Misión imposible: Fallout

Cada nueva misión parece que quiere dejar atrás a la anterior. Para que cada entrega se supere, el trabajo que se tiene que realizar es titánico. Desde la cuarta hasta esta última, las mejoras han ido evolucionando a la velocidad de la luz, con un ritmo trepidante y que te deja pegado para ver estas nuevas aventuras.
Son dos horas y media de pura acción. Al equipo de siempre se incorpora Henry Cavill, el cual se une a la lista de grandes actores que han aparecido en esta franquicia.
El viaje de Mr Hunt a través del mundo nos deja secuencias con altas dosis de adrenalina, a la vez que sabe detenerse para explicarnos los sentimientos de los personajes.
Otro de los aciertos del film es la banda sonora a cargo de Lorne Balfe, que dota a las escenas con grandes dosis de acción (The Exchange) o con temas que nos muestran los sentimientos de los personajes (We are never Free). Quizás algunos la tildarán de tener un sonido similar a la de la saga de: El caballero Oscuro (Balfe fue músico adicional en esta saga).
Como puro espectáculo no defrauda en ningún momento, quizás a veces se hace poco creíble alguna secuencia, pero se le perdona debido a que el guion no deja al azar ningún aspecto.

Aquí llega la verdadera Mission: Impossible. Sin Jeremy Renner, pero con Henry Cavill, con Simon, Ving, Vanessa, el regreso de Michelle, Alec, Angela Bassett y de nuevo Sean Harris tenemos la mejor película. Con buenísimas interpretaciones, la mejor música de la saga y como siempre Tom haciendo sus misiones imposibles en las escenas.
Si algún amante de este género no le gusta esta película es porque se ha equivocado de género. La más recomendable de la saga

Habrá quien entienda que 'Mission: Impossible' es un saga agotada. Habrá quien diga que Cruise, más próximo ya de los sesenta que de los cincuenta, debería optar o empezar a hacerlo por papeles más acordes a la edad que de verdad ostenta. Y hasta seguro que hay más de un amante de lo 'vintage' que diga que como la serie original, nada de nada. No seré yo quien reniegue de esto último sabiendo de los encantos que lo antiguo puede llegar a ofrecer, limitaciones varias aparte. Sin embargo, respecto a las dos primeras cuestiones, los números cantan. La sexta parte de la franquicia ha vuelto a ser enormemente productiva y su talludito protagonista sigue dando piruetas mejor que nadie, como a él le gusta, sin dobles y a riesgo de no salir ileso, como hemos visto en ese mal salto durante el rodaje por el cual el mismo ha sido detenido durante varios meses.
Pero como no es solo una cuestión de cifras, ni de oferta y demanda, la producción queda de sobra acreditada cuando tras casi dos horas y media uno se queda satisfecho de haber contemplado un espectáculo a la altura de lo esperado, con acción al límite, sorpresas y mucha diversión. Cada nueva incursión del señor Hunt en el mundo hostil mejora la anterior, todo un reto, estando todos los patrones comunes superados una prueba tras otra. Un recorrido longevo hasta llegar aquí en el que el continuismo de algunas tramas y situaciones hacen indispensable estar al día de quién es quién para entender ciertas cosas. Algo no eximente de poder aportar nuevas incorporaciones que dificulten el desarrollo de la misión, como el agente Walker (Henry Cavill), un espía pragmático y expeditivo, quien proporciona un juego fundamental para que las palabras misión e imposible tengan de nuevo sentido al ser combinadas.
El carrete parece tener aún cuerda. 'Fallout' exprime un guion con alternancias bien encajadas para la conjura y la acción y a un Cruise mejor que el primer día, el grano en el culo imposible del 'Sindicato' y sus acólitos. Y, ante todo, sigue consiguiendo con sus arriesgadas secuencias que la música eterna de Lalo Schifrin suene en modo bucle en mi cabeza.

La saga ya nos tiene acostumbrados a que el super hombre que encarna Tom Cruise sea completamente invulnerable y tenga más vidas que un gato.
Es acción por acción sin más lo que pasa es que la resuelve muy bien, las escenas están realizadas de manera impecable y si uno se deja transportar a ese mundo ficticio e irreal, pues ¡Hala! echa pa´lante.
Para los amantes del cine con palomitas.

Seis pelis después sigue siendo una saga sólida y con capacidad para entretener.
Robo de plutonio por terroristas (típicos malos), con un guion aceptable, con localizaciones espectaculares, situaciones extremas y agentes dobles.
Tiene buen guion y es entretenida, J.J. Abrams, le aporta a la saga el recurso de salvarse en el último momento y sabe como usarlo.

Y si una vez más, Tom Cruise sufrió un accidente en el rodaje.

Lo mejor: el uso en las escenas de acción sin usar los cromas.
Lo peor: El malo un poco flojo.