Justo antes de Cristo (Serie de TV)

Acordándose del humor absurdo que tanto abrazaban los Monthy Phyton en la obra inmortal e imperecedera ‘La Vida de Brian’, Juan Maidagán y Pepón Montero han creado su propia versión, españolizando el humor y utilizando a su exponente chanante máximo: Julián López (un tío que es capaz de hacerte reír con una mueca). Así, ‘Justo antes de Cristo’, por su corta duración y simpatía, es una de esas series que merece, incluso, ver del tirón y sonreír ante las patéticas andanzas de Manio y el ejército romano apostado en Tracia.

Cada uno de sus seis episodios tiene, al menos, un gag potente que te arrancará alguna carcajada. Es muy tonta, muy simple y tampoco se la puede pedir mucho (ojo al cameo de Arturo Vals, de los más acertados). Es más, los recursos utilizados en el rodaje son limitados, pero eso no hace que el resultado sea cutre, sino aprovechado.

‘Justo antes de Cristo’ os robará poco tiempo y, además, pasaréis un rato muy entretenido. Tampoco hacía falta pedirla más.

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Otro ejemplo mas que demuestra que el problema del cine español no es la falta de presupuesto sino la falta de talento. Porque la serie lo tenia todo para haber sido algo realmente bueno, y sin embargo falla el guion.

Puede haber sido casualidad, pero tras ver varios episodios, Justo antes de Cristo me ha recordado peligrosamente a una webserie que vi hace años, con mismo argumento y ambientación llamado De Pontis. Eso sí, está sin tener la mitad de la mitad de presupuesto que la de Movistar suplía está carencia con un guión brillante y unas interpretaciones más que buenas.

Es por eso que esta nueva serie Original de Movistar me ha parecido malisima. Pero mala mala. Le he puesto un dos porque me gusta la historia y la recreación y el hecho de haber querido hacer una serie en clave de comedia se agradece. El resto, un mojón. En España los guionistas no tienen ni idea de hacer comedia de situación como en USA y menos aun que dure 30 minutos. Se nota que han querido hacer una comedia de tono parecido y les ha salido la tipica españolada costumbrista ( una chorrada si quieres exportarla al mercado extranjero), con un humor facilon y sin gracia alguna. Los personajes al igual que las situaciones están como desdibujadas, mal desarrolladas planas en muchos casos. Si a eso le sumas unas interpretaciones mediocres (especialmente Julian Lopez) creas una buena serie para quemar en la chimenea.

El primer episodio ha sido el mejor, creaba expectativas de que tras un comienzo tibio la serie cogiese ritmo en los siguientes. Pero no.
Al final se ha convertido en una especie de chistes demasiado largos y en una formula que rara vez funciona: Hacer que todo y todos parezcan ridículos tooodo el rato, con un chiste tras otro, tras otro, uniformes que le vienen grandes, situaciones absurdas... etc.

Y sin contrastes, pues no hay gracia. Generalmente la cosa funciona cuando los protagonistas cómicos se enfrentan de formas "divertidas" a un entorno serio o al menos neutral.

En Friends, How I met your mother, Modern Family, Dos hombre y medio, The IT Crowd, My Name Is Earl, Aquí no hay quien viva, La que se avecina... Todas ellas tienen ese factor en común; personajes "normales", con ciertas rarezas o caracteres que hacen que su forma de enfrentarse a la realidad y sus problemas nos resulte cómica y familiar, pero que conservan una personalidad fuertemente definida, lo que hace que nos riamos cuando ya nos imaginamos por dónde pueden salir ante ciertas circunstancias.
Por ejemplo "el pescadero, Recio" en Aquí no hay quien viva, o "Amador".

Pero en esta serie todos lo personajes están como para contar o más bien representar torpemente chistes muy largos... Y en cuanto a discursos, menos es más.
Creo que en "petit comité", entre los que han escrito la serie, todo han sido risas en su planificación y que a ellos les parecían muy divertidas las situaciones, pero luego hay que "traducirlas" para el público, que se sentará a verla sin llevar cinco horas riendo sobre chistes de romanos.

A todos nos ha pasado eso, llegar a un grupo de amigos que "con el pavo" andan desternillados con algún tema, pero que si no llevas tres horas de cañas con ellos, sonríes, pero sabes que no tiene ni mucho menos tanta gracia para los demás.