenas más impactantes de toda la película, cuando dejan desnudo a la intemperie a un ladrón y se alejan con sus súplicas de fondo. Afortunadamente, la bondad e inocencia del niño demuestran que no todo está perdido. Un niño que se asombra al ver el arcoíris, que desconoce el azul del mar, que no ha tenido infancia ni ropa acorde a su edad. Un papel que cumple a la perfección el joven actor Kodi Smit-McPhee, que junto con Viggo Mortensen, hace que empaticemos plenamente con sus personajes. El resto del reparto también logra buenas interpretaciones, desde la correcta Charlize Theron en los flashbacks, que podrían suprimirse sin perder la efectividad, hasta el emotivo Robert Duvall. Sin embargo, difícil sería considerar estas actuaciones tan destacables sin el paisaje desolador que les acompaña. La fotografía de Javier Aguirresarobe envuelve de oscuridad el ambiente, hace llegar al espectador el frío y el miedo, pero a la vez sentimos el calor y la esperanza en las escenas en que padre e hijo se sientan junto al fuego.

Esta road movie hace gala de una buena narración llena de momentos de tensión, suspense, miedo e incertidumbre, momentos de crueldad, de amor y esperanza. Una historia de personas sin nombre, todas ellas reducidas a la misma condición de supervivientes. Una historia donde un niño es la única justificación para seguir vivo. Una historia de un camino que no empieza y que no acaba, porque poco importa el pasado, y nadie sabe el futuro.
8
13 de noviembre de 2021
7 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
El novelista Cormac McCarthy publicó en 2006 una de las novelas postapocalípticas más aclamadas por los lectores. Ganadora del Premio Pulitzer, era solo cuestión de tiempo que se realizara una versión cinematográfica. Así se fraguó The Road, una adaptación muy fiel a la obra original en cuanto a narración y ambientación. John Hillcoat, director de la película, no solo logra llevar el texto de McCarthy a la gran pantalla con gran destreza, sino que consigue realizar una de las mejores películas sobre el futuro postapocalíptico y supervivencia. Todo ello contado con frialdad, pesimismo y sin entrar en detalles de por qué el mundo en el que vivimos ha llegado a tal situación.

The Road nos muestra esta historia a través de la relación entre un padre y su hijo que, obligados por el desolador panorama, se dirigen al sur en busca de alguna esperanza únicamente con un carro y una pistola con dos balas, una para el chico y otra para el padre, por si las cosas se ponen feas, ya que el canibalismo ha florecido en algunos seres humanos. Y esto es lo más interesante de la película, ver cómo un padre debe enseñar en una situación límite a su hijo por el bien de su supervivencia, dejando a un lado la confianza y compasión por los pocos habitantes que permanecen vivos y que ya no se sabe quién es el bueno y quién es el malo.

Viggo Mortensen y Kodi Smit-McPhee están inmensos en sus respectivos papeles. Del primero se podría considerar la mejor de las interpretaciones de su carrera. Mortensen simplemente se come la pantalla. Por otra parte, no siempre en el cine se logra que los personajes interpretados por niños salgan naturales y creíbles, ya que muchas veces se cae en el típico crío sabelotodo y con vocabulario y salidas más típicas de los adultos. No es el caso del pequeño Kodi, quien convence al espectador dando vida a un chico lleno de preguntas y ansioso por encontrar a los buenos en un mundo de maldad. Para acabar con el tema de las interpretaciones, se ha de decir que los personajes secundarios son anecdóticos pero significativos, es decir, que aparecen muy poco en pantalla, pero sus escenas enriquecen el conjunto del filme para conocer mejor a los dos protagonistas. De esas escenas o personajes secundarios cabe destacar a Charlize Theron y Robert Duvall, que en pocos minutos se las apañan para lucirse y nos recuerdan por qué siempre es un lujo verlos, aunque sean en intervenciones tan breves como reverberaciones de relámpagos.

De ritmo pausado, pero a la vez muy entretenido porque siempre está pasando algo, The Road presenta una atmósfera y ambientación grisácea muy lograda que hace que el aspecto visual sea de lo mejor del género. Una película que más que respuestas plantea preguntas sobre cómo actuaríamos nosotros en tal situación extrema no podrá decepcionar a los amantes de este tipo de historias, y menos aún a los que disfrutaron de la novela, que verán en la película un retrato minuciosamente cuidado de lo que Cormac McCarthy quiso transmitir.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
En cuanto al final, tras la muerte del padre y el encuentro del chico con un hombre (interpretado por Guy Pearce), puede haber lugar para la esperanza. Pero a esta se le cierra la puerta cuando conocemos a la mujer que acompaña al hombre junto a sus dos hijos. Ella nos revela que hacía tiempo que estaban siguiendo a los personajes de Viggo y Kodi, pero no es hasta la muerte del primero cuando ya se acercan al chico. Quizá porque Viggo suponía una amenaza debido a que protegía a su hijo, quien es visto como una presa fácil por la familia que el chico tiene ahora justo delante de sus ojos. Su fin está cerca.
3
6 de febrero de 2010
34 de 62 usuarios han encontrado esta crítica útil
Antes de ir a ver esta película miré las críticas que había en filmaffinity y vi que la ponían bastante bien. Me ha sorprendido un montón, yo no sé que está pasando con el cine pero creo que el nivel de exigencia está bajando de una manera abismal. En toda novela, en toda historia, en toda película, tiene que existir una introducción, un nudo y finalmente un desenlace. Y todo esto tiene que estar bien ligado con un hilo argumental. Alguien me podría decir, que las cosas se pueden reinventar y no tienen que seguir ese patrón, pero sinceramente las grandes películas de la historia y actuales siempre lo han tenido.

Esta película para mí es plana, vacía, lenta, sin cambios de ritmo, se puede resumir con que un padre y un hijo quieren escaparse de la crueldad de un mundo apocalíptico. La actuación de todos los personajes, incluido el hijo es brutalmente mala, por no decir vergonzosa. Una película que es así de plana, almenos nos tendría que haber sumergido en un mundo apocalíptico, con una fotografía de la naturaleza más sublime. Por poner un ejemplo, hijos de los hombres o soy leyenda es una película del mismo estilo, pero el director nos sumerge mucho más en un ambiente apocalíptico.

La película no me provocaba tristeza, todo era previsible, nada me sorprendió, esta película era como un documental falsamente interpretado. Estoy muy decepcionado con el cine de hoy en día y que la gente valore bien películas sin guión e interpretaciones pobres, películas que el director no te sorprende por ningún lado y que cuando acaban, acaban como esas canciones que van con estrofas repetitivas y que van bajando el volumen progresivamente, es decir directores que no saben acabar una película.

El final, vergonzoso, lamentable. Por favor, no acabamos las películas para contentar las masas. Si pudiera pediría que me devolvieran el dinero. ¡Basta ya de películas sobre valoradas!
9
6 de febrero de 2010
13 de 20 usuarios han encontrado esta crítica útil
No voy a hablar sobre la relación de la película con su novela correspondiente, porque no la conozco.

Pero sí que diré que la película transmite de forma excelente la desesperación de la situación y sus personajes, la desesperanza del viaje a ninguna parte, la tristeza... Para hacerlo llegar, se sustenta en dos grandes pilares:


- La dirección artística. Una fotografía excelente, con unos colores lúgubres y tenebrosos, escenarios desoladores... una maravilla que transmite fielmente lo que desea transmitir al espectador.


- Las actuaciones. Simplemente soberbio Viggo Mortensen. De aplauso. Lo que nos cuenta la película perdería mucho de su significado sin el sentimiento que aporta su protagonista. Hay que mencionar también a un -para mí al menos- desconocido Kodi Smit-McPhee, que realiza también una interpretación sensacional, y que supone un contrapunto perfcto para su padre en el film. Viggo y Kodi se compenetran como pocas veces puede llegar a verse en una pantalla, en sus papeles de padre e hijo. Tampoco habría que olvidar a Robert Duvall y a Michael K. Williams, que resuelven con sobresaliente sus escasos papeles en la película.



Además de imbuir en el espectador ese desasosiego y agonía constante, de esa vida que no es vida, sino una cuenta atrás para la muerte, The Road es un excelente ensayo sobre la perdida de unos valores y una moral nacidos en -y pertenecientes a- la vida en sociedad, y que se vuelven caducos y poco a poco mueren, cuando dicha sociedad se ha extinguido. De la lucha impotente de un padre por ofrecerle algo por poco que sea a su hijo ante una situación ante la cual se ve superado. De cómo resiste la inocencia de un niño ante una barbarie que no alcanza a comprender.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
En definitiva, le daría un "excelente"... pero me jodió un poco el final pasteloso. En mi opinión, desmerece en gran medida a lo que transmite el resto del metraje.
8
7 de febrero de 2010
11 de 16 usuarios han encontrado esta crítica útil
Mi fascinación por las palabras nubla, en parte, mi afición por la imagen. Tanto es así que, después de haber líedo una gran novela, contada con la magia y profundidad de un verbo contundente y recio, me es muy difícil aceptar su metamorfosis (adaptación) al lenguaje visual cinematográfico. No obstante, y con muy pocas excepciones, el cine ha logrado superar a la literatura (especialmente, en el cine negro, y algún dramón infumable convertido por Douglas Sirk o Cecil B. De Mille, en obras de arte).
En el caso que nos ocupa, THE ROAD es una magnífica película, con una puesta en escena deslumbrante y unos ecenarios logrados -hasta la extenuación, diría yo, de un apocalipsis-; la honestidad con que está rodada en exteriores, el dolor y la angustia, la desesperanza y la lucha, retratados con la fuerza de los personajes (Viggo Mortensen está excepcional, y el chico que le acompaña, también), ceniza por todas partes, y en todas partes, fuego arrasador y destructor. El bien y el mal en perpetua y milenaria lid, simples y planos, sin aristas: es un fin del mundo en toda regla: la imagen atrapa al espectador por su dureza, pero también por su veracidad. Qué haríamos si estuviéramos en ese lugar y en esas condiciones? No hay paz, ni reglas, ni siquiera libertad, sólo silenciosa supervivencia, con apenas unos pocos valores o principios que inculcar a la única esperanza: el chico.
Cinta valiente, pero que no logra el impacto de la palabra en la novela de Cormac McCarthy. Una excelente adpatación, con licencias necesarias (no hay en la novela mención alguna a una bella y desesperada esposa, interpretada en la película por Charlize Theron, al principio; ni familia acogedora, al final, con un demacrado y feo Guy Pierce, en plan Noé).
LO MEJOR: los extraordinarios escenarios -elegidos meticulosamente-; la sobria y grave interpretación de nuestro Alatriste, acompañado de un Kodi Smit-McPhee con mirada inteligente y limpia (en un mundo caótico, feroz e inmundo).
LO PEOR: ciertas libertades en el guión adaptado la siguen haciendo muy americana (en el uso que solemos dar a este gentilicio poco gentil).
Si no han leído el libro, hagan el favor de hacerlo. Luego, como yo hice, vayan a verla al cine. Si logran no compararlas en exceso (como yo sí he hecho), disfrutarán (sufrirán) doblemente.
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow
    Bienvenido al nuevo buscador de FA: permite buscar incluso con errores ortográficos
    hacer búsquedas múltiples (Ej: De Niro Pacino) y búsquedas coloquiales (Ej: Spiderman de Tom Holland)
    Se muestran resultados para
    Sin resultados para