Norbit

¿Hay que decir algo? Pregunto, ¿hay que opinar algo sobre ésto? ¿Es posible que estemos todos de acuerdo? ¿Alguien no piensa que es un bodrio sin gracia? ¿Pura basura presentada como jovial que entristece de lo mala que es? Se supone que hay que respetar todas las opiniones, empero si hay algún demente que piense que este estiércol es agradable y jocoso, ¿en serio que habría que respetar su opinión? Yo creo que con respetarle a él valdría, a la opinión la maltratamos y humillamos.

Por favor, si alguno de vosotros, queridos lectores, tenéis síndrome de Diógenes, no esperéis a comprar la película.

Una película de Eddie Murphy. Dónde hace de varios personajes, como en el caso del "Profesor Chiflado", y otras. En esta película Eddie, aparecerá de pequeño, como es abandonado por una madre joven que no reciba ninguna ayuda en la puerta de un orfanato. Es recogido por un japonés que le cría y su amiga, la da en adopción.
Viendose de mayores. Él casado con una maltratadora. Pero todo, volverá a cambiar.


Divertida y animada.

Es una película que mientras va avanzando se torna incómoda. Los personajes están estructurados de forma extremista y superficial, donde el personaje principal es el más desdichado pero noble, su esposa es el ser más molesto, descarado y enorme que te puedes imaginar; mientras que su primer amor es la criatura más amable, hermosa y delgada que podría encantar a cualquiera, por lo tanto todo está lleno de estereotipos y menos profundidad en todo el contexto. Posee un humor que funciona en su mayoría pero que no cualquiera puede soportar.

Sólo quiero decir que me parece inaudito que películas como ésta existan, me da asco ver estas cosas, a esto no se le puede llamar cine de ninguna forma.
Sólo quisera añadir que me parece aberrante que Cuba Gooding Jr. tenga un Oscar (sobretodo si estaba Edward Norton nominado) y que haga esta basura de películas y unas interpretaciones tan insulsas y asquerosas.

Mi nota: 0.

Lo mejor: .......
Lo peor: Todo.

¿Dónde se halla el secreto de la buena degustación fílmica? En el saber distinguir a los distintos géneros que se dispersan en este arte, entendiendo las disimilitudes entre una película costosa de otra con presupuesto acorde a la elaboración de un entretenido, divertido y digerible filme de comedia con no mayores intenciones que las de recrear un contexto que roza lo patético en el buen sentido de la terminología. Norbit, en cuestión, no teme caer en esta tentadora propuesta y redobla todo esto al grado de lo más bizarro y fanfarrón sin tener complejo alguno en el qué dirán. ¿Qué es lo atractivo de las obras que toman esta apoyatura? Que se animan a distorsionar a la realidad y encuentran su sentido en caracterizaciones absurdas, historias de las más clichés y descaradas, tramas que no aportan absolutamente nada nuevo al amplio repertorio cinematográfico y, para colmo, direcciones que no parecieran estar al tanto de todo esto. ¿Cuál es la diferencia? Que estas direcciones sí se encuentran al tanto de la circunstancia, y basándose en lo dicho, proponen una película que es atractiva a partir del síndrome de la ridiculez que las personifican y la gracia de jugar con ello y hacer un producto de calidad humorística, no más que eso. Allá aquellos que se quedan esperando obras maestras año tras año y no se dan el gusto de esperarlas relajándose un buen rato con este tipo de cintas domingueras que cumplen su más fiel propósito de divertir a la audiencia.