El bar

Podría haber sido una de las mejores de Alex de la Iglesia, pero creo que la elección del casting de actores falla. La idea es buena. el entorno y guion magnifico, pero excepto Terele Pavez, me sobra todos los interpretes; Mario Casas, Secun De la rosa, Carmen Machi y Blanca Suarez (que brilla mas por su físico que por su actuación) me sobran. aun así le daré buena nota porque me entretuvo y me lo pasé bien.

A Álex de la Iglesia hay que reconocerle su tesón en la difícil búsqueda de financiación en esto de hacer películas, para no faltar año tras año a la cita con las pantallas “digan lo que digan los demás”, parafraseando a la canción de su amigo Raphael. Si para ello hay que sacar el logo de Coca-Cola las veces que haga falta pues se saca y ya está. El director ha llegado a un punto de displicencia personal (visionar sus últimas entrevistas) en el que la autocrítica tiene poco margen y al que no le guste que se aguante.

Rara es, en la mayoría de sus propuestas que no salgo decepcionado por lo que pudo haber sido y no fue, por lo bien que rueda los malos guiones y me apunto pasar de su próxima bizarría. Pero algo tendrá que ya son 12 de sus 15 trabajos con este en el que vuelvo a picar. Quizás esas situaciones surrealistas, esos personajes esperpénticos, caricaturas de la fauna nacional, con predominio de los castizo y sainetero a los que adereza con todo tipo de condimentos sanguinolentos y escatológicos…

Si pudiera aconsejarle, que no es el caso, le diría que acortara los metrajes, que los buenos puntos de partida mejor no estirarlos si no se sabe desarrollarlos y se acaba por tirar de clichés y quemar a los personajes. No es que “El bar” sea un no va más de originalidad pero si que promete una buena liebre y acaba dándote gato. Y aunque en mi caso tengo cinco y los adoro, hay que ser serios aunque nos lo tomemos todo con humor negro.

El elenco se esfuerza por arañar con oficio algo del estereotipo de sus personajes y situaciones y mantener el barco a flote aunque sea entre la mierda de las alcantarillas.

cineziete.wordpress.com

película entretenida y que genera expectación en el espectador,pero que a su vez el director disipa esas sensaciones demasiado pronto, transformándola en una película aceptable y plana hasta el final.

Conclusiones 
Mala hostia a raudales, el magistral regreso del gran Alex que tanto desaparece y reaparece a lo largo de su carrera, esta cinta se queda en lo más alto de sus trabajos con su característica mala baba que dota a los personajes de un realismo malsano y al mismo tiempo de una personalidad tan distopica que dispara un torrente de sensaciones y emociones que te atrapa en la historia llena de matices que hacen la historia tan poco convencional (podría recordara vagamente a el Ángel del maestro Buñuel) como hipnótica, la historia también cargada de crítica y drama social aunque sabe disolverse en algo mucho más interesante no cayendo solo en la critica facilona tan de moda.
Lo que nos Enseña
Que el Vasco sigue en forma es un hecho al ver esta cinta, que deja de lado la comedia tonta y facilona (que también se le da bien) y se va a lo que de verdad domina, la mala hostia el humor negrísimo y la creación de ambientes sórdidos y las situaciones insospechables pero perfectamente verosímiles en sus manos, un total dominio de la situación que sabiamente conduce a los personajes y al propio espectador a un constante goteo de dudas y respuestas que te hace disfrutar hasta el final, una cinta redonda en su guion retorcido y furioso, sus creaciones de personajes, de situaciones, de dirección, de fotografía.Por otro lado es capaz de dibujar en un reducido espacio y con un limitado número de personas con toda amplitud las miserias tanto de la podrida sociedad como del ser humano y sus más bajos instintos en una situación limite.Cuando hace cine en serio es un maestro clara muestra es esta cinta junto con su balada triste, obras punteras del fantástico actual.
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Sin duda es la mejor película de Álex de la Iglesia desde "Las brujas de Zugarramurdi", pese a un par de fallos uno de los cuales ya está presente en los títulos de inicio (da demasiadas pistas sobre la trama posterior, algo absolutamente innecesario para el espectador y que se podría haber evitado). El segundo, lo explico en spoiler 1.
No obstante, el argumento deriva hacia una base totalmente verosímil y el guión juega muy bien al despiste en el comienzo (ver spoiler 2), para desembocar en un profundo análisis sobre la propia condición humana y el instinto de supervivencia. Porque no nos engañemos, estamos ante un thriller terrorífico con auténticos momentos de tensión impactante, pero camuflado de comedia por sus puntuales toques de ese humor negro característico del director bilbaíno. Eso sí, un thriller de ésos que te atrapan de principio a fin.
El reparto, cada uno en su papel, está estupendo y muy bien presentado como esos transeúntes anónimos y desconocidos a los que unirá un destino común. Blanca Suárez, pese a que su personaje no resulte creíble cuando cuenta su historia (ver spoiler 3), demuestra ser una de las más destacadas actrices de su generación, "desnudándose" incluso sólo por exigencias del guión; Mario Casas tiene un rol que evoluciona muchísimo durante la película; el irreconocible Jaime Ordóñez está de Goya como ese borracho que tiene delirios de profeta bíblico y que ciertamente recuerda a la antipática agorera de "La niebla" de Stephen King; Secun de la Rosa y Carmen Machi, notables secundarios; Joaquín Climent y Alejandro Awada, dos tipos bien construidos en cuanto a su perfil psicológico; y de Terele Pávez, qué vamos a decir, sobre todo cuando trabaja con quien sabe sacar el máximo partido de ella.
Mi nota: 8,4