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Las cuatro plumas

Aventuras Harry, un oficial británico, decide abandonar el ejército antes de que su regimiento se embarque con rumbo a Egipto para luchar contra los rebeldes. Su prometida y tres compañeros de armas le envían cuatro plumas blancas que simbolizan la cobardía. A partir de ese momento, Harry emprende peligrosas aventuras con el fin de poder devolver las plumas y recuperar el honor perdido. (FILMAFFINITY)
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Críticas 24
Críticas ordenadas por utilidad
6 de febrero de 2019
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Bajo el gobierno del carismático líder musulmán, Muhammad Ahmad, conocido como El Mahdi, Sudán decidió, mediante una yihad, acabar con la larga ocupación otomana y egipcia, y durante el asedio a Khartoum, derrotó y eliminó al general inglés, Charles George Gordon, su principal opositor… pero, tras algunas victorias adicionales, apenas seis meses habían pasado tras la toma de Khartoum cuando, El Mahdi, cayó enfermo de tifus y falleció. Aprovechando la disminuida fuerza conque quedaron los rebeldes (derviches) de Sudán, Lord Kitchener de Inglaterra, preparó una ofensiva que aniquilaría a los seguidores del líder religioso durante la batalla de Omdurmán en 1898. Se dice que, por orden del propio Kitchener, la tumba del líder de los derviches fue profanada… y en su oficina se vio, luego, el cráneo de El Mahdi sirviéndole de tintero.

Pero, en lo esencial, y debido a que, Zoltan Korda, era un hombre consecuente y enemigo del colonialismo, no fue el hecho histórico lo que lo animó a dirigir esta película producida por London Films (empresa regentada por su hermano Alexander), sino la especial relación que se produce entre cinco seres humanos que ven la vida, las tradiciones y el valor de muy distintas maneras. Cada uno va a influir en los demás… y es bien probable que, su concepción de ciertos valores cambie para siempre. Pudo, pues, ser esta o cualquier otra guerra y el eje central funcionaría casi igual.

Se partió de la novela, “The Four Feathers” (1902), considerada por muchos la obra maestra del inglés, A.E.W. (Alfred Edward Woodley) Mason, y de su adaptación se ocupó, R.C. (Robert Cedric) Sherriff (con la colaboración de Lajos Biró y Arthur Wimperis) quien, fácilmente pudo haber incluido algunas de sus experiencias como soldado en la Primera Guerra Mundial.

Siempre obsesionado con la fidelidad a los hechos históricos, locaciones, vestuarios, etc., Korda se esmeró al punto de que repetía escenas completas si se descubría algún tipo de anacronismo; y rodó, <<LAS CUATRO PLUMAS>>, exactamente en los sitios del desierto de Sudán donde se dieron las batallas. Entre los miles de extras, también se dio el lujo de servirse de gente muy mayorcita que sobrevivió a la Batalla de Omdurmán (cuarenta y un años atrás), y en algunos planos cercanos es posible ver a algunos de ellos.

El diseño de producción (a cargo de su otro hermano, Vincent) es impecable, y la composición de imágenes, vestuario... y banda sonora, también enriquecen un filme que se ha propuesto exaltar el valor oculto en los hombres nunca imaginados… y doy fe de que, Zoltan Korda, lo ha logrado magníficamente.

El personaje protagónico es, Harry Faversham, un joven perteneciente a una familia de “héroes militares” generación tras generación, a quien su padre siempre visionó como un cobarde, y quizás esto lo convenció de que, en realidad lo era. Pero, tras renunciar al ejército que parte para Sudán, recibe cuatro plumas (significando: ¡gallina!, ¡cobarde!) de sus mejores amigos y de la mujer que ama, y esto lo sacudirá desde el fondo de su alma.

John Clements (Harry), Ralph Richardson (John Durrance) y June Duprez (Ethne) son los protagonistas de una película hecha para trascender y a la que, luego, se sumarán títulos como “This Land is Mine” (J. Renoir, 1943), “The Red Badge of Courage” (J. Huston, 1951), “Lord Jim” (R. Brooks, 1965) y otras tantas, en las que se busca demostrar que, el valor es cualidad de todos los hombres, pero, algunos necesitan ciertas presiones para demostrarlo… y entonces ¡témanles!
Luis Guillermo Cardona
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3 de junio de 2020
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Seguramente sirvió para reclutar incautos en el siglo XX, en el ultimo siglo de la expansión Británica XVI-XX. Un personaje que me cuesta comprender que frente a un niño se hable de muerte tan coloquialmente talvez no entiendo un linaje tan castrense que se hable tal o cual familiar fallecido en esta u otra batalla que la doctrina este tan arraigada en la sociedad solo creíble en ese majestuoso imperio británico, nutra dos niños antagonistas el valiente tonto y el cobarde cauto.

La película hace referencia a la caída de Jartum capital de Sudan por manos mahdistas en 1885, el ejercito ingles es acuartelado y parapetado en Egipto, han pasado 10 años provistos de mas logística se declara la reconquista del Sudan al mando de Horatio Kitchener con 8000 ingleses 17000 egipcios 50 cañones 10 ametralladoras, el conflicto estalla en Omdurman un conclave antes de Jartum contra un ejercito de 50000 Derviches con su líder Abdallahi ibn Muhammad tuvieron dos embestidas al frente contra el Nilo y otro en avanzada por retaguardia termino en una carnicería para los Derviches 25000 bajas entre muertos heridos, que no pudieron ni acercarse a menos de 50mts.

Unos de estos recluta era nuestro protagonista que temeroso de la guerra decide renunciar, no me queda claro este facilismo castrense pocas veces visto evitaría bajas y deserciones, sus conocidos tres amigos y novia lo tachan de cobarde, repudiado decide emprenderá un viaje de redención para recuperar todo lo que perdió. He de decir que estas películas cada vez se ponen mejor en el tiempo, mis remakes favoritos 4 Plumas 1939, 1977, 2002 y la única al que se renombro "Tormenta sobre el Nilo" (1955). por mi parte recomiendo verlas de forma descendente la mejor Superproducción de Reino Unido una Joya Bélica.
John
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5 de junio de 2020
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
157/06(04/06/20) Buen film de aventuras dirigido por el húngaro Zoltan Korda (producida por su hermano Alexander Korda), con guión de R.C. Sherriff (“Adios Mr. Chips”), con diálogo adicional de Lajos Biró (“La última orden”) y Arthur Wimperis (“La Sra. Miniver”), que adaptan (con muchas libertades) la novela homónima de 1902 de Alfred E.W. Mason, considerada como la mejor de sus numerosas adaptaciones cinematográficas esta fue la cuarta, tras las de J. Searle Dawley (1915), René Plaissetty (1921) y la de Cooper, Mendes y Shoedsack (1929), siendo posteriores las de Don Sharp (1977) y Shekhar Kapur (2002). Destacando su espíritu del metraje su espíritu aventurero al llevarnos a escenarios exóticos, gracias a un gran despliegue de medios empezando pro que se rodó en Sudán con cientos de extras que se manejan en vistosas coreografía de enfrentamientos, con balaceras y peleas cuerpo a cuerpo, con batallas sensacionalmente (para el tiempo) filmadas, con espectaculares cargas de jinetes de camellos, con una fotografía en technicolor sensacional en su cromatismo fulgente y en el modo de rodar tomas panorámicas que hacen quedar empequeñecido al hombre entre el desierto, todo ello tratando temas universales como la cobardía frente a la valentía, la amistad frente a la intolerancia de comprender las acciones de nuestros compañeros, el heroísmo, el sacrificio por el sentido del deber, y por supuesto el patriotismo. Y es en esto último que me fijo para encuadrar la película en el contexto de su estreno el 18 de abril de 1939, pocos meses antes de la Invasión nazi de Polonia que dio comienzo a la WWII, y con ello la entrada en conflicto bélico del Imperio Británico, con loa al militarismo (no llegándose a entender que un hombre pueda renunciar al ejército por ética y principios morales, sin tener que acudir el resto a insultarlo por ello), a la defensa de los valores pan-ingleses, ello en pos de hacer una llamada de atención ante lo que se venía encima. Pero con esto conlleva una visión también pro-colonialista, visión paternalista del tercer mundo, únicamente ‘la raza superior inglesa’ puede gobernar a estos ‘salvajes’ (ataque de cinismo). Pues al comienzo del film han echado a los británicos de Khartum (la mayor derrota de las fuerzas inglesas en África), siendo esto una afrenta a los anglo, teniendo en mente recuperarla para poner su Union Jack en el mástil de la capital de Sudán, pero porque (fue colonia inglesa hasta su independencia en 1955)? Que les da derecho a ello? Pero en este sentido hay que darle esta licencia de su tiempo para poder disfrutarla, para embarcarte en un desarrollo ágil, con ritmo fluido, proyectando Korda épica en su minutaje en su mezcla de odisea en busca de redimir su honor, el protagonista y la epopeya de las conquistas colonialistas. En su debe pondría un final apresurado y poco valiente, así como algunas lagunas. Georges Périnal y Osmond Borradaile fueron nominados al Oscar a la Mejor Fotografía en Color.

El inicio tiene lugar en una Inglaterra cuya opinión pública está conmovida por la caída de Khartoum a manos de los derviches y por la muerte del famoso general Gordon. Otro general del ejército, Faversham – obsesionado por la continuidad del apellido dentro del ámbito castrense – descubre con espanto que su único hijo Harry (John Clements), se siente más atraído por la poesía y los valores humanos que por la carrera militar. Unos años después y tras la muerte de su padre, Harry, enamorado de la joven Ethne (June Duprez), hija de militar asimismo, que también es deseada por el capitán John Durrance (Ralph Richardson), decide por convicción renunciar al ejército en el preciso momento en que se llama a las armas para reconquistar el Sudán. Harry es despreciado por sus compañeros y su prometida, cuyo padre, el General Burroughs (C. Aubrey Smith) es un altanero fanfarrón que trata con desprecio al que iba a ser su yerno. Además de Durrance, los oficiales Thomas Willoughby (Jack Allen) y Peter Burroughs (Donald Gray), en señal de su desprecio, le envían tres plumas blancas, símbolo de cobardía para los ingleses, a la que se une la de su prometida Ethne Burroughs (June Duprez).

La puesta en escena es brillante, empezando por el magnífico diseño de producción (no acreditado, el menor de los tres hermanos Korda) de Vincent Korda (“El ladrón de Bagdad” o “El Día más largo”), rodando en interiores lujosos de los Denham Studios (U.K.), y sobre todo por lo inédito en Sudan (colonia inglesa entonces), en sus desiertos inhóspitos y en el Nilo. Cuarenta soldados del 1.er Batallón del Regimiento de Surrey del Este fueron usados con uniformes de época para escenas en las que resistieron el avance Derviche en masa; Estos lares atomizados por la formidable fotografía en Inglaterra de Georges Périnal (“El ladrón de Bagdad”) y en Sudán de Osmond Borradaile (“Los invasores”), dotando de épica a las imágenes en sus tomas generales, con colorido extraordinario en los fotogramas, sacando lo mejor de los personajes en los primeros planos; La música es obra del magiar Miklós Rózsa (13 veces nominado al Oascar, ganándolo en tres ocasiones: “Recuerda”, “Doble vida” y “Ben-Hur”), con genuinos tonos marciales, exaltando las imágenes.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
TOM REGAN
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9 de noviembre de 2020
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
La he visto muchas veces y no me canso de verla. Me encanta el colorido esplendoroso. El idealismo de los personajes. El amor sincero entre Edna y Harry. El retrato certero del cobarde que se vuelve temerario para recuperar su honor y el amor perdido. Las exóticas aventuras por el Nilo y sus aledaños. El buen perder del amante frustrado. Todo el clasicismo y la sobria elegancia de la época histórica en que se ambienta. Las excelentes interpretaciones de unos personajes auténticos, que trasladan al espectador unas contagiosas emociones a flor de piel. En suma, es un filme muy recomendable para disfrutar del género aventurero.
Luis
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2 de julio de 2019
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Mi abuela, una dama de 90 años de edad (ahora en septiembre cumplirá los 91), no paraba de hablarme de esta película, y del impacto que le supuso verla a la friolera edad de 12 años. La versión que vimos, me dijo que estaba recortada o censurada y que algunos momentos no sucedieron como ella los recuerda, según ella que era más violenta. Yo le dije que fue la única versión de ése año que encontré, y que podría ser que tuviera razón. Aún estoy intentando averiguar si es la "verdadera" o no...

La verdad es que, para estar producida en el 39', tengo que decir en el aspecto técnico está bastante bien, si la comparara con películas producidas en los 50' o 60' me reiría. Me parece increíble que siendo una película tan antigua (aunque he visto todavía más antiguas) tenga tanta calidad de fotografía como de dirección. Las secuencias de batalla están bien rodadas (hubiera dicho muy bien si yo perteneciera a ésa época) y las actuaciones convencen.

Una puesta en escena muy lograda, la ambientación es perfecta y la cámara bien situada en todo momento. En esta historia, hay temas expuestos como la valentía, el heroísmo, la amistad o el patriotismo. Términos bien desarrollados dentro del relato y que juegan un papel muy importante para entender la historia. Además de proponer estas variantes, es buen cine de "evasión", ya que según me he informado, esa fue la sensación que dio pero no la que, en un principio, tenían pensada.

En resumen,
Después de tantos años, volvió a disfrutarla, tenía muchas ganas de volver a verla, aunque tal vez, no es la versión que ella vio por aquel entonces, pero conseguí que volviera a revivirla y a recordar esos momentos de antaño.
Ivan CV
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