Black Mass: Estrictamente criminal

"Black Mass: estrictamente criminal" es una gran película por muchos motivos, algunos dirán que es la mejor interpretación de Johnny Depp en toda su carrera (y tendrán razón), otros dirán que es un retrato acertado de una época y una gente (y también tendrán razón), otros asegurarán que ni el propio Scorsesse hubiese rodado mejor esta historia de gánsters de segunda (y puede que estén completamente equivocados) pero el motivo por el que "Black Mass: estrictamente criminal" es una buena película es porque consigue conectar con el espectador cuando aquello que cuenta, está tan desconectado de nuestra cultura. Todos los personajes de esta película respiran autenticidad (incluso el mas breve secundario), hay violencia contenida, hay traición, miedo, orgullo, ira, egoísmo... a todos los personajes les mueve un interés egoísta. La vida es algo hermoso pero también es algo sucio, de segunda división y criminal (como demuestra su acertado título en castellano). "Black Mass: estrictamente criminal" es una película realmente entretenida aunque algo turbadora. Personalmente no me convence ese (de nuevo maquillado) Johnny Depp pues aunque su interpretación es soberbia, esas lentillas, esa prótesis y esos dientes, me desconectan del personaje. De todas formas "Black Mass: estrictamente criminal" es como la versión seria de "La gran estafa americana", una suerte de remake en clave menor de las películas de gánsters de Scorsesse. Un ejemplo de película entretenida y un buen acercamiento al cine negro.

En un reparto con muchísimas caras conocidas, Johnny Depp destaca por encima de todas ellas. Su interpretación de "Whitey" Bulger pone los pelos de punta en más de una escena, ganándose un lugar de honor entre los villanos más significativos de los últimos años. La caracterización realizada, con el maquillaje, mirada y tono de voz empleado, le confieren ese aspecto siniestro y amenazante que no abandona en ningún momento del metraje. Junto al actor natural de Kentucky, destacan Joel Edgerton y Rory Cochrane.

El primero, como el agente del FBI John Connolly, personaje que se crió con el mafioso en el mismo barrio y al cual admira desde que este le salvó de una paliza en su niñez. Encanto que continua al copiar en cierto sentido el modo de vida de Bulger, con lujos, lenguaje y agresividad muy parecida a la del mafioso. Incluso adopta las formas de vestir de cualquier miembro de la Cosa Nostra, manicura y corte de pelo incluido -recuerda al personaje interpretado por Steve Van Zandt en la serie Los Soprano-. Por su parte, Cochrane interpreta al lugarteniente y mano derecha del protagonista, un personaje muy sobrio que recuerda al interpretado por Ray Winstone en Infiltrados.

El filme narra el ascenso del líder de la banda de Winter Hill en el crimen organizado de Boston y el control de los negocios ilegales por parte de la misma. Para ello tuvo que pactar con el FBI y convertirse en informante de la agencia, ya que ambos tenían un objetivo común a eliminar: la familia Angiulo. A partir de ahí comienza el planteamiento moral, ya que los agentes federales encargados de controlar o vigilar a Bulger hacen la vista gorda con muchos de los delitos que éste o algunos de sus muchachos cometen. Asimismo, el oficial enlace con el mafioso, Connolly, cuya simpatía hacía la organización criminal le hacen parecer más un infiltrado del hampa dentro del departamento de justicia que un agente de la ley.

El papel de James 'Whitey' Bulger es representado en algún momento del filme como una especie de Robin Hood de Boston, admirado y respetado por gran parte de sus vecinos, como en la escena en la que se baja del coche para ayudar a una anciana a la cual conoce de toda la vida. Un tratamiento más humano del protagonista, que se complementa en sus relaciones tanto con su hijo como con su madre, pero que queda eclipsado por el monstruo sanguinario y calculador que lleva dentro.

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Cuando Johnny Depp interpreta un papel de cierta seriedad y no colabora con Tim Burton, se convierte en uno de los mejores actores de su generación. Esta obra es otra muestra de ello. Con referencias de películas como Blow, Infiltrados , Training Day o Mystic River entre muchas otras, este sobresaliente film del joven pero experimentado Scott Cooper deja al espectador pegado a la pantalla de principio al final. Me aventuro a decir que igual que pasó con Denzel Washington en 2001 y su Día de Entrenamiento, Johnny Depp recibirá, al menos , una nominación al Óscar pero Black Mass no será un film de renombre, igual que sucedió con Training Day aunque Denzel ganara el Óscar.

Lo mejor: sus intérpretes, una excelente fotografía y una magnífica ambientación
Lo peor: faltan escenas más crudas de mafiosos
Te gustarán si te gustan las películas de gánster y mafiosos: El padrino, La entrega, Contraband, Camino a la perdición, etc.
Una historia basada en hechos reales siempre vende, y si es de un mafioso más aún. Está bien contada, con planos típicos del estilo (venganzas, traiciones, asesinatos, bares, "reuniones de trabajo"…).
El reparto actoral está genial, pero lo de Depp es algo aparte. Parece que tras un periplo de películas por el Caribe y demás productos menores vuelve a lo grande. Un verdadero crack.
Una buena película, aunque quizás podía serlo más con un director más atrevido, ya que la historia que tienes delante es muy buena.

Como amante del género gánster y como nostálgica de la serie "Los Soprano", sé que difícilmente se volverán a producir películas y series como la que acabo de citar, "El Padrino", "Uno de los nuestros", "Scarface", "Una historia del Bronx" y las demás clásicas del género, pero hoy he venido contenta del cine tras ver "Black Mass", quizá porque hacía mucho tiempo que no estrenaban películas de este corte.
Sin embargo, no me ha resultado nada original ni nada del otro mundo, de hecho, si has visto otras parecidas sabrás cómo acaba la cosa y a quién se cargan y a quién no, pero está hecha con muy buena intención, con ganas de revivir o resucitar el género, y solamente por eso hay que agradecérselo al director.
Las actuaciones son muy buenas, ninguna forzada, destacando la de Johnny Depp (irreconocible), Joel Edgerton y Benedict Cumberbatch (la verdad es que tiene un elenco muy atractivo).
Interesante,entretenida,sobresaliente, pero no matrícula, eso solo se puede dar a los grandes clásicos, aunque espero que alguna película vuelva a igualar el nivel de éstas. ¡Larga vida al género!