El pacto

Por suerte para Nicolas Cage ha acabado el año 2011, annus horribilis donde ha estrenado con poca fortuna En Tiempo de Brujas y Furia Ciega, y ha visto como sus dos últimos proyectos han ido directos a las estanterías de los videoclubs: Bajo Amenaza y esta El Pacto. En realidad tampoco parece que el 2012 le vaya a ir mucho mejor viendo como le ha ido con la secuela de El Motorista Fantasma. El caso es que El Pacto es el enésimo thriller de su carrera, dirigido por Roger Donaldson (Dante's Peak), cuenta en roles secundarios con actores como January Jones, Guy Pearce, Jennifer Carpenter y Harold Perrineau. Como curiosidad, produce Tobey Maguire.

Will Gerard (Cage) y Laura Gerard (Jones) son una feliz pareja de casados de clase media/alta. Una noche, la mujer, volviendo a casa del trabajo, es asaltada y violada por un delincuente. En coma en el hospital, en la sala de espera, a Will se le presenta un tal Simon (Pearce), perteneciente a una organización que proporciona justicia en este tipo de casos que quedan sin resolver por la mala labor del cuerpo de policía, le ofrece la posibilidad de vengarse del violador sin mover un dedo, solo a cambio de ponerse a sus servicios para algún pequeño favorcillo en el futuro. Qué decir tiene que cuando llegue el momento de saldar cuentas, el personaje de Cage no verá con buenos ojos la tarea que quieren que desempeñe: un asesinato.

De la última película que vi de Cage y sobre la que escribí, el thriller Bajo Amenaza, menté que pese a estar bien realizada nos llevaba por caminos transitados con anterioridad en largometrajes de corte similar, sin aportar atisbo alguno de originalidad. La misma historia se repite en El Pacto, con personaje perseguido por la justicia tratando de demostrar su inocencia, enfrentado a una organización que mueve los hilos en la ciudad de Nueva Orleans. Digamos que lo nuevo de Roger Donaldson sigue el camino de la notable El Fugitivo pero lejos de sus logros.

Hay veces que en la creación de un largometraje todo se pone de cara para crear un truño de considerables proporciones. Si a la decadencia de la carrera de Cage le sumamos el esquemático guión de Robert Tannen, la torpe realización de Donaldson (las escenas de acción cámara en mano, su poco elegante uso del zoom, la persecución carente de velocidad), y a ello le sumamos un reparto con una January Jones en plan florero, un Guy Pearce cada vez más perdido, y una Jennifer Carpenter carente de protagonismo, nos queda como resultado una de las peores propuestas del pasado año 2011 (y sí, esta es de las veces en las que en todo el metraje de una película he encontrado un solo aspecto positivo a destacar).

Pelicula que pretende mantenernos entretenidos en base al oficio de su director, Roger Donaldson (El Gran Robo) y a un buen actor como Nicholas Cage. Pero ¿qué pueden hacer ellos con un guión tan raquítico?

Hay ciertos elementos que generan interés al principio, como una átmosfera intrigante y la doble vida que debe llevar en secreto el profesor de literatura en busca de venganza. Pero no se sostienen por mucho tiempo. Las sutilezas se van esfumando y sólo nos queda la acción sin ninguna profundidad psicológica. Cage lucha a brazo partido por mantener el nivel de la cinta, pero es como Hiniesta jugando por la selección de Benín: la catástrofe (cinematográfica) es inevitable. Como tántas veces.

"El pacto", además de una serie española del 2010 donde se narra el embarazo premeditado y con extrañas intenciones de un grupo de adolescentes, y otras producciones más, es una película que dirige Roger Donaldson y protagoniza Nicolas Cage. Así Cage vuelve a la acción con un thriller a su medida, la de hombre corriente que se ve envuelto en complicaciones cuando decide aceptar ese pacto que le ofrece un misterioso personaje: vengar la violación de su mujer con la muerte del culpable, a cambio de futuros "pequeños" favores. Lo que es obvio es que los favores no serán tan pequeños como parecen al inicio.

Así, "El pacto" no es que sea ni original, ni rebuscada pero casi siempre resulta amena. Aunque debemos pasar por alto el discutible punto de partida, ¿no lo es más fácil a este "grupo de ciudadanos que buscan justicia" liquidar a la gente directamente, en vez de forzar a las personas a que se conviertan en asesinos? A mi me parece rebuscado, máxime cuando tampoco hay nada que obligue a los susodichos a meterse en esta organización. Pero ya digo, aunque no hay una verdadera trampa y al final la película se alarga en exceso, resulta amena si lo que buscamos es algo de acción y suspense fácil.

Ahora bien, vamos a lo más importante: ¿es guapa January Jones? Antes de conocerla, me ha pasado desapercibida, como en "Sin identidad" (2011) o "Última Sospecha" (2001) pero también me ha parecido mona, es el caso de "Ejecutivo agresivo" (2003). Sin embargo, no me gustó nada de nada, en "X-Men: primera generación" (2011), como Emma Frost, vamos, un horror que me traumatizó. Y sin embargo, medio año más tarde la "redescubrí" en "Love Actually" (2003) donde está muy guapa y hasta sexy. Con juventud y unos kilos de más si era una belleza antes pero ahora, ya treintañera y delgada, no.

Estamos ante una de esas películas que no pasarán a la historia, ni por buena ni por mala. Nicolas Cage parece empeñado en rodar todo lo que haga falta con tal de ganar lo suficiente como para mantener su tren (o trenes) de vida. Este es uno de los grandes errores de "El pacto": un Nicolas Cage que no funciona, con el ceño fruncido y sin gestos, aderezados por una perilla para integrarle mejor en el papel de profesor inteligente y aficionado al ajedrez.

Todo surge con el ataque a la mujer de la protagonista por un desconocido; buscando venganza, el profesor acepta la propuesta de acabar con el violador por parte de un extraño personaje interpretado por Guy Pearce (lo mejor de la película) pero a cambio tendrá que devolverle el favor cuando lo necesite. Hasta ahí todo bien, incluso nos recuerda aquella película de Hitchcock "Extraños en un tren". Buenas ideas y buen panorama. Pero de pronto, todo empieza a suceder porque sí, sin hilar y sin explicaciones.

Como he dicho, lo mejor de la película es Guy Pearce, un actor tan versátil que en mi opinión podía haber hecho los dos papeles principales sin ningún problema.

Lo peor, Nicolas Cage y los secundarios, que están de pena. Jennifer Carpenter es poco más que un maniquí y January Jones está tan preciosa como insustancial.

¿Qué es lo peor que le puede ocurrir a una pelicula? Que la hayas visto hace menos de una semana y cuando te pongas a escribir algo sobre ella no recuerdes ni el final. Pues eso... Bueno, eso y Nicolas Cage, lo cual no arregla nada...